Hijo de Ferrante o Fernando I de Nápoles y de Isabel de Chiaramonte. Nieto de Alfonso el Magnánimo de Aragón. Casado con Isabel de Balzo, princesa de Altamura, fue un hombre pacífico para los convulsos tiempos que le tocaron vivir, inclinándose más por la cultura, como lo demuestra el que reuniera una importante biblioteca, que por las tareas diplomáticas y políticas. A causa de las pretensiones francesas sobre el reino de Nápoles y a la invasión de dicho reino por Carlos VIII, presenció los breves reinados de su hermano Alfonso II (1494-1495) y de su sobrino Fernando II (1495-1496) —llamado Ferrandino por los napolitanos—, al que sucedió en el trono. Durante su reinado, Nápoles fue invadido por Luis XII de Francia.

Solicitó en vano ayuda a su pariente Fernando II el Católico de Aragón, el cual lejos de dársela se entendió con el monarca francés para repartirse su reino por el tratado de Granada de 1500. En esta actitud de Fernando el Católico primó el que se creyera con más derechos que su sobrino segundo al trono napolitano, a la vez que también influyó la actitud favorable de Fadrique a Francia, y el hecho de que incluso buscase el apoyo otomano. [...]