Juan de la Rosa Mateos nació el 16 de octubre de 1912 en la localidad de Grazalema, un enclave de la provincia de Cádiz en el corazón de la comarca de Ronda. De una familia de conocida solidez católica perteneciente a la burguesía local, con la edad de nueve años, y aportando una inteligencia despierta, ingresó en el Seminario de Málaga, en 1921, siendo a la sazón obispo de la diócesis Manuel González García, un prelado de gran arraigo social y humanitario en Málaga, cuyas enseñanzas fueron un ejemplo en la vida de Juan de la Rosa.

La fractura nacional de la Guerra Civil le obligó a retornar a su rincón natal, en 1931, pero pronto se estableció en Ronda, donde en un principio impartió clases particulares, gracias a su latín de los nueve cursos del Seminario. Poco tiempo después le fue ofrecido un puesto de encargado del modestísimo Monte de Piedad de la ciudad, cuyo anterior titular lo había abandonado por no verle perspectivas de futuro. Pronto la modesta y filantrópica empresa, tras partir de la nada en los años caóticos de 1936, bajo las riendas del nuevo gestor empezó a consolidarse y a buscar nuevas orientaciones, a establecer contactos con las clases más necesitadas, abriendo paulatinamente las puertas a la faceta de Caja de Ahorros. Tras este breve período que transcurrió entre 1936 y 1945, la entidad experimentó una increíble expansión geográfica y financiera, luchando, contra mil trabas, administrativas y políticas, primero en la conquista de las cercanías, luego la comarca y más tarde, ya saltando barreras, para establecerse en Jaén, Ciudad Real o Madrid. [...]