Es una de las personalidades más mercuriales que ha dado el fútbol español, ya que ejerció como jugador, entrenador, seleccionador nacional, directivo de club, fundador de equipos, árbitro internacional y miembro del comité directivo de la Real Federación Española de Fútbol.

Como jugador comenzó en el Brentford de Inglaterra mientras cursaba estudios comerciales. Vuelto a España, ingresó como jugador en el Real Madrid, con el que fue campeón de España en los años 1905, 1906 y 1907 siendo capitán del equipo. Se trasladó a San Sebastián, donde fue uno de los fundadores de la Real Sociedad de Fútbol de esta ciudad; jugó en el club donostiarra, del que también fue capitán, hasta 1910, año en el que se retiró como jugador. De vuelta a la capital de España, tornó al Real Madrid como directivo; fue vicepresidente del club blanco y presidente en funciones en 1910. Tomó parte muy activa en la creación de la Federación Española de Fútbol y posteriormente en la “contra Federación”, formada por los clubes disidentes del organismo oficial y que adoptó el nombre de Unión Española de Clubs. Vicepresidente de la Real Sociedad de San Sebastián desde 1911 hasta 1915, en 1916 fue árbitro internacional, ya que nacional lo había sido desde sus tiempos de jugador; como tal asistió a los Juegos Olímpicos de 1924 en París. Ocupó diversos cargos en la Federación Española e influyó en los acontecimientos que dieron lugar al nacimiento del profesionalismo y la posterior creación del campeonato nacional de Liga. Ejerció el cargo de seleccionador nacional en trío junto con Castro y Ruete (España-Bélgica, 2-0, el 7 de octubre de 1921) y en solitario en cinco partidos, tres de ellos en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam (Portugal-España, 2-2, el 8 de enero de 1928; España-Italia, 1-1, el 22 de abril de 1928; México- España, 1-7, el 30 de mayo de 1928; Italia-España, 1-1, el 1 de junio de 1928; Italia-España, 7-1, el 4 de junio de 1928). [...]