Ayuda

Ignacio de Jerusalem y Stella

Biografía

Jerusalem y Stella, Ignacio. Lecce (Italia), c. 1710 – Ciudad de México (México), XII.1769. Músico, violinista, clavecinista, maestro de capilla, compositor.

Llegó a América en 1742. Fue contratado para México cuando se hallaba en Cádiz, junto con un grupo de instrumentistas y cantantes de ópera italiana para su Coliseo Nuevo. Así pues, empezó como director de música teatral, aunque ya empiezan a existir obras suyas religiosas en el archivo catedralicio mexicano desde 1746. En 1749 fue nombrado interinamente maestro de capilla y confirmado como titular el 3 de agosto de 1750. En veinte años, los que transcurrieron hasta su muerte, cumplió con creces una de las misiones de los maestros de capilla: componer nueva música litúrgica para las funciones. Su opus, con más de trescientos títulos, es admirable. Se conserva, al parecer, casi todo lo que compuso, la mayoría en el archivo de la catedral metropolitana, aunque también en otros archivos, incluso en Santa Bárbara (California) por el norte, y en la catedral de Guatemala, al sur, lo que indica la expansión de su música. Su labor de mejora de la capilla musical lo fue en todos los órdenes: atención a la escoleta, inventarios de partituras, compra de instrumentos, ampliación de la plantilla de músicos y otros asuntos importantes. A pesar de todo, tuvo algunos roces con el Cabildo; hasta “tres crisis” relata con detalle C. H. Russell (2001-2002).

Jerusalem mostró sus deseos de abandonar el pasado estilo barroco y dar aire nuevo, que se debería llamar clasicista, a su música; incluso en el villancico exigió un cambio de letrista en 1756, consiguiendo relevar al español Francisco Selma, que llevaba treinta y tres años aportando sus barrocas letras, para que otro creara más inspirados argumentos. Su estilo musical es “predominantemente homofónico, armónicamente imaginativo, con una escritura melódica muy rica, con abundantes contrastes de dinámica y textura, con frecuentes secciones para las cuerdas y pasajes brillantes para los violines que demuestran el claro carácter secular de la música catedralicia de su tiempo” (A. Tello, 2000). Los famosos villancicos, usados no sólo para el ciclo de Navidad, sino para cualquier festividad litúrgica, son extensos, con voces e instrumentos varios; por ejemplo, el titulado Rompa la esfera marcial sonora trompa, se compuso para ocho voces, violines, trompas (precisamente) y bajo continuo.

Conforme a lo escrito por Juan de Viera, en 1777, “dirigió las actuaciones musicales de la orquesta y el coro casi todos los días, y la capilla de música fue la más selecta, hábil y diestra de todas las capillas de América”, mientras que consiguió que el “coro cantando se pareciera más a un coro de ángeles que de humanos” (C. H. Russell, 2001-2002). A su muerte, el Cabildo catedralicio reconoció el ingente trabajo de Jerusalem, sobre todo en los diez años últimos de su vida, e hizo inventariar su música. Muchas de sus composiciones se siguieron interpretando en la América española hasta el siglo XIX. Más modernamente se han publicado colecciones de sus obras en Tesoro de la Música Polifónica de México (México, Instituto Nacional de Bellas Artes) y por el musicólogo C. H. Russell (San Luis Obispo, California, 1992).

 

Obras de ~: Música litúrgica [en latín]: misas: en Re, a 4 voces [= v.], 1763; en Re, a 8 v.; en Sol, a 4 v., 1767; en Fa, a 4 v., 1768; en Fa, a 8 v.; en Sol, a 8 v. Réquiem: en La menor, 1760; en Mi bemol. Salmos de vísperas: Beatus vir, en Fa, a 2 v.; Beatus vir, en Do, a 8 v.; Confitebor tibi Domine; Credidi; Dilexi quoniam exaudit Dominus; Laetatus sum; 8 Dixit Dominus: en Si bemol, a 2 v.; en Si bemol, a 8 v.; en Re, a 8 v.; en Re menor, a 8 v.; en Fa, a 2 v.; en Fa; en Sol, a 4 v.; en Sol, a 8 v.; 4 Laetatus sum: en La menor; en Si bemol, ¿1758?; en Mi bemol; a 4 v.; Lauda Jerusalem; 4 Laudate Dominum omnes gentes: en Si bemol; en Re menor; en Fa; en Sol; Levavi oculos meos; Memorabilia, 1764. Himnos y cánticos: 2 Ave Maris stella: en Fa; en Re menor; Decora lux; Defensor almae; Exultet orbis; Jesu corona; 5 Magnificat: en La menor; en Si bemol; en Do; en Mi bemol; en Fa; Pange lingua gloriosi; Placare Christe; Te Joseph; Ut queant laxis; Veni creador spiritus. Motetes y otros: 2 Ascendit Christus: en Re; en Mi; Egregiae martyr Philipe; Non fecit tatiter; Non turbetur cor vesinum; O vox omnes; Pauperum primo genita; Psalmo de nona primera miravilia; Qui vult venire post me; Regem cui omnia vivunt; 2 Salve regina: en Do, a 1 v.; en Re, a 8 v.; Stabat mater dolorosa; Sub tuum praesidium; Tota pulchra est; Veni Sancte Spiritus; Veni sponsa Christi; Victimae paschali. Responsorios, invitatorios e himnos: para la Navidad; para la Asunción; para San Pedro; para Nuestra Señora de la Concepción; para el día de San José; para el patrocinio de San José; para Nuestra Señora del Pilar; para Nuestra Señora de Guadalupe (2 ciclos); para San Ildefonso; para San Felipe Neri; Exuriente terra Aegypti; Filius meus; Hodie nobis de coelo pax vera; Ornata rimoni tus filiam Jerusalem; Posui adjutorium super potentem. Otras obras: Officium defunctorum; 2 Te Deum laudamus, 5 Lamentaciones; 6 Misereres.

Música religiosa (en español). Arias: Celestes moradores terrestres viadores; Ea feliz vajel; Gorgeos trinando el gallo cantando; O qué golpe suave; Rompa alegre el cielo; Trimphe Maria. Loas: A el eco de la fama dispertando; Con respectuosos esmeros; En hora dichosa la laguna admire coronada; Si es gloria del orbe. Pastorelas: A qué esperáis cherubes; Para dónde caminas; Pastorela, a 8 v.

Villancicos. A de la dulce métrica armonía; A de los cielos; Admirado el orbe aplauda; A gozar el sumo bien; Águila caudalosa; A la esposa es de Dios; A la milagrosa escuela, 1765; Al arma contra Luzes; A la tierra venid; Al cielo subiendo; Alerta las vozes; Al mirar los rayos; Al penetrar la hermosura; Al que en solio de rayos; Amante peregrino; Animase, alientese; Aplaudan alegres; Arca perfectísima; Arcano sagrado; Armoniosos metros; A tan gran afecto; A tan regia vista; A tu feliz natalicio; A velas llamas; Ay mi bien; Bendito sea el Señor; Celestes armonías terrestres consonancias alarmas; Cielo, que alto mirais; Clarines sonad; Con añorosos ecos nuestro pecho amante celebra, 1766; Con canoros ecos; De amor el incendio; De aquel muro en la esfera; Del diciembre rizado; De noche ha nacido; Despierta Bato; De su fé las glorias; Devoto el coro con alegría llama a María; Dolencia padre; Dulce incendio; El aire, la tierra; El amor y el afecto; El celeste gozo; El clarín de la fama; Ella feliz Bagel; El tesoro sagrado; El viento ayrado; En este triste valle; En tiempo, sin tiempo; En una ligera nave; Esta noche las zagalas; Este alto sacramento; Gloria lo ofrece; Gorgeos trinando; La angélica turba; La esfera triumphante rompa la luz; La gloria más bella; La tierra se alegra; Libre de la pena; Los rayos ardientes; Manda Dios que observen; Octavo kalendas; Ola, ola, pastorcillos; O Niño si tiritas; O sacra luciente antorcha; País de Noel; Pedro amado; Plantas frondosas de aqueste jardín; Propicia estrella; Protegido de una estrella; Pues el Asturiano alegre; Que admiráis mortales; Que rayos si aleve fortuna; Que tempestad amenaza; Remedio lucido de la eterna diestra; Rendido qual mariposa; Rompa la esfera marcial sonora trompa; Si admito tu fineza; Si aleve fortuna que rayos; Si el alma de Dios embelleza; Sus glorias cantando; Tesoro sagrado aplaudan rendidos; Todos pueden alegar; Toquen alarma; Un portal arruinado repara el Cielo; Varones ilustres; Venid pastorcillos; Vierte blandamente; Virgen pura, arca sagrada, a 2 v.; Virgen pura, arca sagrada, a 4 v.; Y vive amor en mí.

Bibl.: I. Gomes, Ynventario de la música compuesta por Sr. Dn. Ignacio Jerusalem y Stella, maestro de capilla de la S. Iglesia Catedral metropolitana de Mexico (ms., c. 1757, Archivo de la catedral de México); M. Bernal Jiménez, El archivo musical del Colegio de Santa Rosa de Santa María de Valladolid (...), Morelia, Sociedad Amigos de la Música, Universidad Michoacana, 1939; I. Pope, “Documentos relacionados con la historia de la música en México”, en Nuestra música, México, VI (1950- 1951), págs. 5-28 y 245-253; R. Stevenson, Music in Mexico: a Historical Survey, New York, Thomas Y. Crowell Company, 1952, págs. 140-143 y 155; “Mexico City Cathedral Music: 1600-1750”, en The Americas, XXI, 2 (1964), págs. 111- 135; Renaissance and Baroque Musical Sources in the Americas, Washington, General Secretariat, Organization of American States, 1970; Christmas Music from Baroque Mexico, Berkeley, Los Angeles, University California Press, 1974; J. Estrada, Música y músicos en la época virreinal, México, Sep Diana, 1980, págs. 35, 56, 68 y 122-147; R. Stevenson, “Mexican Musicology, 1980”, en Inter-American Music Review, Beverly Hills, Calif., III (1980-1981), págs. 65-87; W. J. Summers, “Recently Recovered Manuscript Sources of Liturgical Polyphony from Hispanic California”, en Ars Musica Denver, XX/1 (1994-1995), págs. 13-30; G. Pareyón, Diccionario de Música en México, México, Secretaría de Cultura de Jalisco, 1995, pág. 296; Die Musik in Geschichte und Gegenwart [...], Sachteil, Kassel-Basel, etc., vol. I, 1994, col. 561, vol. V, 1996, col. 1.487, vol. VI, 1996, col. 251; A. Tello, “Jerusalem, Ignacio”, en Diccionario de la Música Española e Hispanoamericana, vol. VI, Madrid, Sociedad General de Autores y Editores, 2000, pág. 562; C. H. Russell, “Jerusalem [Hyerusalem], Ignacio [Gerusalemne, Ignacio]”, en The New Grove Dictionary of Music and Musicians, New York, Grove, London, Macmillan Publishers Ltd., 2001-2002 (2.ª ed.), págs. 15-17; G. Béhague, “Jerusalem (y Stella), Ignacio”, en Die Musik in Geschichte [...], Personelteil, vol. IX, 2003, cols. 1029-1031.

 

Fernando Rodríguez de la Torre

Relación con otros personajes del DBE

Biografías que citan a este personaje

Personajes citados en esta biografía

Personajes similares