Martínez, Rodrigo. ?, ú. t. s. xi – Coria (Cáceres), 1138. Conde de León, tenente de Melgar, Aguilar y Mayorga.
Hijo del conde Martín Flaínez, muerto en Uclés (1108), y de su esposa Sancha Fernández, nacida del matrimonio entre el conde Fernando y Tegridia Gutiérrez, perteneciente a la estirpe conocida como Alfonso.
La prematura muerte de su hermano mayor, Pedro Martínez (1123), le permitió convertirse en el cabeza de su familia y al mismo tiempo disfrutar de una mayor proximidad al trono. Esa cercanía arrastrará hasta posiciones de privilegio a su otro hermano varón, Osorio Martínez, origen de los linajes bajomedievales Osorio y Villalobos.
Sus años en la Corte arrancan durante el reinado de Urraca de León y Castilla (1109-1126), tal y como atestigua su presencia entre las listas de confirmantes de algunos de sus diplomas. Con la desaparición de la Soberana, pasó a servir a su heredero, Alfonso VII, de quien llegaría a ser uno de los principales y más leales apoyos durante los primeros años de su gobierno, sin duda conflictivos por las tensiones generadas entre el trono y la elite social laica durante la etapa anterior.
Nombrado conde apenas Alfonso VII sucedió a su progenitora (1126), permaneció a su lado durante los enfrentamientos con el magnate Pedro González de Lara y coordinó la hueste que atacó la fortaleza de Valle de Mansilla, próxima a la ciudad de León, en poder del rebelde Pedro Díaz de Valle y sus hijos, que se negaban a acatar la autoridad de su nuevo monarca (1130). Las burlas a las que allí fue sometido por parte de los asediados, así como su incapacidad para tomar la plaza, forzaron al Rey a sumarse a las tropas. Después de un cerco durísimo, el castillo cayó en manos de Alfonso VII y correspondió el castigo de los revoltosos, excepto el de Pedro Díaz, a Rodrigo Martínez, quien se vengó de los que le insultaban, unciéndolos con bueyes para arar, pacer hierba, comer paja y alimentarse en pesebres como las bestias.
En 1131 fue enviado por el Rey, junto con Gutierre Fernández, en calidad de embajador suyo ante el sultán Zafadola, que deseaba tomar su protección y servirle como vasallo.
Durante estos años acumuló múltiples honores, como las tenencias de Melgar, Aguilar y Mayorga, o el codiciado gobierno del territorio de León. De hecho, en alguna fuente como la Chronica Adefonsi Imperatoris aparece con la denominación genérica de conde Rodrigo del territorio de León.
Asistió en la hueste del Rey a numerosas campañas por las tierras del Guadalquivir, como la de 1138, en la que durante días el ejército leonés se dedicó al saqueo de las comarcas de Jaén, Baeza, Úbeda y Andújar, actividad predatoria de la que regresaron con rico botín en bienes y cautivos.
Ese mismo año, 1138, en el mes de julio, el emperador Alfonso convocó al conde Rodrigo, a su hueste y a las tropas salmantinas y con ellas cercó Coria. Una mañana, al amanecer, Rodrigo Martínez, con algunos de sus hombres, subió a una de las torres de madera desde las que se fustigaban las murallas de la ciudad y encontró la muerte. Herido por una flecha hábilmente disparada, que atravesó el cañizo del ingenio y aún las protecciones que guarnecían el cuello del magnate. Los médicos de Alfonso VII no consiguieron cortarle la hemorragia y murió en el propio campamento.
Poco tiempo después, el Monarca levantó el asedio. Rodrigo Martínez fue enterrado en el sepulcro de sus padres en la catedral de León.
De su matrimonio con Urraca Fernández, hija de Fernando García de Hita, no hubo descendencia, por lo que fue sucedido en su rango, dignidad y honores por su hermano el conde Osorio Martínez.
Bibl.: M. Recuero, Alfonso VII, emperador. El imperio hispánico en el siglo xii, León, Centro de Estudios e Investigación San Isidoro, 1979, págs. 74, 81 y 103; P. Martínez Sopena, “El conde Rodrigo de León y los suyos. Herencia y expectativas de poder entre los siglos x y xii”, en R. Pastor de Togneri (comp.), Relaciones de poder, de producción y parentesco en la Edad Media y Moderna, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1990, págs. 51-84; M. Pérez, Crónica del emperador Alfonso VII, León, Universidad, 1997, págs. 64, 70-71, 73 y 106-109; M. Torres Sevilla, Linajes nobiliarios de León y Castilla (siglos ix-xii), Salamanca, Junta de Castilla y León-Gráficas Varona, 1999, págs. 149-150.
Margarita Torres Sevilla-Quiñones
