Saavedra y Cueto, Gonzalo. Marqués de Bogaraya. París (Francia), 12.VIII.1831 – Madrid, 3.I.1899. Flautista, gentilhombre de cámara de Alfonso XII y alcalde de Madrid.
Nacido en París, debido al exilio por motivos políticos de su padre, Ángel Saavedra y Ramírez de Baquedano, duque de Rivas; el marqués de Bogaraya fue una persona clave en el proceso de integración y desarrollo de la flauta sistema Boehm en España a finales del siglo xix, motivo por el que los compositores de la época dedicaron a él gran parte de las obras que escribían para este instrumento. De París se trasladó a Tours con su familia a los pocos meses de vida, permaneciendo en esta ciudad hasta el 24 de octubre de 1833, año en que hubo amnistía y el moderado duque de Rivas regresó a España con su familia, para ocupar cargos de gobierno en la regencia de María Cristina. Estudió la flauta y llegó a alcanzar un nivel más que considerable con este instrumento, lo cual le permitió ofrecer conciertos en público y participar en distintas agrupaciones. En 1871 presidió la Sociedad de Conciertos del Circo Rivas en Madrid, posteriormente llamado Teatro Príncipe Alfonso, y la Sociedad Filarmónica. En mayo de este año participó como flautista bajo la dirección de Jesús de Monasterio en el Teatro de la Alhambra, en las funciones organizadas por el Centro Artístico-Literario de Madrid, donde se representaban óperas españolas, dándose a conocer la obra de Valentín Zubiaurre Don Fernando el Emplazado.
En 1879 fue nombrado profesor honorario de flauta de la Real Capilla de Música por Real Orden de 24 de julio de 1879. En el expediente (29 de julio de 1879) se muestra que la plaza fue otorgada porque renunció a recibir cualquier tipo de retribución y optar a las vacantes que pudieran producirse. El maestro Zubiaurre, que ocupaba la dirección de la capilla en esos momentos, hizo constar que se le concedía dicha plaza porque “las condiciones y aptitud del solicitante son suficientes para el buen desempeño de un destino al que solo aspira por sus aficiones artísticas, con renuncia absoluta a todo sueldo, retribución ni vacantes de número que ocurran en su clase”. El 23 de octubre fue nombrado socio honorario de la Sociedad de Conciertos de Madrid, entidad de la que fue presidente durante cinco años, siendo designado presidente honorario desde el 12 de diciembre de 1884 —ya que los estatutos de la Sociedad estipulaban un período máximo de cinco años—. Le sucedió en la presidencia el conde de Morphy. Al marqués de Bogaraya se le atribuye la consolidación de la influencia wagneriana en la Sociedad de Conciertos y la introducción de la figura del director invitado, merced a la cual Saint-Saëns dirigió la orquesta en 1880.
Además de participar en numerosos tribunales de concursos, en 1882 formó parte del jurado que hubo de juzgar las pruebas de oposición, para cubrir la Cátedra de Flauta vacante en el Conservatorio madrileño por la muerte de Pedro Sarmiento, siendo el que propuso la implantación del nuevo sistema de Boehm a partir de tal fecha, incluso para el desarrollo de las mencionadas pruebas, ya que el Conservatorio de París hacía veintidós años que lo había declarado sistema de flauta oficial. El 21 de enero de 1884 fue nombrado alcalde de Madrid, cargo que ocupó hasta el 4 de abril de 1885. Durante este período se inauguró la Cárcel Modelo y se terminaron las obras de la iglesia de San Andrés de los Flamencos. También acontecieron episodios desgraciados durante su mandato como el desbordamiento del río Manzanares, a los tres meses de ocupar la presidencia de la alcaldía y que arrasó lavaderos, casas y cosechas de las huertas ancladas en sus orillas. El 9 de julio, se declaró un incendio en la Armería Real; las llamas amenazaban al Palacio Real y el propio Alfonso XII participó en las tareas de extinción. Se decía de él que era el alcalde de la elegancia y destacaba por su simpatía y por cultivar las amistades. El 23 de enero de 1885, Alfonso XII le nombró gentilhombre de Cámara con ejercicio.
Bibl.: [“G. Saavedra”], en El Arte (Madrid), año I, n.º 5, 1 de noviembre de 1873; J. Valverde Durán, La flauta, su historia, su estudio, Madrid, Sucesores de Rivadeneyra, 1886 (ed. de J. Gericó y F. J. López, Sevilla, Conservatorios Superiores de Madrid y Sevilla, 1997); L. Ballesteros Robles, Diccionario Biográfico Matritense, Madrid, Imprenta Municipal, 1912; E. Fernández Arbós, Arbós, Madrid, Cid, 1963; R. Sobrino, El sinfonismo español en el siglo XIX: la Sociedad de Conciertos de Madrid, tesis doctoral, Oviedo, Universidad, 1992; A. Ruiz Tarazona, “Verdi y los poetas españoles del siglo XIX”, en Nassarre. Revista aragonesa de musicología, vol. IX, n.º 2 (1993), págs. 305-307; A. del Río, Historias y anécdotas de los alcaldes de Madrid, Madrid, Temas de Hoy, 1994; J. Gericó Trilla y F. J. López Rodríguez, La Flauta en España en el s. XIX, Madrid, Real Musical, 2001; J. Gericó, F. J. López y R. Sobrino, “Saavedra y Cueto, Gonzalo”, en E. Casares Rodicio (dir. y coord.), Diccionario de la música española e hispanoamericana, vol. IX, Madrid, Sociedad General de Autores y Editores, 2002, pág. 511.
Joaquín Gericó Trilla y Francisco Javier López Rodríguez
