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Isidoro Uribesalgo Guruceta

Biografía

Uribesalgo Guruceta, Isidoro. Arechavaleta (Guipúzcoa), 4.VI.1873 – San Sebastián (Guipúzcoa), 8.V.1928. Escultor.

Isidoro Uribesalgo es un buen ejemplo de un escultor tradicional, apegado a la tradición clásica, con un buen dominio de la técnica escultórica y más inclinado hacia la escultura religiosa, aunque trata también otros géneros como la escultura monumental o los retratos. Se trata de un escultor que conoció de primera mano la escultura renacentista y en concreto Miguel Ángel, aunque se vio atraído por la influencia del barroco de Bernini.

Uribesalgo nació en Arechavaleta, un pequeño pueblo de Guipúzcoa y creció en un entorno rural. Desde pequeño mostró afición por modelar con arcilla y marchó a Vitoria en 1886 a estudiar en la Escuela de Artes y Oficios, donde permaneció hasta 1889, recibiendo una formación más orientada al dibujo. En el verano de 1889 centraba su formación en la talla de madera con un artesano local, Felipe Arrese Beitia, conocido como el Santero de Otxandiano.

En 1890 inició con su tío, Julián Zaloña, a una peregrinación a Roma lo que le permitió conocer la cultura y la tradición clásica in situ. El escultor permaneció en Italia durante diez años y además de Roma conoció Florencia, Carrara e incluso París.

Durante esta estancia italiana continuó sus estudios, primero en el Instituto de Bellas Artes y más tarde en la Academia de San Luca. Esto le permitió conocer las técnicas escultóricas y también las distintas materias primas y especialmente el mármol.

En 1897, aunque todavía permanecía en Italia, solicitó una pensión de la Diputación de Guipúzcoa que le fue concedida por tres años y que le trajo uno de sus encargos más importantes: el monumento a Fray Andrés de Urdaneta en Ordicia (Guipúzcoa).

En 1900 regresa a Arechavaleta y termina este primer gran encargo de la Diputación guipuzcoana, que fue inaugurado en septiembre de 1904. También por estas fechas, 1904, realizó una Piedad para la iglesia de San Pedro del Muelle de San Sebastián, de claro recuerdo miguelangelesco.

En 1907 trasladó su residencia a San Sebastián, al barrio de Ategorrieta, y allí continuó realizando una importante labor en la escultura religiosa como se puede apreciar en su colaboración para el panteón del duque de Mandas de la iglesia de San Ignacio en San Sebastián, el nuevo altar para la iglesia de los Jesuitas en San Sebastián o el Cristo yacente que realizó para la iglesia de su localidad natal. Además de la escultura religiosa, destacó en los bustos retratos de los que se conservan un número importante. Durante todo este periodo mantuvo su taller abierto en San Sebastián y se relacionó con artistas importantes como el arquitecto Manuel Domínguez y los pintores Ignacio Ugarte, Santiago Arcos y Pablo Uranga.

Uribesalgo falleció en mayo de 1928 a causa de una infección tetánica provocada al debastar una pieza de madera con la que estaba trabajando.

 

Obras de ~: Monumento a Fray Andrés de Urdaneta, Ordicia (Guipúzcoa), 1904; San Juan Bautista, parroquia de San Juan, Mondragón (Guipúzcoa), 1903; Busto de don Fermín Calbetón, Deva (Guipúzcoa).

 

Bibl.: V. Cobreros Uranga, “Nuestros artistas de ayer. El escultor Isidoro Uribesalgo” en Revista Gaviota, Asociación Artística de Guipúzcoa (1949) [separata]; I. Moreno Ruiz de Eguino, “Isidoro Uribesalgo (1873-1928). Un escultor neoclásico a la búsqueda del naturalismo”, en Artistas vascos en Roma (1865-1915), San Sebastián, Fundación Kutxa, San Sebastián, 1995, págs. 379-409.

 

Ana Arregui Barandiaran