Soler Munárriz, Vicente. Malón (Zaragoza), 4.IV.1867 – Motril (Granada), 15.VIII.1936. Agustino recoleto (ORSA), beato.
Nació en el seno de una familia de labradores y muy pronto sintió la vocación al sacerdocio, ingresando a los doce años en el seminario de Tarazona (Zaragoza).
En 1882 entró en los agustinos recoletos, haciendo el noviciado en Monteagudo (Navarra), donde profesó el 15 de mayo de 1883, añadiendo entonces a su nombre el de San Luis Gonzaga. Estudió la filosofía y la teología en el propio colegio de Monteagudo y desde 1885 en San Millán de la Cogolla (La Rioja), pasando luego al colegio de Marcilla (Navarra), donde fue ordenado diácono el 15 de junio de 1889. Recién ordenado fue destinado a las Filipinas, adonde llegó el 25 de octubre de ese mismo año, recibiendo en Manila la ordenación sacerdotal, el 31 de mayo de 1890. Durante nueve meses, permaneció en el santuario de Antipolo estudiando tagalo, pasando en marzo de 1891 a Sablayan, en la isla de Mindoro, y en seguida a Mamburao, en la misma isla, donde por siete años fue el superior de la misión.
En abril de 1898 fue enviado a la parroquia de Taysan, en la isla de Luzón, pero al mes hubo de abandonarla, expulsado por los insurrectos y refugiándose en la isla de Tablas. Allí, el 30 de julio de 1898, fue hecho prisionero por los independentistas junto a otros nueve agustinos, sufriendo toda clase de maltratos y siendo incluso condenado a muerte, hasta que el 27 de febrero de 1900 fue liberado, gracias a la intervención norteamericana.
Los siguientes seis años los pasó en Manila, primero en el Convento de San Sebastián y desde 1902 en el de San Nicolás, del que llegó a ser prior durante un año. En noviembre de 1906, volvió a España, ejerciendo varios ministerios en Navarra y Granada hasta que en 1909 fue destinado como prior al convento de Motril (Granada). Colaboró en estos años con algunas revistas de la Orden, firmando sus artículos y el único libro que publicó con el seudónimo de V. Rosel.
En dos etapas diferentes, desde 1915 a 1918 y desde 1924 a 1926, fue elegido superior provincial de Andalucía, y en 1926 llegó a ser prior general de los agustinos recoletos, cargo que aceptó muy a su pesar y al que renunció a los siete meses, continuando entonces su vida religiosa en Motril. El 25 de julio de 1936, al comienzo de la Guerra Civil española, el convento fue asaltado y cinco religiosos agustinos asesinados inmediatamente en plena calle: Julián Benigno Moreno y Moreno —de San Nicolás de Tolentino, Alfaro (La Rioja), 16.III.1871—; León Inchausti Minteguía —de la Virgen del Rosario, Ajángiz (Vizcaya), 27.VI.1859—; Deogracias Palacios del Río —de San Agustín, Baños de Valdearados (Burgos), 22.V.1901—; José Rada Royo —de Nuestra Señora de los Dolores, Tarazona (Zaragoza), 17.XI.1861—; José Ricardo Díez Rodríguez —del Sagrado Corazón de Jesús, Camposalinas (León), 16.II.1909—. Al día siguiente, fueron asesinados a las puertas de la iglesia parroquial otro sacerdote agustino y el párroco de la localidad: Vicente Pinilla Ibáñez —de San Luis Gonzaga, Calatayud (Zaragoza), 5.IV.1870—; y el párroco Manuel Martín Sierra — Churriana de la Vega (Granada), 2.X.1892—. Había sido alumno del colegio de los Escolapios, ingresando en el seminario diocesano de Granada a los diecisiete años y siendo ordenado sacerdote en 1915.
El padre Soler había logrado refugiarse, al ser asaltado el convento, en casa de unas amigas, pero fue descubierto el día 29 de julio y conducido a la cárcel, donde siguió ejerciendo el ministerio sacerdotal entre los detenidos. El día 15 de agosto, en compañía de otros dieciocho presos, fue llevado al cementerio municipal y allí fusilado.
El proceso diocesano de canonización se abrió en 1952; los siete agustinos y el párroco fueron beatificados por el papa Juan Pablo II el 7 de marzo de 1999 en la Basílica de San Pedro del Vaticano.
Obras de ~: Un mártir de la Independencia: Fr. José de la Consolación, Granada, 1907.
Bibl.: A. Martínez Cuesta-J. Berdonces, Una comunidad mártir. El beato Vicente Soler y los otros mártires de Motril, Madrid, Augustinus, 1999; S. Hoces Pérez, Manuel Martín Sierra: pastor bueno y mártir de Jesucristo, Monachil, Santa Rita, 1999; A. Martínez Cuesta, “Beato Vicente Soler y compañeros”, Nuevo año cristiano, vol. V, Madrid, Edibesa, 2001, págs. 89-96.
Miguel C. V ivancos Gómez, OSB
