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Juan Antonio de Urrutia y Arana

Biografía

Urrutia y Arana, Juan Antonio de. Marqués de Villar del Águila (III). El Benefactor de Querétaro. Valle de Llanteno (Álava), 30.XI.1670 – Ciudad de México (México), 29.VIII.1743. Corregidor, benefactor, caballero de la Orden de Alcántara.

Bautizado en el Santuario de Nuestra Señora de La Encina, nació el 30 de noviembre de 1670 en el Valle de Llantero de Álava. Hijo de Domingo de Urrutia e Inoriza y de María Antonia de Arana y Chavarri, sucedió en el título a su abuela paterna María Pérez de Inoriza y Ochoa de Ureta, quien a su vez había sucedido a su hijo el I Marqués, Juan Gerónimo de Urrutia e Inoriza.

Cuando contaba unos dieciocho años se embarcó hacia Nueva España, interviniendo en la rebelión de los indígenas que tuvo lugar en la ciudad de México en 1692, por lo que se le nombró capitán de Caballos de Corazas. En 1693 recibió el oficio de alcaide de la Alameda y los años siguientes ostentó el cargo de regidor perpetuo. En 1696 fue nombrado obrero mayor y diputado de Oropios. Caballero de la Orden de Alcántara en 1698 y, en 1713 corregidor o justicia mayor de la Ciudad de México.

El 9 de febrero de 1699 se casó en Sagrario (México) con María Josefa Paula Guerrero Dávila Moctezuma y Fernández del Corral, dama acaudalada de importante familia. El matrimonio no tuvo hijos, aunque adoptaron a cuatro a los que ambos tuvieron muy en cuenta en sus últimas disposiciones. La convivencia fue difícil y llena de sinsabores, tal como dejó escrito el marqués en unos apuntes secretos según menciona en sus obras Íñigo Laviada. Cuenta la leyenda que el marqués se enamoró de una monja sobrina de su esposa, sor Marcela, quien le pidió que construyera un acueducto para conducir el agua a la ciudad y la casa más hermosa de Querétaro, a cambio de un amor puro y lleno de entendimiento.

En 1713 era corregidor o justicia mayor de la Ciudad de México, y unos años más tarde, cuando contaba con grandes riquezas, en parte por su matrimonio con María Josefa Paula, se decidió construir de su propio peculio un acueducto con el que mitigar los efectos de la contaminación de los ríos en la salud de sus habitantes, que en aquellos tiempos sufrían frecuentes enfermedades intestinales por esa causa. Después legaría gran parte de su fortuna a obras benéficas, así como a sus hijas expósitas. Había testado en la Ciudad de México el 28 de noviembre de 1742 y falleció el 29 de agosto del año siguiente, siendo sepultado en la Iglesia de Santo Domingo de la capital azteca.

En el siglo XVIII se erigió un monumento para honrarlo en la ciudad de Querétaro. Se trataba de una estatua de piedra colocada en el centro de una alberca, la alberca a la que llegó por primera vez el agua de acueducto.

Como marqués de Villar del Águila le sucedió su sobrino Juan Antonio Fernández de Jáuregui y Urrutia (Menagaray, Álava, 8.I.1699 – 22.I.1749), hijo de su hermana María de Urrutia y Arana que había casado con Sebastián de Jauregui y Ojirando (u Oxirando).

 

Fuentes y bibl.: Archivo del Ministerio de Justicia de Madrid, Secc. Títulos Nobiliarios, exp. Marqués de Villar del Águila; Archivo General de la Nación de México, Testamento de Juan Jerónimo de Urrutia e Inoriza.

G. Ramírez Montes y J. Iturrate, Juan Antonio de Urrutia y Arana, 1670-1743: Un ilustre Ayalés en México, Álava, Obra Cultural de la Caja de Ahorros Municipal, 1979; I. Laviada Arrigunaga, Vida y muerte de un latifundio, México, Porrúa, 1984, págs. 1-18.

 

Galo Gijón de Amírola