Buitrago y Blake, Antonio. Cinti, Sucre (Bolivia), 17.XI.1785 – Madrid, 11.I.1856. Mariscal de campo.
Antonio Eugenio Damián Buitrago y Blake nació en la hacienda de Palcagrande, en Cinti, en la comarca de Charcas (hoy Sucre), que entonces pertenecía al virreinato del Perú y en la actualidad forma parte de Bolivia, el día 17 de noviembre de 1785.
Hijo del coronel José Bautista Buitrago, comandante militar de las provincias de Cinti, Pilaya y Paspaya, y de Francisca Javiera Blake. Inició su carrera militar el 15 de noviembre de 1792 en las milicias provinciales de Paspaya, como alférez y luego teniente del mismo Regimiento, a propuesta, respectivamente, de los virreyes Juan José de Vértiz y Nicolás de Arredondo.
Desde el inicio de 1799 estuvo destinado con las fuerzas de observación en la frontera de la región de Chiriguano en el Chaco boliviano, donde participó en acciones contra los indígenas y, posteriormente, en julio de 1800 contra tropas portuguesas en la frontera de Brasil. Participó en la organización de los recién creados Dragones Voluntarios de Cinti, cuyo mando en la segunda compañía obtuvo, y permaneció allí hasta abril de 1808, cuando, con Real Licencia, viajó a España, participó en los hechos del 2 de mayo en Madrid contra las tropas francesas, y fue herido de bala. El 13 de diciembre de 1808, cuando realizaba una misión de reconocimiento en las afueras de Madrid, en su condición de ayudante de campo del general Luis Idiáquez, fue herido y hecho prisionero por las tropas francesas. Consiguió escapar en julio de 1812, llegando a Cádiz, sede del Gobierno, para ser purificado de su conducta en los tres años de cautiverio, declarando el Consejo de Generales de Castilla la Nueva, por fallo de 8 de noviembre de 1814, su conducta fiel e intachable, siendo inmediatamente destinado a las órdenes del capitán general José de Arteaga. Entretanto, contrajo matrimonio con Benita de Ayala y Ayala el 6 de febrero de 1813.
Tras una baja por enfermedad de abril de 1820 a mayo de 1823, fue destinado al depósito de Jefes y Oficiales de Castilla la Nueva, siendo más tarde nombrado capitán de la primera compañía del Regimiento de Caballería 1.º Provisional (luego denominado “del Príncipe”) y, en 1825, capitán de la 7.ª compañía de Coraceros de la Guardia Real, con destino en Vicálvaro.
Tras ser nuevamente purificado de su conducta durante el Gobierno del Trienio Liberal, el 15 de julio de 1827 fue nombrado comandante de escuadrón de Cazadores de la Guardia Real, siéndole reconocida la antigüedad por mitad en los años prestados en las milicias provinciales y por entero desde su llegada a la Península en 1808.
Desempeñó diversos servicios en los destacamentos vinculados a la Corte hasta que, el 6 de abril de 1833, fue nombrado teniente coronel mayor del Regimiento de Granaderos a caballo de la Guardia Real, asistiendo a la jura como princesa de Asturias de la futura Isabel II. El 29 de junio de 1834 marchó con su Regimiento a Segovia, desde donde partió en persecución de las fuerzas carlistas del cura Merino, que huyó atravesando el Duero. El 12 de abril de 1835 fue nombrado coronel de la Guardia Real y brigadier de Caballería con el mando del Regimiento de Granaderos a caballo de la Guardia Real. Habiendo entrado en servicio en Palacio el 1 de enero de 1836, demostró su lealtad a la Reina en el curso de la “Sargentada” de La Granja, lo cual le valió el nombramiento como alférez de la Real Compañía de Alabarderos, siendo promovido al empleo de mariscal de campo el 20 de febrero de 1838, así como gentilhombre de cámara con ejercicio. Partió entonces a Cuba, como gobernador político y militar de la provincia de Matanzas, luego con residencia en Trinidad, y comandante general del departamento del Centro, hasta que fue relevado en 1843, regresando a la Península donde fue nombrado capitán de una de las compañías de Alabarderos con categoría de mariscal de campo. Quedó de cuartel desde junio de 1847, salvo una breve licencia para recibir tratamiento en dos balnearios; falleció en Madrid el 11 de enero de 1856. Fue condecorado con las grandes cruces de San Hermenegildo pensionada, de Isabel la Católica y de San Fernando de 1.ª clase, entre otras.
Fuente: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. B-3935, Hoja de servicios de Antonio Buitrago.
Adolfo Domínguez Ruiz de Huidobro
