Chacón Manrique de Lara y Villapecellín, Isidoro. Marqués de Nevares (IX). Piedrahíta (Ávila), 10.I.1809 – Madrid, 18.VIII.1872. Intendente de Ejército y caballero laureado de San Fernando.
Hijo único nacido del matrimonio contraído en Olmedo (Valladolid) entre Catalina Carlota Villapecellín y Tavares —hija de José Vicente Villapecellín y Velasco y de María Agustina Tavares—, y Nicolás María Chacón-Manrique de Lara y Carrillo de Albornoz, VIII marqués de Nevares y caballero de la Orden de San Juan de Jerusalén desde 1796, que fue mariscal de campo de los Reales Ejércitos Españoles (mención dada en el Cuartel General de Santo Domingo de la Calzada el 29 de octubre de 1834), a quien se concedió la Gran Cruz de la Real Orden Americana de Isabel la Católica, el 5 de agosto de 1843, y la Gran Cruz de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, dada en Palacio a 19 de enero de 1835.
A los dieciséis años se le concedió a Isidoro Chacón Manrique de Lara y Villapecellín el empleo de subteniente de Milicias del Regimiento Provincial de Ávila.
En 1829 entró a servir en la Guardia Real de Infantería con el empleo de alférez y, en el mes de mayo del año siguiente, obtuvo el ascenso a teniente, siendo destacado a la villa de Colmenar Viejo, desde donde realizó varias salidas en persecución de la partida de Pablo Santos, a la que sorprendió el 11 de diciembre sobre el río Manzanares, consiguiendo batirla y dispersarla.
En abril de 1835 fue nombrado ayudante del general José Santos de la Hera, jefe del Ejército de Reserva, interviniendo en el levantamiento del primer sitio de Bilbao. En agosto pasó a las inmediatas órdenes del general Ezpeleta, sucesor del general de la Hera, hallándose el día 11 de septiembre en las acciones de Arrigorriaga y de Ollargán. Tras haber librado la primera de ellas, se supo que en los bosques y alturas próximas se hallaba don Carlos con veintidós batallones, por lo que se dio la orden de retirada, poniéndose en marcha las fuerzas de Ezpeleta y Espartero con dirección a Bilbao, cubriendo Espartero la retaguardia con dos batallones y las compañías de preferencia, defendiendo el terreno palmo a palmo y causando abundantes pérdidas a las fuerzas carlistas que atacaron en varias ocasiones, hasta que se llegó al puente de Bolueta, ocupado por fuerzas de infantería y caballería enemigas.
Al hallarse las fuerzas sin municiones, se lanzaron al ataque a la bayoneta, dejando libre el paso, y rechazando en lucha cuerpo a cuerpo el contraataque lanzado por los carlistas. En este combate recibió el teniente Chacón dos heridas de bala, de resultas de las cuales hubo de amputársele la pierna derecha. Por su comportamiento heroico obtuvo como recompensa la Cruz de San Fernando de 1.ª clase por la acción de Arrigorriaga y la de 2.ª clase, Laureada, previo juicio contradictorio, por la de Ollargán, así como los grados de primer comandante y teniente coronel de Infantería.
Los meses siguientes los dedicó a su curación, hasta que, una vez repuesto, en abril de 1837 fue nombrado pagador del distrito de Extremadura y al año siguiente del de Andalucía, con el empleo de comisario de guerra de 1.ª clase.
En 1843 se encontró en el sitio y bombardeo de Sevilla a las órdenes del general Francisco de Paula Figueras. En agosto de ese año fue agraciado con la Gran Cruz de Comendador de la Orden Americana de Isabel la Católica. Nombrado en agosto de 1847 interventor militar del distrito de Cataluña, al año siguiente volvió a desempeñar el mismo cargo en el de Andalucía. En Sevilla, poco después de suceder a su padre en la merced de marqués de Nevares y tras recibir el hábito de la Orden de San Juan de Jerusalén, contrajo matrimonio el 1 de diciembre de 1849 con la algecireña Francisca de Orbeta y Suertegaray, hija de José Ramón de Orbeta y Venancia Suertegaray.
De este enlace nacieron tres hijos.
El noveno marqués de Nevares fue ascendido a intendente militar de 2.ª clase en 1852 y, al año siguiente, destinado a la Intervención General Militar con el empleo de intendente de división, destino en que se mantuvo hasta que en 1859 alcanzó el empleo de intendente de ejército, siendo entonces destinado al distrito de Castilla la Nueva. En 1858 había sido nombrado gentilhombre de cámara de S. M. la reina Isabel II.
En 1868, con el triunfo de la Revolución, pasó a la situación de reemplazo en Madrid y continuó en la misma hasta que en 1871 fue nombrado jefe interventor de la Dirección General, puesto en que permaneció hasta la fecha de su fallecimiento. Con la Restauración en la persona del rey Alfonso XII, sucedió en el título de marqués de Nevares su hijo Nicolás Chacón Manrique de Lara y Orbeta.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar, secc. 1.ª, leg. CH-43.
J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando. Infantería, t. I, Ministerio de Defensa, Madrid, 2001.
José Luis Isabel Sánchez