Zulema, Mahoma. ?, s. m. s. XV – p. t. s. XVI. Ceramista.
Aparece citado en Calatayud (Zaragoza) en varios documentos de comienzos del siglo XVI. En casi todos (1506, 1507) se le menciona como“Mahoma Çulema”, “cantarero” y “maestro de la Malega”, apelativos con los que se designa de manera general su oficio de alfarero y de forma más concentra su producción de cerámica esmaltada con cubierta de estaño y decoraciones en azul y dorado, manufacturada a la manera de los obradores nazaríes de Málaga. En un contrato de aprendizaje de 1507 se le consignaba también como “Muhammad ben Çuleyman Attaalab”, productor de loza dorada, que se comprometía con “Abdallah Alfoguey” a enseñarle su oficio en el plazo de cuatro años y medio, a mantenerle, asistirle y vestirle (“con capuz, sayo, jubón, calzones, camisones, bonete, zapatos y cinto y lo demás de uso de este concepto”) e, incluso, a darle alguna recompensa más si quedaba satisfecho con su trabajo, jurando ambos el acuerdo en nombre de su Dios (“Alah, que no hay otro sino Él”).
Mahoma Çulema es el último representante documentado de una saga de alfareros mudéjares instalados en Calatayud entre mediados del siglo XV y el primer tercio del siglo XVI. Todos vivieron en el barrio de la Cantarería, sito en la Morería de la ciudad, lugar en el que —en 1470— se localizaba el obrador de “los herederos de Abdalá Çulema”; en el que trabajaban los hermanos “Brahem, Abdalá y Ahmed Çulema”, “malegueros” que en la misma fecha alquilaban un “bodegón” en la plaza del Mercado para comercializar su obra. Éstas y otras noticias (1486, 1487 y 1497) nos informan acerca de la producción cerámica de Calatayud que debió iniciarse antes de la reconquista de la ciudad en 1120, si tenemos en cuenta la cita del viajero y geógrafo árabe al-Idrisi que, en 1154, destacaba la exportación de su loza dorada. Otro documento firmado en Huesca en 1483 nos permite conocer mejor la difusión y forma de la cerámica bilbilitana, vendida por Aragón y muy similar a la coetánea de Manises y Paterna, consistente básicamente en la producción de “platos, escudillas salsericas y jarras” de distintas formas y tamaños, decorados con los motivos vegetales que aparecen repetidos en la vajilla valenciana de la época, como las “hojas de carrasca” (la serie hoy denominada de ”hoja de hiedra”), pintados en dorado y azul. En definitiva, una obra cerámica que se realizaría de modo muy parecido en diferentes alfares de la antigua Corona de Aragón.
Es el tipo de loza que producirían en el siglo XV los Çulema de Calatayud y la compleja fórmula de reflejo metálico de origen islámico que Mahoma Çulema se comprometía a enseñar en el contrato de aprendizaje firmado en 1507.
Bibl.: F. Fernández González, Estado social y político de los mudéjares en Castilla, Madrid, 1866, pág. 439; F. Balaguer y A. Durán, “Notes sobre relacions comercials i economia d’Osca (segles XIV i XV)”, en Actas del VI Congreso de Historia de la Corona de Aragón, Cerdeña, 1957, Madrid, 1959, págs. 221-239; M.ª I. Álvaro Zamora, “La cerámica de Calatayud. Importancia y conocimiento actual”, en Revista Zaragoza, II época, año I, n.º 3 (1979), págs. 17-19; “El trabajo en los alfares mudéjares aragoneses. Aportación documental acerca de su obra, controles de su producción y formas de comercialización y venta”, en Revista Zurita (Zaragoza, Institución Fernando el Católico), 65-66 (1992), págs. 97-137; F. J. García Marco, Las comunidades mudéjares de Calatayud en el siglo XV, Calatayud, Centro de Estudios Bilbilitanos, 1993, págs. 128-129, 140, 143-144, 300, 305-307, 310 y 314; M.ª I. Álvaro Zamora, “La cerámica aragonesa”, en T. Sánchez Pacheco (coord.), Cerámica española, en J. Pijoán (dir.), Summa artis: historia general del Arte, t. XLII, Madrid, Espasa Calpe, 1997, págs. 221-288; M.ª I. Álvaro Zamora, Cerámica aragonesa, vols. I y II, Zaragoza, Ibercaja, 2002, págs. 42-45, 120, 145 y 181-183 y págs. 140-146, respect.
María Isabel Álvaro Zamora