Vitelli, Giovan Luigi. Chiappino Vitelli. Marqués de Cetona (I), en el Gran Ducado de Toscana. Cittá di Castello (Italia), 1519 – Zierickzee (Holanda), 1.VII.1575. Condotiero e ingeniero militar.
Perteneció a una de las más poderosas familias de Umbría, en Italia. A los veintitrés años vengó al asesino de su padre, de la familia Bracciolini, y se hizo célebre por este asesinato.
Entró al servicio de los Médicis como soldado, en la corte de Cosme de Médicis, gran duque de Toscana, y combatió con valor contra la Armada turca en 1544 para expulsarla de la Toscana. Era aficionado al arte de las fortificaciones, de cuyos trabajos se sirvió el duque Cosme.
En 1553 estuvo al mando del presidio de Piombino. Después combatió en la guerra de Córcega pagado por Génova contra los franceses. Regresó a la Península porque había guerra en Siena, combatiendo bajo las órdenes del gran duque.
En 1555, al frente del ejército del emperador, combatió contra la nueva República de Montalcino, conquistando Pienza y Campiglia. Echó a los franceses de la fortaleza Sant Ippolito. Conquistó la plaza de Porto Hercole para los españoles, que pasará a formar parte de uno de los presidios de Toscana y por la que, en aquel mismo año, le fue dado el mando de la Marema toscana. Combatió en la guerra de Siena hasta el año 1557, cuando la ciudad fue entregada por Felipe II a Cosme de Médicis. Chiappino había desarrollado una actividad no sólo de soldado sino de estratega e ingeniero militar.
En 1558 Cosme le envió a España como embajador para dar sus condolencias en la Corte española por la muerte de Leonor de Francia, hermana de Carlos V. Felipe II le hizo gobernador de la República de Montalcino con el encargo de entregar estas tierras al gran duque de Toscana. Tomándolas en nombre del Rey de España y a sueldo del duque, indujo con diplomacia a esas tierras a entregarse de manera pacífica. En 1559 está en Ferrara como embajador del gran duque. En 1560 apaciguó los motines de los Orsini, condes de Pitigliano, y el duque en reconocimiento le nombra marqués de Cetona.
En 1564 se encuentra en las galeras de Santo Stefano en la toma del Peñón de Vélez de la Gomera. Felipe II le toma en gran consideración y le quiere dar un cargo a su servicio en la guerra de África, pero éste lo rechazará.
En 1567, para apaciguar a los Países Bajos, Felipe II busca hombres competentes y recurre a los servicios del valeroso soldado italiano Chiappino Vitelli, quien pasa a formar parte del ejército de la Monarquía de Felipe en su calidad de condotiero. El Rey le nombra maestre de campo general, primer grado en el Ejército después del duque de Alba. Pronto se ganará la estima de dicho duque. En Bruselas, cuando Alba tiende una emboscada para apresar al conde de Egmont, cuenta con la ayuda de Vitelli. Alba le envía a Amberes, junto con Cervelloni y Paciotto para construir su fortaleza.
Nada se hacía en este campo sin su opinión porque se le tenía como a un gran ingeniero militar. En 1568 fue enviado a Frisia para restaurar la posición española tras la derrota del conde de Arembergh. Confirmándole en su cargo le envió a Maastricht a vigilar el paso del Mosa.
En 1569, el duque de Alba envía a Inglaterra a un soldado como Vitelli para presionar ante la reina en la negociación que se estaba llevando a cabo sobre la restitución de los tesoros de la flota española que el gobierno inglés se había incautado el año anterior. La reina Isabel le acogió muy cortésmente pero recelará de él, por su calidad de soldado. Volverá a España sin conseguir sus objetivos. Más tarde regresará nuevamente a Flandes.
En 1572, en el cerco de Mons, será herido en una escaramuza por una bala de arcabuz. Se hizo llevar por sus soldados en parihuelas para dirigir el ataque contra el señor de Genlis y su ejército hugonote que venían a ayudar a sus correligionarios, cercados dentro de la ciudad de Mons. El esfuerzo hizo que empeorara de sus heridas, por lo que tuvo que ir a Bruselas a reponerse. En 1573 tras la victoria de Haarlem, los soldados españoles se amotinan a causa de la falta de pagas y él con su autoridad los apacigua.
Al año siguiente, le fue encargada la empresa de Zelanda para establecer comunicación entre el ejército y la flota católica. En 1575 participando en la toma de Zierickzee, mientras unos soldados le transportaban en una silla por un canal para visitar los trabajos de fortificación que se estaban efectuando, sufrió un accidente, yendo a caer al fondo de una trinchera.
A consecuencia de este accidente murió a la edad de cincuenta y seis años en una fortaleza cercana a donde fue transportado.
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José Miguel Cabañas Agrela
