Ayuda

Manuel Ubiña y Sánchez

Biografía

Ubiña y Sánchez, Manuel. Vigo (Pontevedra), 9.VIII.1793 – Badajoz, 26.I.1853. Militar, coronel de Ingenieros.

En agosto de 1810 entraba a formar parte, como cadete, del Regimiento de Infantería de las “Cuatro Órdenes”, ingresando ese mismo año en la Academia Militar de San Fernando en Cádiz. En el marco de la Guerra de la Independencia, participaba en la expedición, que, saliendo de Cádiz, tenía como objetivo Sanlúcar de Barrameda, el Campo de Gibraltar y más tarde el condado de Niebla, terminando con la liberación de Sevilla, en agosto de 1812. Aún en guerra, a partir del 5 de febrero de 1813 realizaba estudios en la Academia provisional de Ingenieros de Cádiz como subteniente, ingresando en el Cuerpo en esa misma fecha, tras un examen de suficiencia. En 1814 ascendía a teniente de Ingenieros con destino al Regimiento del Cuerpo.

El 29 de octubre de 1815 era destinado a la Subinspección de Cuba como capitán 1º (al ser destinados a Ultramar, recibían el grado inmediato superior, que perdían al volver a la Península), de donde pasaba al castillo de San Juan de Ulúa (Veracruz), como jefe de Ingenieros. Permanecía en la citada fortaleza, sitiada por los insurgentes desde el 2 de enero de 1825, hasta la capitulación de la misma, el 18 de noviembre del mismo año, bajo el mando del brigadier gobernador, José Coppinger. La heroica defensa duró más de cuatro años, siendo recompensados los defensores con 165 cruces Laureadas de San Fernando, entre ellos Manuel Ubiña, concedida según Real Despacho de 30 de enero de 1828.

De San Juan de Ulúa volvía a La Habana, a las órdenes del subinspector de Ingenieros, Anastasio Arango, permaneciendo en Cuba hasta el 4 de junio de 1838 en que volvía a la Península.

Durante su primera estancia en Cuba llevaría a cabo numerosas obras. Así, en 1817 realizaba un proyecto para un puente sobre el río Buey Vaca de Matanzas, y entre 1819 y 1821 era comisionado para que redactara un proyecto de defensa del pueblo de Casilda, en el municipio de Trinidad, en la provincia de Sancti Spíritus de Cuba. Para el proyecto, levantaba numerosos planos del citado pueblo y su demarcación, disponiendo la construcción de una batería en la desembocadura del río Guaurago y un reducto en la punta de Casilda y entre 1824 y 1825 llevaba a cabo un reconocimiento de las jurisdicciones de San Juan de los Remedios y de Santa Clara para un proyecto de su defensa.

De vuelta en Cuba, tras la heroica defensa de San Juan de Ulúa, en 1827 se abrieron diligencias para la construcción de un nuevo cuartel en la ciudad de Matanzas, con capacidad para unos 800 hombres, ordenándose que el capitán de Ingenieros Manuel Ubiña pasase a dicha localidad para determinar el espacio más propicio para su construcción, como su proyecto y ejecución. También se le encargaba que realizara un reconocimiento del fuerte de la Vigía en vista de que, con el paso del tiempo por la rápida expansión de la población, quedaría sin efectividad. Era ascendido a teniente coronel del Cuerpo el 8 de septiembre de 1837.

Vuelto a la Península en 1838, al siguiente año era destinado al Ejército de operaciones del Centro (en el marco de la Primera Guerra Carlista), tomando parte en acciones de la importancia del sitio de Aliaga, donde se le concedía el grado de coronel (los oficiales de Ingenieros, Artillería y Estado Mayor podían ascender en tres escalas: la de su Cuerpo, por antigüedad, y por méritos en las de grado del Ejército, y efectivo en el mismo). En el desarrollo de la contienda, trabajaba en las obras de fortificación de Calatayud, Castillo de Mesones de Isuela, en Zaragoza, y en Camarillas (Teruel), a lo largo de 1839. En 1840 realizaba el proyecto de sitio y ataque del castillo de Aliaga, ya citado, llevado a la práctica entre el 11 y 15 de abril, y en ese mismo año de 1840 dibujaba un croquis de la villa de Cantavieja, abandonada por los carlistas el 12 de mayo, después de incendiarla.

Promovido a coronel de Ingenieros el 9 de octubre de 1843, era destinado al mando de la Dirección Subinspección del Cuerpo en Castilla la Vieja, de donde pasaba a la Dirección-Subinspección de Ingenieros de Extremadura, falleciendo en la plaza de Badajoz en 1853.

Además de la Cruz Laureada de San Fernando, ya citada, era Comendador de la Orden Americana de Isabel la Católica.

 

Fuentes y bibl.: Archivo General Militar de Segovia (AGMS), Exps. personales.

Estados (Escalillas) del Cuerpo de Ingenieros, 1815-1854; J. López Muiños, Algunos aspectos de la Ingeniería Militar española y el Cuerpo Técnico, Madrid, Ministerio de Defensa, 1993; L. de Sequera Martínez, Historial de las Unidades de Ingenieros en Ultramar (la Campaña de 1898), Madrid, Talleres del Centro Geográfico del Ejército, 1999; J. Carrillo de Albornoz y Galbeño, “Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando pertenecientes al Arma de Ingenieros”, en Memorial del Arma de Ingenieros (Madrid, Ministerio de Defensa), n.º 63-66 (2001 y 2002); A. de Ceballos-Escalera y Gila et al., La Real y Militar Orden de San Fernando, Madrid, Palafox y Pezuela, 2003; I. J. López Hernández, “El Cuartel de Santa Cristina de Matanzas. Proyecto, construcción y autoría”, en Arquitectura y Urbanismo, 37, 1 (2016); A. Faus Prieto, “Cartografía de la Primera Guerra Carlista. Planos del frente del maestrazgo del capitán Manfredo Fanti (1837-1840)”, en Saitabi. Revista de la Facultad de Geografía e Historia, 66 (2016), págs. 141-162; I. J. López Hernández, Ingeniería e Ingenieros en Matanzas. Defensa y Obras Públicas en Cuba, entre 1800 y 1868, Tesis doctoral, Sevilla, Universidad de Sevilla, 2018.

 

Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño