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Tirado, Juan Bentura. ?, p. m. s. XVII – s. m. s. XVII. Mercader-banquero, asentista del rey.

El inicio de la actividad empresarial de Juan Bentura Tirado se encuentra en Sevilla, ciudad de la que fue vecino en los años cuarenta del s. XVII y donde participaba activamente en el comercio con América. En 1643, residiendo aún en Sevilla, firmó su primer asiento de dinero a instancias de Joseph González, junto a otros importantes mercaderes de la ciudad. Entre 1650 y 1665 sirvió a la Corona como asentista prestando distintas sumas de plata y vellón en Sevilla y Madrid. También lo hizo en Flandes, en al menos una ocasión.

Su vinculación con la Carrera de Indias le permitió cobrar gran parte de sus consignaciones en América, en lugar de tener que esperar a que las flotas llegasen a Sevilla. Juan de Góngora, con quien negoció personalmente muchas de sus provisiones, fue después el juez conservador de sus asientos, cargo que ocupó Antonio Monsalve en 1668.

Juan Bentura compró la jurisdicción, señorío y vasallaje de la villa de Santa Olalla en Sevilla. A su muerte, su yerno, Pedro de Camino, liquidó sus cuentas y atendió a sus acreedores. En 1688, su hijo y heredero, Bernardo Tirado y Leyba, entró en algunas negociaciones crediticias con la Corona mientras se saldaban definitivamente las cuentas de su padre en la Contaduría Mayor.

Bibl.: A. Domínguez Ortiz, Política y Hacienda de Felipe IV, Madrid, Edit. de Derecho Financiero 1960, págs. 145; C. Sanz Ayán, Los banqueros de Carlos II, Valladolid, Universidad, 1989, págs. 330-331; F. Ruiz Martín, Las Finanzas de la Monarquía Hispánica, Madrid, Real Academia de la Historia, 1990, pág. 136; C. Sánchez Belén, La política fiscal en Castilla durante el reinado de Carlos II, Madrid, Siglo XXI, 1996, pág. 117; J. E. Gelabert, La bolsa del rey, Barcelona, Crítica, 1997, pág. 122.

Carlos Álvarez Nogal