Nacido hacia 1492, Adrien era hijo de Ferry de Croÿ, mayordomo mayor de Carlos V desde 1515.

Con tan sólido apoyo, al joven aristócrata no le costó integrarse en la Corte del joven Carlos de Gante. Así, hacia 1517 era ya chambelán a su servicio, calidad en la que formó parte de su séquito en el primer viaje a España de don Carlos, realizado en ese año. Dos más tarde, en 1519, regresó a Flandes con la misión de asistir a la regente, doña Margarita, en el objetivo de conseguir la púrpura imperial para Carlos V. Obtuvo también en este tiempo su entrada en la Orden del Toisón de Oro. Su lealtad al César era incuestionable, quien apreciaba sus dotes y lo empleaba en los más diversos cometidos. En 1521 fue enviado a tratar la delicada cuestión del cambio de lealtades del condestable de Francia, negocios diplomáticos que le llevaron además en 1523 a Inglaterra e Italia, Roma (1524), Inglaterra y Pizzighetone, donde estaba el rey francés prisionero (1525). En 1525, ya con este bagaje en su haber, en ese mismo año de 1525 el Emperador le dio entrada en su Consejo de Estado, en cuyo seno se distinguió Croÿ por sus posiciones antifrancesas. [...]