Albiñana, José de. Activo en Madrid entre 1845-1870. Miniaturista y fotógrafo.
Como muchos de los primeros profesionales de la fotografía en España, José Albiñana provenía del mundo de la pintura en miniatura, oficio que compaginó con el de fotógrafo en su estudio de la calle Montera, donde trabajó con su hermano Salvador. A finales de los años cuarenta del siglo XIX se convirtió en uno de fotógrafos más activos de su generación, dedicado sobre todo al género del retrato, practicando tanto el daguerrotipo como la fotografía sobre papeles a la sal. Se sabe que en 1849 obtuvo los retratos al daguerrotipo del rey Francisco de Asís y de la reina madre, María Cristina de Borbón, solicitando por ello, en diciembre de ese año el, hasta esa fecha, inédito título de “retratista de Cámara al daguerrotipo”.
Tal rango le fue concedido de manera honorífica en febrero de 1850, iniciando lo que sería una fructífera relación profesional con la Corona a lo largo de la década de los cincuenta, y que cesaría al comenzar la siguiente. De la producción como daguerrotipista de Albiñana sólo se puede referir dos ejemplares panorámicos ligados a la casa real. Uno, conservado en el palacio real de Madrid, con la fachada principal del Real Museo de Pintura y Escultura; una placa completa firmada y fechada en octubre de 1851. El otro daguerrotipo, con el mismo tamaño, se conserva en la colección de la marquesa de Santa Cruz, y muestra la fachada principal del que fuera palacio de la Reina Gobernadora, María Cristina de Borbón, en la calle de las Rejas (actualmente calle de la Bola). La placa está igualmente firmada por Albiñana el 22 de febrero de 1851.
Algo más numerosas son las pruebas fotográficas de Albiñana dedicadas a su faceta como retratista; la mayoría de ellas conservadas en el Patrimonio Nacional, y en las que puede apreciarse el tipo de imagen que caracterizó el trabajo polivalente de los Albiñana, y donde lo fotográfico quedaba diluido por los tratamientos “miniados”, según expresión del propio artista, aplicados. Iluminaciones tanto en acuarela como en temple y que eran clara derivación de la estética de las decimonónicas miniaturas sobre marfil. En este género, destaca la serie de seis retratos de miembros del Cuarto Militar del rey Francisco de Asis, en los que la iluminación empleada subraya la vistosidad de los uniformes al tiempo que enmascara la base fotográfica. Retratos del infante Enrique de Borbón o de alguno de los hijos de Isabel II completaría el elenco de retratos que de este fotógrafo se guarda en las colecciones reales, pero que debió ser bastante más completo, a tenor de las elevadas facturas presentadas por Albiñana. Hacia mediados de los años cincuenta trasladó su estudio al número 12 de la calle de Alcalá, donde siguió ofreciendo sus servicios en su doble condición de miniaturista y fotógrafo; en esta última vertiente, desplegó una inquieta curiosidad investigadora, propia de los pioneros del nuevo arte. En una memoria dirigida a la Casa Real en agosto de 1850, el fotógrafo reclamó un sueldo anual a la Reina, aduciendo sus esfuerzos personales por estar “siempre al corriente de todos los adelantos que diariamente se suceden en este método” y haciendo “crecidos desembolsos comprando daguerrotipos mejorados y secretos que sólo puedo obtener en fuerza de hacer sacrificios pecuniarios”.
Participó en varias exposiciones internacionales, como la de París de 1857, y experimentó con diversos procedimientos de reproducción gráfica, como la fotolitografía y la fotozincografía, tal y como se anunció el 15 de noviembre de 1863 en El propagador de la Fotografía. Revista quincenal de los progresos de este Arte.
Además del Patrimonio Nacional y de la marquesa de Santa Cruz, conserva fotografías de José de Albiñana la Biblioteca Nacional.
Fuentes y bibl.: Archivo General de la Administración (Alcalá de Henares), Administración General, leg. 5286.
P. López Mondéjar, Las fuentes de la memoria. Fotografía y Sociedad en la España del siglo xix, Madrid, Lunwerg, 1989, pág. 211; M. L. Sougez, Historia de la Fotografía, Madrid, Cátedra, 1994, págs. 237 y 249; La fotografía en las colecciones reales, catálogo de exposición, Madrid, 1999, n.os 2 y 19; M. L. Sougez y H. Pérez Gallardo, Diccionario de Historia de la Fotografía, Madrid, Cátedra, 2003, pág. 29; L. Ruiz Gómez, “Isabel II frente al espejo: retratos fotográficos”, en J. S. Pérez Garzón (ed.), Isabel II. Los espejos de la reina, Madrid, Marcial Pons, Ediciones de Historia, 2004, págs. 249-262.
Leticia Ruiz Gómez
