Ayuda

Domingo Andrés

Biografía

Andrés, Domingo. Alcañiz (Teruel), c. 1525 – ?, 13.IX.1598 post. Humanista.

Hijo de Juan Vicent Andrés, Domingo Andrés nació hacia el año 1525 en Alcañiz. Tras cursar sus primeros estudios en la afamada Academia local, refundada unos veinte años antes por Juan Sobrarias, se trasladó a Valencia. En el Studi General de la ciudad del Turia alcanzó el grado de bachiller en Artes Liberales el 9 de febrero de 1547. Unos tres años más tarde, emprendió un viaje a Italia por mar, en el que estuvo a punto de ser apresado por el terrible pirata Dragut. Tras desembarcar en Gaeta, se dirigió a Roma para contemplar, con el entusiasmo de todos los humanistas, los monumentos y ruinas de la antigua urbe, pero, al agotársele allí los medios económicos, se vio en la obligación de ganarse el sustento. Se alistó entonces como soldado y como tal hubo de hacer frente en Siena al levantamiento de la ciudad contra Diego Hurtado de Mendoza. Después, pasó a residir en Bolonia.

Se sabe con seguridad que en 1560 había vuelto a España y que ya en ese año era doctor (posiblemente en Teología). El 25 de junio del citado año se casó en Alcañiz con la viuda Juana Chalduo. De su matrimonio con ella nacieron cuatro hijos, Teodosia, que falleció a los cuatro años, Eufemia, Juan y Marcelo.

Durante casi treinta años, Domingo Andrés fue el preceptor de Humanidades en el Gymnasium alcañizano. Pero, en torno a 1588, el Concejo Municipal lo despidió por motivos que el humanista no confiesa. Por tal razón se marchó a Zaragoza, donde vivió “en la oscuridad” hasta su muerte, aunque en ocasiones volvió a Alcañiz. Su fallecimiento tuvo que ocurrir con posterioridad al 13 de septiembre de 1598, dado que escribió un poema sobre la muerte de Felipe II acontecida en tal fecha.

Sin lugar a duda, Domingo Andrés fue uno de los poetas neolatinos más importantes de Alcañiz y de la España de su tiempo. El códice original de sus obras se conservaba hasta 1939 en el Colegio de las Escuelas Pías de Alcañiz. Su contenido fue dado a conocer en 1860 por el padre Nicolás Sancho, pero hoy se conoce mucho mejor gracias a la aparición del segundo de los tres cuadernos de la copia realizada en 1915 por Manuel López bajo la égida del docto Vicente Bardaviu. El contenido exacto del códice era el siguiente, según reza en el citado cuaderno: págs. 1-18, “dedicatorias, prenotandas y proemios”; págs. 19-216, Anthropolytroseos libri VII; págs. 217-223, égloga sobre la noche de Navidad; págs. 223-226, égloga sobre el dolor de la Virgen ante la crucifixión de su Hijo (perdida en el original ya en tiempos de Nicolás Sancho); págs. 227-307, De mutuo Dei et Virginis amore libri III; págs. 308-333, De Petro Archiapostolo liber unus; págs. 334-365, De Iacobo et Ioanne Zebedaeis fratribus liber unus; págs. 366-396, De Nouisimo Iudicio liber unus; págs. 397-551, Poecilistichon siue uariorum libri V. El códice se cerraba con cinco páginas de composiciones epigramáticas similares a la de esta última obra.

De estos poemas se conserva hoy la mayor parte de los Poecilistichon siue uariorum libri V, editados, traducidos y estudiados por J. M.ª Maestre Maestre en 1987, así como la primera de las dos églogas, los tres libros De mutuo Dei et Virginis amore y los correspondientes libros De Petro Archiapostolo, De Iacobo et Ioanne Zebedaeis fratribus y De Nouisimo Iudicio, que se recogen en el segundo de los tres cuadernos de la copia realizada en 1915. La mayor parte de los poemas de Domingo Andrés son de tema religioso, en consonancia quizá con los estudios de Teología de los que se habla más arriba.

Pero de todas las obras del vate alcañizano la más llamativa es, sin duda, la de sus Poecilistichon siue uariorum libri V, que se conoce en su mayor parte gracias al manuscrito Fortea, una copia realizada hacia 1928 por el turolense Mariano Torres, coadjutor y beneficiario de la parroquia de San Ginés de Madrid. Los epigramas y otras composiciones poéticas de la mencionada obra de Domingo Andrés —de gran finura tanto conceptual como léxica— constituyen una obra de capital importancia tanto para el estudio de su propia vida y de sus relaciones con numerosos eruditos españoles e italianos de su tiempo, como para detectar sus lecturas clásicas y contemporáneas: el latín de laboratorio de los Poecilistichon siue uariorum libri V evidencia el gran conocimiento (directo, por regla general, pero también indirecto, en ocasiones) que tuvo Domingo Andrés no ya de Virgilio, Ovidio, Horacio y Catulo, sino también, sobre todo, de Marcial, como era de esperar de un humanista aragonés.

 

Obras de ~: Una égloga sobre la noche de Navidad, en De mutuo Dei et Virginis amore libri III, De Petro Archiapostolo liber unus, De Iacobo et Ioanne Zebedaeis fratribus liber unus y De Nouisimo Iudicio liber unus (en copia de M. López, 1915, cuad. segundo; ed., trad. y est. de J. M.ª Maestre); Anthropolytroseos libri VII, una égloga sobre el dolor de la Virgen ante la crucifixión de su Hijo y otros poemas de los Poecilistichon siue uariorum libri V no conservados en el manuscrito Fortea editado por J. M.ª Maestre (actualmente perdidas); “Poesías varias” del alcañizano ~, intr., ed., trad., notas e índices a cargo de J. M.ª Maestre, pról. de J. Gil, Teruel, Instituto de Estudios Turolenses, 1987.

 

Bibl.: J. M.ª Maestre Maestre, “Presentación y estudio de los términos Franciscorix y protodochium (¿ptochodochium?), hápax legómena hallados en la obra poética del vate alcañizano Dominicus Andreas”, en Unidad y pluralidad en el Mundo Antiguo. Actas del VI Congreso Nacional de la Sociedad Española de Estudios Clásicos, vol. II, Madrid, Gredos, 1983, págs. 363- 372; “Aportaciones al estudio del léxico filológico de los humanistas: comentario de dos epigramas del vate alcañizano Domingo Andrés”, en Teruel, 71 (1984), págs. 219-243; El humanismo alcañizano del siglo XVI. Textos y estudios de latín renacentista, Cádiz, Servicio de Publicaciones de la Universidad- Instituto de Estudios Turolenses-Ayuntamiento de Alcañiz, 1990, págs. 315-389; “El mundo clásico como fuente indirecta en Domingo Andrés”, en Habis, 21 (1991), págs. 153- 164; A. González Ovies, “Tópica fúnebre en la poesía de Domingo Andrés”, en. J. M.ª Maestre Maestre y J. Pascual Barea (coords.), Humanismo y pervivencia del mundo clásico. Actas del I Simposio de Humanismo y pervivencia del mundo clásico, vol. I.1, Cádiz, Instituto de Estudios Turolenses-Servicio de Publicaciones de la Universidad, 1993, págs. 483-494; A. Gómez Heredia, “Ferecracios en Horacio y en el humanista alcañizano Domingo Andrés: tipología verbal y otros aspectos métricos”, en. J. M.ª Maestre Maestre, J. Pascual Barea y L. Charlo Brea (eds.), Humanismo y pervivencia del mundo clásico. Homenaje al profesor Antonio Fontán, vol. III.2, Alcañiz-Madrid, Instituto de Estudios Humanísticos-Editorial Laberinto-Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 2002, págs. 789-798; J. M.ª Maestre Maestre, “En torno a la influencia de Marcial en el humanista alcañizano Domingo Andrés”, en J. J. Iso Echecogyen y A. Encuentra Ortega (eds.), Hominem pagina nostra sapit. Marcial, 1900 años después [Zaragoza], Diputación General de Aragón, Departamento de Educación, Cultura y Deporte, [2004], págs. 415-440.

 

José María Maestre Maestre

Relación con otros personajes del DBE

Biografías que citan a este personaje

Personajes citados en esta biografía