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Augusto Llacayo Santamaría

Biografía

Llacayo Santamaría, Augusto. Barcelona, 20.I.1839 – Valladolid, 11.X.1886. Médico militar, científico y caballero laureado de San Fernando.

En 1855 consiguió el título de bachiller en Filosofía y al año siguiente fue admitido como practicante meritorio en el Hospital Militar de Madrid.

Siguió la misma carrera que su padre, que ejercía la Medicina en Rialp (Lérida), licenciándose en 1860 en Medicina y Cirugía con la calificación de sobresaliente, para en ese mismo año ingresar con el número uno en el Cuerpo de Sanidad Militar, en el que obtuvo en el mes de agosto el empleo de 2.º ayudante y destino en el batallón de Cazadores de Barcelona.

En 1862 pasó a servir a Filipinas con ascenso al empleo de ayudante 1.º supernumerario, sirviendo en el Regimiento del Rey en Cavite y Manila y embarcando al año siguiente hacia Cochinchina, al habérsele concedido una plaza de médico en el Hospital de Saigón.

Como médico del Cuartel General participó en numerosos hechos de guerra, entre ellos, en la toma de Go-Kong, donde se tuvo que enfrentar a una epidemia de cólera morbo, resultando contagiado y desahuciado hasta el extremo de que recibió la extremaunción.

Por fin pudo ser evacuado a un barco hospital francés y posteriormente al Hospital de Saigón, donde consiguió recuperarse tras permanecer cerca de un mes entre la vida y la muerte.

Estando en fase de recuperación en Manila, sufrió el terremoto del 3 de junio de 1863, en el que resultó herido por una viga en la cabeza, lo que no le impidió presentarse urgentemente en su acuartelamiento para prestar auxilio a los numerosos heridos.

Su actuación en aquellas tierras se vio recompensada con el ascenso a mayor supernumerario y con las Cruces de Carlos III, de la Legión Francesa y de Epidemias.

En ese mismo año atendió a los enfermos de cólera de Cavite y Manila.

Regresó a la Península en 1864, destinado al Regimiento del Príncipe, donde debió permanecer seis meses con licencia por enfermo en Madrid; un año más tarde fue ascendido a primer ayudante médico, sirviendo con este empleo en Vicálvaro y Burgos, obteniendo en 1866 el empleo de médico mayor supernumerario sin antigüedad, siendo destinado a la Dirección General de Sanidad y pasando en ese mismo año a servir en la Guardia de Alabarderos, que sería disuelta seis meses después de su incorporación.

Pasó a servir al Regimiento de Infantería de Gerona y posteriormente al de Lanceros de Villaviciosa, del que fue trasladado al Hospital Militar de Madrid. En 1872 se le recompensó con el empleo de subinspector de segunda por sus trabajos científicos y al año siguiente se incorporó al Cuartel General del Ejército del Norte, en Pamplona.

Nombrado médico de la columna del coronel Navascués, tomó parte en la persecución de las tropas carlistas de Ollo, Pérula y Rada. Participó durante esta guerra en numerosas y reñidas acciones y cayó herido de gravedad en el combate de Aranaz (Navarra), el 14 de marzo de 1873, cuando curaba a los heridos en primera línea. Al ser animado a retirarse de su puesto, no quiso hacerlo, y continuó asistiendo en los puntos de mayor peligro a la curación de cuantos lo fueron en tan memorable jornada, llegando a ponerse espada en mano entre los soldados más avanzados, a quienes arengó y animó con su ejemplo, dando con todo ello prueba de su abnegación, celo y serenidad inquebrantable ante el certero e intenso fuego del enemigo.

Su actuación, definida por el general en jefe, Primo de Rivera, como “heroica en alto grado”, le valdría la concesión por juicio contradictorio de la Cruz laureada de San Fernando por Real Orden de 1 de julio de 1876, y el empleo de subinspector de primera.

Debido a la pérdida de su mano derecha, fue declarado inútil y en octubre de 1873 tuvo que pasar al Cuerpo de Inválidos. Tras su fallecimiento fue enterrado en Burgos, en el panteón de los Quevedos.

Estuvo casado con Sara Quevedo Salazar, con la que tuvo dos hijas, Sara y María Isabel, nacidas en 1874 y 1879, respectivamente.

Destacó como investigador científico, ingresando muy joven, en 1860, en la Academia Quirúrgica Matritense.

En 1863 redactó una extensa Memoria sobre la epidemia de cólera de Cavite, dos años después otra sobre el estado de la Medicina en China, en 1870 una Memoria médico-estadística y económica del Hospital de convalecientes de viruelas en 1867-68, y seguidamente un Proyecto de vacunación y revacunación para el Ejército, estudios y consideraciones acerca de la viruela.

Fue un escritor polifacético, de cuya pluma salieron desde una comedia hasta una obra histórica, científica o divulgativa. Algunos de sus trabajos fueron recompensados con la Cruz de la Emulación Científica y las Encomiendas de Isabel la Católica y Carlos III.

Al verse obligado a abandonar su vida militar, se estableció en el Real Sitio de El Escorial, en cuya biblioteca se dedicó al examen, clasificación y estudio de muchos e interesantes códices científicos militares y literarios, que dieron lugar a la publicación de su obra Antiguos manuscritos.

 

Obras de ~: Un no sé qué! y un qué sé yo!, Madrid, Imprenta de D. Cipriano López, 1859; La revolución de las ideas en España: El fanatismo político-religioso y la libertad, Madrid, Alejandro Gómez Fuentenebro, 1869; Napoleón III, Madrid, Faraldo, 1870; Antiguos manuscritos de historia, ciencia y arte militar, medicina y literarios, Sevilla, Est. Tipográfico de Francisco Álvarez y Cía., 1878; Cochinchina y el Tomkin: España y Francia en el reino de Annam, Burgos, Imprenta de Timoteo Arnaiz, 1883; Burgos: Catedral. Cartuja. Huelgas. Monumentos religiosos, artísticos, curiosidades, cosas notables de Burgos y sus cercanías, Burgos, 1886; Manual del viajero en la catedral de Burgos, Burgos, Timoteo Arnaiz, 1899.

 

Bibl.: M. Parrilla Hermida, “Sanitarios Caballeros de San Fernando”, en Revista de Historia Militar, n.º 10 (1962), págs. 109-157; J. M. Gárate Córdoba, “El Coronel Médico don Augusto Llacayo”, en Ejército, n.º 437 (1976), págs. 3-5; A. de Ceballos-Escalera y Gila, J. L. Isabel Sánchez y L. Cevallos-Escalera y Gila, La Real y Militar Orden de San Fernando, Madrid, Ministerio de Defensa, 2003.

 

José Luis Isabel Sánchez

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