Muy frecuentemente se le llama Juan Felipe de Cár­denas y Córdoba; era hijo de García de Cárdenas y Salazar, natural de la Puente del Arzobispo, y de Ma­ría Dorotea de Berrío, natural de Madrid, hermana que era de Martín de Berrío, caballero de la Orden de Santiago y maestre de campo y gobernador de Gaeta. Sus abuelos paternos fueron Alonso de Cár­denas, natural de la villa de Alcaudete que murió bajo testamento otorgado en Estrella (1611), y María de Salazar, natural de la Puente del Arzobispo. Sus abue­los maternos fueron Juan López de Berrío, natural de Medinaceli, y Isabel de Angulo, natural de San Mar­tín de Baldepusa.

Era gentilhombre de boca desde que se había puesto casa a Carlos II y fue regidor de su villa natal durante veinticuatro años y corregidor dos veces de ella, tras lo cual se estableció en Madrid y fue elegido regidor, desempeñándose también como corregidor de Ante­quera durante tres años. [...]