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Alonso Vázquez

Biografía

Vázquez, Alonso. Natá (Panamá), 1540 – IX.1564. Capitán de la conquista de Veragua (Panamá), gobernador y capitán general de Veragua, fundador de Carlos o Sanlúcar de la Nueva Extremadura, en Veragua.

            Hijo legítimo del general Francisco Vázquez, gobernador y capitán general de Veragua (1558-1560), nativo de Badajoz, y de Catalina Álvarez. Nació entre 1540 y 1541 en Natá (Panamá). Era el hijo mayor de este matrimonio y tenía otros dos hermanos legítimos, Bartolomé y Juan, y cuatro hermanas, la mayor nacida hacia 1553. Otro hermano, de nombre Juan Vázquez, y mucho mayor que él, era al parecer mestizo e hijo natural de su padre.

            Su breve existencia discurrió en la campaña de conquista de Veragua, iniciada a mediados del año 1558 y acaudillada por su padre, a quien acompañó en la recluta de soldados en Panamá, en el traslado de éstos en fragatas a Natá, en la marcha de la hueste hacia la frontera del río Gatú, en la fundación de Santa Fe, capital de la nueva provincia,  y del real de Minas de Concepción, en la vertiente del Caribe.

            Encontrándose la conquista en pleno proceso, su padre Francisco Vázquez se trasladó a Panamá para dirimir asuntos urgentes ante el conde de Nieva, virrey del Perú, y encontrándose en la capital enfermó gravemente, falleciendo el 4 de julio de 1560. Su muerte inesperada provocó un grave vacío de poder en Veragua, pues la conquista aún se encontraba en sus comienzos y faltaba todavía asegurar los territorios de Trota, situados al sur, y apenas se empezaba a avanzar hacia el oeste.

            Por Real cédula de Toledo del 20 de agosto de 1560, en reconocimiento a sus méritos en la conquista de Veragua, la corona le había enviado a Francisco Vázquez el nombramiento de gobernador y capitán general de esta provincia, por tiempo de quince años y con derecho a ser sucedido por herederos. Sin embargo este título le llegó cuando ya había muerto. Sería a su hijo mayor, Alonso, que tendría entonces solo 19 años, a quien le correspondía heredar el cargo. Pero al llegar la correspondiente real cédula a Panamá confirmándole en el cargo como heredero legítimo de su padre, por error el texto no traía su nombre sino el de Francisco, lo que aprovechó el recién llegado gobernador Rafael de Figuerola para desconocer el espíritu de la cédula, despojar a Alonso de su título y continuar él mismo la conquista con su nutrida camarilla de amigos y parientes.  Se dirigió a Natá, compró cientos de reses y caballos y marchó con su hueste por la vertiente del Pacífico veragüense, donde fundó el poblado de La Resurrección. Sin embargo, llegaron alarmantes noticias de que Lope de Aguirre invadiría Panamá, y Figuerola tuvo que regresar con todos sus hombres a la capital para asegurar su defensa, dejando abandonados los ganados que había llevado y al poblado recién fundado.

            Al marchar Figuerola a Veragua, y conocerse la descarada usurpación que perpetraba, se alzaron en Santa Fe los soldados que habían hecho la campaña con Francisco Vázquez. El movimiento estaba encabezado por el maestre de campo y teniente general Antonio de Córdoba, que fue pronto apresado y decapitado. La rebelión fue sofocada, pero el ambiente quedó impregnado de ansiedad y frustración. Aunque la documentación conocida es muy escasa sobre este incidente, hay  evidencias que sugieren defecciones del bando de los Vázquez, ya que varios capitanes que habían participado desde el comienzo en la conquista se sumaron a Figuerola para reprimir el motín de Córdoba, siendo los casos más notables los de Pedro González de Meceta, el primer capitán que Francisco Vázquez había reclutado en Panamá, y Pedro de Matamoros, a quien había designado para la fundación del real de minas de Concepción.

            Como paso siguiente, Figuerola se dedicó a perseguir a los más fieles seguidores de los Vázquez. Alonso fue apresado y encerrado con otros simpatizantes en una caballeriza con 7 u 8 caballos. Fue atado a un cepo y mantenido así durante 170 días, luego enviado en cadenas a Panamá y Nombre de Dios, hasta que logró escapar, viviendo durante meses escondido en los montes. La persecución duró año y medio: desde mediados de 1560, cuando murió su padre, hasta principios de 1562, cuando llegó el nuevo gobernador Luis de Guzmán. Dado que la usurpación de poderes estaba claramente tipificada en la jurisprudencia y en las tradiciones castellanas, cuando llegaron estas noticias a oídos de la Audiencia de Lima, de inmediato se expidieron órdenes para suspender a Figuerola, sin permitir que terminara su período, y se nombró a Luis de Guzmán como nuevo gobernador y juez de residencia del gobernante depuesto.

            A principios de 1562, llegó finalmente la confirmación de Alonso Vázquez, esta vez sin equívocos, y Rafael de Figuerola tuvo que abandonar para siempre sus pretensiones veragüenses. Alonso fue instalado en su puesto como sucesor de su padre, recibiendo todos los derechos correspondientes como gobernador y capitán general. Después de ser depuesto del cargo de gobernador, Figuerola permaneció en Panamá, donde no le faltaban enemigos, sobre todo entre los conquistadores de Veragua, y una noche fue asaltado en su cama por unos desconocidos que lo cosieron a puñaladas.

            Ya en posesión de su cargo como gobernador y capitán general de Veragua, Alonso inició una intensa campaña de conquista, empeñándose en más de 10.000 pesos, algunos suyos y otros prestados, pues su padre había agotado toda su hacienda, dejando incluso adeudada a su familia. Envió a uno de sus capitanes, Pedro Martínez de Olaeta, a descubrir en el Caribe las “islas de Corobaro” (llamadas también Sorobaro, Zarabaró, Zarambarú o con otros nombres, y donde actualmente queda el archipiélago de Bocas del Toro, en Panamá), de donde regresaron “enfermos y muertos de hambre y destrozados”, pero sin lograr nada, salvo haber llegado a dichas islas.

            Al sur y occidente de Veragua, Alonso Vázquez encontró férrea resistencia indígena al alzarse en armas siete u ocho caciques —Trota, Calovébora, don Baltasar de Santa Fe, Pescara, Riguea, Sostovani, Nani “y otros muchos caciques y principales”— “adonde murieron muchos soldados a manos de los dichos naturales y otros muchos heridos”. En Santa Fe, se incendió el bohío donde se depositaba la pólvora, las municiones, y las armas, quedado la hueste peligrosamente expuesta al ataque de los indios, y en el incidente su hermano Juan sufrió serias quemaduras. Con ciento cincuenta hombres, Alonso marchó hacia el llamado Valle del Guaymí o “de los Pexibaes”, “aguas vertientes a la mar del norte” (en la actual provincia de Bocas del Toro, cerca del límite con Costa Rica). Cruzó hacia la vertiente del Pacífico, y en el territorio del actual Chiriquí, llegó hasta Punta Burica. En la provincia de Tabarabá “fundó e pobló la ciudad de Carlos [o San Lucar de la Nueva Extremadura] en que estuvo cerca de dos años”. Pero a mediados de noviembre del año 1564, a consecuencia “de los trabajos de dicha jornada, murió naturalmente y quedó debiendo más de 10.000 pesos”. Según un testigo, sus restos mortales fueron trasladados a Natá, “en cuya iglesia mayor fue enterrado”. Otro testigo dice que ya enfermo, fue a curarse en Natá, donde murió.

            Si se cree al contador de Real Hacienda Cristóbal de Salinas, la muerte de Alonso no debió ser muy lamentada, aunque su versión tal vez sea parcializada pues Salinas había llegado con Figuerola y formaba parte de su círculo de allegados, por lo que muy probablemente era adverso a los Vázquez. El hecho es que Salinas escribía tres meses después del deceso de Alonso, que “no se ha entendido haya hecho falta allí con su muerte por el poco provecho que de él se tenía, con ser hombre además de poca experiencia, movible, vario e interesable con la administración de justicia y sus tenientes, ni en la entrada que intentó por la provincia lo redundó en servicio de vuestra majestad, antes daño, el cual había y han hecho no pocas veces los indios naturales en las cuadrillas y habitantes...”. Como quiera que sea, lo cierto es que después de dos años de intensos pero inútiles esfuerzos por someter a los indios, por descubrir nuevos minerales de oro y por tratar de fundar ciudades permanentes, las campañas de Alonso Vázquez habían sido un rotundo fracaso.

           

Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias (Sevilla), Panamá 245, Real Cédula de Aranjuez, 4.III.1561, nombrando a Francisco Vázquez (sic, por Alonso) gobernador y capitán general de Veragua; Real Provisión de Madrid, del 12.I.1562, nombrando a Alonso Vázquez gobernador y capitán general de Veragua; Real Cédula de Madrid, del 12.I.1562, para que Luis de Guzmán tome residencia a Rafael de Figuerola y restituya en el cargo a Alonso Vázquez; Patronato, 150, doc. n.º 14, ramo n.º 14  pieza 1, Real Cédula de Madrid, del 20.I. 1562 para Luis de Guzmán; Información hecha por el gobernador de Tierra Firme, Luis de Guzmán, sobre Francisco Vázquez a pedimento de su hijo Alonso Vázquez, gobernador de Veragua, Panamá, noviembre de 1562; Patronato 150, doc. n.º 14 ramo n.º 14, pieza 2, Información de los Méritos y Servicios de Francisco Vázquez, gobernador y capitán general de la provincia de Veragua y uno de los conquistadores contra los tiranos Contreras y poblador y fundador de tres ciudades en dicha  provincia y descubridor de las minas de ella, Panamá, año 1565; Patronato 151, doc. 5, ramo 1, Probanza de Méritos de Pedro González de Meceta en la conquista de Veragua junto al general Francisco Vázquez, Panamá 9.XI.1569; Patronato 151, doc. 7 ramo 1, Información de méritos de Rafael de Figuerola, gobernador de Tierra Firme en la conquista y población de la provincia de Veragua y pacificación de los Vázquez y Antonio de Córdoba, alzados contra S. M., Natá, 20.III. 1562; Panamá 39, Carta de Cristóbal de Salinas al rey, año 1565.

A. Castillero Calvo, Orígenes históricos de Veragua (1502-1589), tesis doctoral, Madrid, Universidad Complutense, 1967; Estructuras Económicas y Sociales de Veraguas desde sus orígenes históricos, Panamá, Editora Panamá, 1967, págs. 31-49; “Veraguas, Conquista, Encomiendas y Reducciones”, en Conquista, Evangelización y Resistencia, Panamá, Instituto Nacional de Cultura, 1995, capítulo VI; “Conquista y Colonización de Veragua, Siglos XVI-XVII”, en A. Castillero Calvo (ed.), Historia General de Panamá, vol. I, t. I, Bogotá, Comité Nacional del Centenario de la República de Panamá, 2004, págs. 146-150.

 

Alfredo Castillero Calvo

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