Contreras y Valverde, Vasco de. Cuzco (Perú), 1605 – Lima (Perú), 2.XII.1667. Doctor en ambos Derechos, obispo de Popayán y de Huamanga.
Hijo de Francisco de Valverde Maldonado, caballero de la Orden de Santiago, vecino feudatario de la Encomienda de Guanacota y de Melchora de Ulloa y Contreras. Ambos descendían de conquistadores.
Estudió las primeras letras en el Colegio Seminario de San Antonio Abad del Cuzco, siguió Cánones en el seminario conciliar de San Martín de Lima, finalmente se graduó como doctor en ambos Derechos en la Universidad Mayor de San Marcos y regentó las cátedras de Vísperas de Leyes y de Prima de Cánones, actuando como abogado de la Audiencia en dicha capital.
Hacia 1632 viajó a España y fue ordenado sacerdote.
En 1638 editó en Madrid un “Discurso que propone en justicia el derecho que tienen los Cabildos y Capitulares del Perú a la reformación de la Célula que les prohíbe las Visitas”, memorial a favor de los americanos que le hizo famoso y fue aplaudido sin reservas por el cronista Gil González Dávila y el jurista Juan de Solórzano y Pereira.
Regresó a las Indias designado chantre de la catedral de Quito y consultor del Santo Oficio, visitó varias ciudades y lugares y se posesionó del cargo. En 1641 ascendió a canónigo maestrescuela y examinador sinodal. En 1645 pasó de comisario apostólico al Cuzco y por orden del obispo Juan Alonso Ocón actuó de vicario general de ese obispado hasta 1650.
Desde 1648 visitó archivos y revisó numerosas obras y en 1649 compuso una “Relación de la ciudad del Cusco, de su fundación, descripción, vida de los Obispos, religiones y todo lo demás perteneciente a lo eclesiástico, desde el descubrimiento de este reino hasta el presente”, obra muy completa, pues trata de la Imperial Ciudad desde los tiempos anteriores a la conquista y refiere los alrededores de su región, cuáles son las plantas y cómo era la vida de la ciudad en el siglo xvii.
En 1652 figuraba como tesorero de la catedral, consultor del Santo Oficio y miembro del cabildo metropolitano de Lima. Entre 1653 y 1654 ocupó el rectorado de la Universidad de San Marcos. En 1658 fue consagrado obispo de la diócesis de Popayán en la Nueva Granada, a donde se trasladó a vivir hasta que en 1664 fue designado obispo de Huamanga.
Para tomar posesión de su nuevo destino eclesiástico viajó a Lima y fue consagrado en esa catedral el 17 de diciembre de 1665, pero ciertos achaques de salud le impidieron continuar el viaje y falleció el 2 de diciembre de 1667 en Lima, a los sesenta y dos años de edad.
El manuscrito original de la Relación de la ciudad del Cusco permaneció inédito hasta finales del siglo xix, que lo exhumó el americanista Marco Jiménez de la Espada, incorporando los cuatro primeros capítulos a sus Relaciones Geográficas de Indias editada en Madrid.
Desde entonces se conocía de su existencia, pero no fue hasta 1982 cuando la doctora María del Carmen Martín Rubio localizó el original, lo transcribió y publicó en el Perú.
Obras de ~: Relación de la ciudad del Cusco, 1649.
Bibl.: R. Pérez Pimentel, Diccionario Biográfico del Ecuador, t. IX, Guayaquil, Imprenta de la Universidad de Guayaquil, 2002 (2.ª ed.).
Rodolfo Pérez Pimentel
