Sert y Rius, Domingo. Barcelona, 31.I.1832 – 18.VI.1897. Industrial y político.
Hijo de Francisco Sert y Artés, un pequeño fabricante de tejidos de lino, y de Ignacia Rius. Entró a trabajar como aprendiz en la fábrica de mantones de lana y velos de seda creada por Buenaventura Solá y Guixá, esposo de su hermana mayor, Madrona. Al mismo tiempo que desarrollaba su afición por el dibujo y la pintura, cursó estudios nocturnos de teoría y práctica de tejidos en la escuela de la Junta de Comercio.
Terminados éstos en 1851, pasó a ocupar un puesto técnico en la fábrica. Durante la epidemia de cólera de 1854, quedó provisionalmente al frente de la misma, imprimiéndole un notable desarrollo. En los años siguientes, pasó a ser director técnico.
Entre 1861 y 1862 murieron tres hijos del matrimonio Solá-Sert y la misma Madrona, mientras que Domingo contrajo matrimonio en 1862 con María Badía y Capdevila, de una familia de fabricantes de hilados de lana de Sabadell, que aportó una cantidad importante como dote. Estos hechos llevaron a un replanteamiento de la sociedad, que en diciembre de 1862 adquirió el nombre de “Buenaventura Solá y Compañía”, apareciendo Domingo ya como socio y gerente de pleno derecho. El 31 de diciembre de 1863, la sociedad pasó a “B. Solá y Sert Hermanos”, incorporando al hermano menor de Domingo, José, al mismo tiempo que se reservaba un espacio en el futuro para Adolfo Solá y Sert, hijo superviviente de Solá. Éste, que en segundas nupcias había tenido otra hija, murió en 1866. Esto llevó a los hermanos Sert en 1868 a transformar la sociedad en “Sert Hermanos”, dando entrada a Martín Bultó, casado con su hermana menor, Carmen. Tras la mayoría de edad de Adolfo Solá, la sociedad pasó en 1874 a “Sert Hermanos y Solá”.
Domingo compartió con su hermano José gran parte de su actuación profesional, asociativa y política.
Introdujeron diversas innovaciones técnicas, ampliaron y diversificaron la producción e invirtieron en otras sociedades industriales. Las aficiones artísticas de Domingo le permitieron diseñar tejidos de gran originalidad, al mismo tiempo que dirigía la producción y que su hermano se encargaba de la parte comercial.
En torno a 1875, la sociedad abrió un nuevo centro fabril en San Martín de Provensals, más mecanizado y a partir de 1879 con electricidad, e introdujo la producción de alfombras, cortinajes, tapices, moquetas y tapetes, de gran calidad artística. Sus productos obtuvieron distinciones en las exposiciones universales de París (1867 y 1878), Viena (1873), Filadelfia (1876) y Barcelona (1888).
El lugar destacado de los hermanos Sert en la industria, con más de mil obreros en sus fábricas, y su identificación con las luchas de los industriales catalanes por un arancel proteccionista, les llevó a participar activamente en el asociacionismo económico y a ocupar cargos políticos. Fueron directivos de numerosas entidades, presidiendo Domingo el Instituto de Fomento del Trabajo Nacional en 1884 y el Colegio Mayor del Arte de la Seda de Barcelona entre 1882 y 1885. Mientras que José desplegó una gran actividad en los centros ministeriales de Madrid, donde fue miembro de comisiones negociadoras y diputado a Cortes, Domingo centró su actuación política en Barcelona. Vinculado al Partido Conservador, fue diputado provincial entre 1877 y 1882 y entre 1886 y 1897 y presidente de la Diputación Provincial en 1896.
En los años ochenta y noventa del siglo xix, la separación de la sociedad de José Sert y de Adolfo Solá y la muerte de Martín Bultó, llevaron a Domingo a reestructurarla en varias ocasiones, con el nombre de “Sert hermanos” y posteriormente “Sert hermanos e hijos”, dando mayor protagonismo a sus propios hijos, Domingo y Francisco, y a su sobrino Martín Bultó (hijo).
Fundó en su empresa un Montepío para casos de enfermedad y secundó la iniciativa de José de creación del Instituto del Desierto de Sarriá, como asilo de inválidos del trabajo. Estuvo en posesión de las condecoraciones de Carlos III, Legión de Honor y Gran Cruz de Isabel la Católica. Sus hijos Francisco de Paula Sert y Badía (1863-1919), I conde de Sert, y Domingo (1866-1952) continuaron con la empresa familiar, siendo el segundo también diputado a Cortes y presidente del Fomento del Trabajo Nacional, mientras que José María (1874-1945) fue un reconocido pintor.
Bibl.: F. Rahola, Necrología del Excmo. Sr. D. Domingo Sert y Rius leída en la sesión dedicada por el Fomento del Trabajo Nacional a la buena memoria de tan esclarecido patricio, Barcelona, Domingo Casanovas, 1901; VV. AA., Diccionari biogràfic, Barcelona, Albertí, 1966-1970.
Joan Palomas i Moncholí