Croix (o Lacroix), Maximiliano de la. Bruselas (Bélgica), 25.X.1698 – ¿Galicia?, IV.1768. Teniente general de los Reales Ejércitos, comandante general del Cuerpo de Ingenieros, inspector general de plazas y fortificaciones y caballero de la Orden de Santiago.
Era hijo de Dionisio de la Croix, teniente coronel de Dragones, y de Josefa Grandvarlet.
Ingresó en el servicio como cadete en el Regimiento de Dragones en febrero de 1715 y en junio de 1717 fue nombrado subteniente de Artillería. En 1720 abandonó el regimiento y fue empleado como ingeniero en las minas de Guadalcanal, pasando posteriormente como “pretendiente” a la Corte, ascendiendo en 1726 a subteniente. En ese año pidió el mando de una Compañía que quedaba vacante, alegando su invención de un sistema para poner grano a las piezas de artillería desfogonadas.
Promovido en agosto de 1727 a teniente en el Primer Batallón del Regimiento de Artillería, recibió al día siguiente el grado de capitán, aunque de hecho continuara ejerciendo como teniente sin mando de compañía.
El 21 de diciembre de 1728 Maximiliano de la Croix presentó su proyecto de “Máquina para poner granos de hierro con más rapidez a los cañones desfogonados”, acompañado de explicaciones sobre la máquina. Fue construido un prototipo de esta máquina en Barcelona.
En 1730 elevó un memorial al rey solicitando el ascenso a teniente provincial como recompensa a su invento, ascenso que se le concedió el 28 de junio de 1730. Sin embargo, en 1731 la máquina inventada por De la Croix dejó de fabricarse, por lo que solicitó al ingeniero general, Jorge Próspero Verboom, que se examinase e informase sobre su invento.
En 1732 fue nombrado comandante de Artillería de la plaza de Orán y posiblemente fue el introductor de su invento durante la reconquista de la referida plaza, iniciada en abril de 1732. Su ascenso de capitán a coronel comandante de la plaza de Orán sin pasar por teniente coronel no era habitual, siendo al parecer por influencia del marqués de Castelar. En noviembre de 1732 resultó gravemente herido en una salida frente a los argelinos, recibiendo por su actuación la felicitación regia.
De la plaza de Orán pasó a Aragón, igualmente como comandante de Artillería en junio de 1735, cursando una proposición para organizar a su costa en Zaragoza dos compañías de artilleros de 100 hombres, tipo coronela, mandadas por dos tenientes coroneles. Solicitaba a cambio el grado de brigadier, el mando transferible de una compañía y las patentes de oficial en blanco, solicitud que no fue contestada.
En junio de 1738 solicitó formar parte del Ejército de operaciones que pudiera organizarse con motivo de las tensiones diplomáticas existentes con Inglaterra y el ambiente de guerra. Pedía ir integrado en una Comisión formada de oficiales de Estado Mayor por el duque de Montemar para estudiar el estado de la artillería de Canarias y proponer soluciones. En noviembre de ese año, el duque de Montemar organizó la Real Junta de Artillería, en principio sin autorización regia, que no llegaría hasta enero de 1739. Entre sus componentes estaba M. de la Croix como teniente provincial.
En 1740 era propuesto como comandante del tren de campaña en la proyectada reconquista de Menorca (que finalmente no se llevó a cabo) y en 1745 se le nombró teniente general de Artillería, siendo ascendido en diciembre de 1747 a mariscal de campo. En 1750 presentó, junto con el ingeniero Miguel Marín, los proyectos de ampliación de la Real Fundición de Artillería de Bronce de Barcelona.
En 1756 era nombrado el conde de Aranda director general de Artillería e Ingenieros, unificando así los dos Cuerpos facultativos. Desde este cargo, el 23 de octubre de 1756 fundó la Real Sociedad de Matemáticas de Madrid, con la intención de contribuir a la mejora de la formación de los alumnos y, especialmente, una revisión y nueva elaboración de los textos o manuales a emplearse en la enseñanza. Sin embargo, ocurrida la dimisión de Aranda en febrero de 1758, ocupaba su puesto interinamente el mariscal de campo perteneciente al Cuerpo de Artillería Maximiliano de la Croix, quien tenía un concepto totalmente distinto de la finalidad que debería tener la institución, pues la entendía como una sociedad científica en la que deberían incluirse científicos y hombres de letras que fomentaran los debates sobre los avances científicos y humanísticos. Las consecuencias de esta controversia, unida a problemas presupuestarios, llevaron a la supresión de la Real Sociedad Militar de Matemáticas por un decreto de fecha 17 de noviembre de 1760.
En 1758 De la Croix había sido nombrado director interino de Artillería e Ingenieros quedando también, como se ha señalado, al frente de la Sociedad Matemática de Madrid, y el 20 de septiembre de ese año realizó el proyecto de un cañón presentado en el “probadero” del fuego.
Siguiendo con su actividad como artillero, el 14 diciembre de 1759 diseñaba las “proporciones a que deben arreglarse las balas y cañones por calibres regulares entre el servicio de tierra y el de marina” y el 21 de febrero de 1759, un cañón de hierro del calibre 4 para tierra.
También trabajó Maximiliano de la Croix como ingeniero, realizando diversos planos y proyectos: Plano y perfil de la Batería de San Antonio situada en la Huerta de los Melones en el centro de la bahía de Sta. Cruz de Tenerife, 19 de enero de 1760; plano y elevación de la fachada principal del cuartel de Caballería de Santiago de Compostela, según se halla en el primero del año 1760, 12 febrero; diseño en el solar de la Miranda para la construcción del probadero y tinglado en que probar reconocer y custodiar los cañones y bombas de las fábricas de Liérganes y la Cavada, suprimiendo la que existe en triguero, por ser impropia por su situación; plano y perfil de unos hornillos para fabricar el cobre llamado Roseta como se practica en Alemania y demás regiones del norte, 4 abril de 1761; Diseño de un cañón con tallas y explicaciones a que han de arreglarse las fundiciones de Liérganes y La Cavada y un cañón del calibre 36 y 10 pies de longitud, 11 septiembre de 1761.
En 1763 fue nombrado ingeniero general, cesando en el cargo al ser nombrado el 22 de julio de 1766 capitán general de Galicia. Durante su etapa como jefe de los ingenieros, con sede en Madrid, tuvo como ayudante al teniente de Ingenieros Mariano Lleopart. De nuevo con su actividad como ingeniero realizaba: Cálculo el coste que podrá tener el cobertizo o tinglado en la ciudad de La Coruña, realizando también un plano de él. Se construirá para colocar el carruaje, cureñaje y otros efectos de artillería que se hallan a la inclemencia del tiempo, abril de 1763; Plano y perfiles del Frente de la Pescadería, en la Coruña y plano y perfiles y elevaciones de la puerta principal de La Coruña y sus cuerpos de guardia, 1764; Plano del Puerto de Gijón, 1765. El 2 noviembre de 1765 comunicaba en carta al marqués de Esquilache la situación del Fuerte de Finisterre junto con los de San Damián y Ribadeo y el Cuartel de Infantería de Lugo; realizaba también el Plano del puerto de Lastres, en Asturias, en octubre de 1766.
Finalmente, bajo su mando se desarrollaron las obras del Frente de Tierra de La Coruña, siendo autor de los siguientes planos y documentos entre 1764 y 1768: Plano del Frente de la Pescaderia de [la] Plaza de la Coruña con su proyecto, 20 de febrero de 1764; Plano del Puerto de Gixon en la Costa del Principado de Asturias, manifestando su estado actual por los puntos de Carmin, él de su proyecto con puntos negros, y él de este posterior Dictamen respectante á las reparaciones, e inovaciones que en el mismo se proponen para su mayor solidez y facilidad de su entrada, segun se distingue por las líneas negras dada de Amarillo, Madrid, 7 de Octubre de 1765; Plano del Puerto de Lastres en la Costa y Principado de Asturias por el qual se hace demostracion de su actual estado, y de las obras que se consideran para su solido restablecimiento, Madrid 10 de Mayo de 1766.
Obras de ~: Soporte del mortero aprobado para pruebas de Polvora, mss. sobre papel, tinta y colores a la aguada, verde, ocre y gris, Madrid, 12 de abril de 1758.
Fuentes y bibl.: Biblioteca Virtual de Defensa, Catálogo colectivo de la Red de Bibliotecas de los Archivos Estatales.
H. Capel, Los Ingenieros Militares en España. Siglo XVIII. Repertorio biográfico e inventario de su labor científica y espacial, Barcelona, Universidad de Barcelona, 1983; M. G. Cano Révora, Cádiz y el Real Cuerpo de Ingenieros Militares (1697-1847). Utilidad y Firmeza, Cádiz, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Cádiz, 1994; J. Carrillo de Albornoz y Galbeño, Abriendo Camino. Historia del Arma de Ingenieros, Madrid, Imprenta Grafoffset, S. L., 1997; H. Capel et al., De Palas a Minerva. La formación científica y la estructura institucional de los Ingenieros Militares en el siglo XVIII, Barcelona-Madrid, EyP Libros, 2001; F. Andújar Castillo, “Capitanes generales y capitanías generales en el siglo XVIII”, en Revista de Historia Moderna, 22 (2004), págs. 291-320; J. Cantera Montenegro, “Pedro de Lucuce y Ponte”, en Real Academia de la Historia, Historia Hispánica [en línea], disponible en https://historia-hispanica.rah.es/biografias/27702.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño