Sosa, Álvaro de. ?, p. m. s. xvi – s. m. s. xvi. Gobernador de Panamá.
Sucede a Sancho de Clavijo en la gobernación de Tierra Firme por nombramiento de 31 de mayo de 1552. Su gobierno se destacó por sus intentos de poner fin a la situación en que se encontraba la población indígena de las encomiendas. Pero también intervino en negocios oscuros y fue por ello objeto de una conspiración liderada por Hernando de Luque, que tuvo lugar el 4 de octubre de 1556.
De hecho, Juan Fernández Rebolledo, encomendero de Natá conocido por los abusos y explotación a que sometía a sus indios, y Hernando de Luque habían sobornado a Sosa con más de 3000 pesos en dinero, comida y regalos, y con 1800 ducados que fue recibiendo en los distintos puertos en los que la embarcación que lo trasladaba a Tierra Firme hizo escala, para que los favoreciese en su residencia. Pero, además, Álvaro de Sosa participaba de forma activa en el comercio de Panamá: con Rodrigo Méndez, escribano de la Corona a quien protegió en sus negocios fraudulentos, constituyó una sociedad, utilizando un testaferro, con la que participaba en una tercera parte de las recuas, barcos y mercancías de la asociación; compró también con testaferro —su teniente Gonzalo de Ávila—el ganado de la estancia de Chepo.
Cuando llegó a Nombre de Dios en 1553 visitó al oidor de la Audiencia de Lima, Pedro Mercado, para informarse sobre la conveniencia de que hubiese alcaldes en Nombre de Dios y Panamá. Hay versiones contradictorias sobre la reunión —se murmuraba que el gobernador había comprado a los vecinos porque consideraba que la figura del alcalde le podía perjudicar—. Sosa escribió a la Corte que los vecinos de Nombre de Dios querían que se suprimiesen definitivamente las alcaldías ordinarias porque se las repartían los más acaudalados y las utilizaban en su propio beneficio. El cabildo, sin embargo, decía que el gobernador había coaccionado a Pedro Mercado para que lo dejara actuar a su antojo.
Continuó fielmente la tarea que había iniciado Clavijo.
A poco de tomar posesión recibió a unos sacerdotes que le expusieron que consideraban que los pueblos reducidos por Clavijo se encontraban en situación ilegal porque se les había eximido del pago de los diezmos. Le dijeron que habían pedido a la Audiencia y al Arzobispado de Lima un dictamen sobre la situación, que resultó en una sentencia en la que se obligaba a los indios a pagar los diezmos con efecto retroactivo. Contra dicha sentencia se manifestó Sosa en una carta a S. M.
Visitó a los indios de la Alcaldía mayor y dictó varias ordenanzas y mandamientos para velar por su protección. En cumplimiento de una Real Cédula fechada en Valladolid el 3 de marzo de 1554, comenzó a poner en libertad a los indios del encomendero Fernández de Rebolledo y los reunió en Parita. Recogió sus nombres en un listado, les notificó que eran libres y que podían regresar a sus tierras si querían y fijó su salario anual en doce pesos por indio y seis por india.
Quería agrupar a los indios en lugares accesibles e iniciarlos en la religión católica, para lo que nombró a un religioso para que los bautizara, confesara y formara. De este modo, durante el gobierno de Sosa se mantuvo la encomienda en Natá pero por poco tiempo, pues su sucesor la abolió en 1558.
Hubo también de enfrentarse a los ochocientos negros cimarrones liderados por el africano Bayano que, escondidos en los bosques de la banda oriental no lejos de Nombre de Dios, atacaban con flechas envenenadas a los viajeros que pasaban por el camino entre Nombre de Dios y Panamá. Pero las campañas de Sosa contra los cimarrones fueron un fracaso. En 1555 manifiesta a S. M. que tiene la intención de formar un pueblo con negros libertos de las afueras de la ciudad para que mantengan acciones armadas contra los cimarrones, quienes podrían integrarse en las comunidades independientes a medida que se pacificasen.
Fue sustituido por Juan Ruiz de Monjaraz en 1556.
Obras de ~: Relación sobre los indios de Tierra Firme, 1553; Información hecha de oficio en la provincia de Tierra Firme sobre los vagabundos y personas inquietas por Álvaro de Sosa, Panamá, 19 de abril de 1555; Provisión y libertad de los indios de Juan Fernández Rebolledo, por Álvaro de Sosa, Parita, 2 de agosto de 1556.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias, Panamá, 236, L. 9, F. 230v.-231r., Residencia de Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 226r.-227r., Carta de baraterías a Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 189v.-191v., Respuesta a Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 84r., Licencia de armas a Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 76r., Licencia de esclavos a Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 244r.-244v., Prórroga a Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 77r., Exención de almojarifazgo a Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 320v.-321r., Justicia a Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 231r.-232r., Residencia de Álvaro de Sosa; Panamá, 236, L. 9, F. 70v.-72v., Título de gobernador a Álvaro de Sosa.
J. B. Sosa y E. J. Arce, Compendio de historia de Panamá, Panamá, Ed. de la Lotería Nacional de Beneficencia, 1971; S. A. Zavala, El servicio personal de los indios en el Perú: Extractos del siglo xvi, México, El Colegio de México, 1978; M. del C. Mena García, La sociedad de Panamá en el siglo xvi, Sevilla, Diputación Provincial, 1984.
Covadonga de Quintana Bermúdez de la Puente