Soria Pons, Vicente. Fray Humilde. Oliva (Valencia), 9.I.1844 – Benisa (Alicante), 26.II.1905. Religioso franciscano (OFM), siervo de Dios.
Recibió en el bautismo el nombre de Vicente. Sus padres eran Vicente y Mariana. Bien pronto, como era costumbre en aquellos tiempos, dejó la escuela para dedicarse a las tareas del campo. Su trabajo lo compaginaba con una intensa vida de piedad.
Tras un ejemplar noviazgo contrajo matrimonio con Vicenta Catalá Muñinos en la parroquia de San Roque de Oliva el 6 de julio de 1867. Tenía 24 años de edad. Pusieron su residencia en la calle Canterería, número uno, donde nacieron, fruto de dicho matrimonio, diez hijos, de los que solo uno sobrevivió, Miguel, que fue misionero franciscano en México.
La vida de casado de Vicente tenía siempre todos los días la misma actividad: asistencia a la Eucaristía en la parroquia de buena mañana; el trabajo del campo durante toda la jornada y las oraciones por la noche con la familia en el propio hogar. Su esposa, Vicenta, que nunca había gozado de muy buena salud, a los 18 años de matrimonio, se agravó en su enfermedad y sin poder impedirlo la ciencia falleció.
En noviembre de 1887 Vicente Soria ingresó como hermano en los franciscanos de Valencia. Estos habían realizado una fundación en Onteniente, y mientras se construía el nuevo edificio conventual se instalaron provisionalmente en la hospedería de la ermita de Santa Ana, donde se venera el Cristo de la Agonía, patrono de dicha ciudad. Este fue su primer destino, edificando a todos los religiosos, por su virtud y laboriosidad. En mayo de 1890 inició el año de noviciado en el Monasterio de Santo Espíritu del Monte (Gilet), cambiando en esta ocasión el nombre de bautismo, Vicente, por el de Humilde. Un año después, el 29 de mayo, emitió los votos religiosos.
Estuvo unos años en el convento de Benigánim, allí se dedicó a atender el huerto conventual y en los ratos libres a postular limosnas para el sustento de la comunidad. En 1894 emitió su profesión solemne en el Monasterio de Santo Espíritu del Monte, donde residió durante algún tiempo.
El 25 de agosto de 1897 fue destinado a Benisa. Se le confió la portería del convento. Su trato con todos los que se acercaban a aquel recinto quedaban edificados por su cordialidad, sencillez, caridad. También se dedicaba por los pueblos de la comarca de la Marina a recoger limosnas para el sustento del Seminario franciscano que allí radicaba.
Una enfermedad imprevista le afectó mortalmente. Falleció santamente el 26 de febrero de 1905. Todo el pueblo de Benisa se conmovió ante el deceso, ya que le consideraban ya en vida como un santo. El vecindario, presidido por las autoridades locales y sus familiares, asistió a sus exequias. Recibió sepultura en el cementerio de la localidad, en 1971 sus restos mortales fueron trasladados a la iglesia conventual.
En 2008 el padre franciscano Joan Jordi Escrivá del convento franciscano de Benissa, entregó la Causa diocesana del Siervo de Dios fray Humilde Soria Pons, tras clausurarse su proceso diocesano de beatificación.
Bibl.: R. Alventosa García, Fray Humilde Soria Pons, religioso franciscano, ¿viudo?, ¿por qué no?, Segorbe, Imprenta Tenas, 1966; J. M. Barrachina Lapiedra, Fray Humilde Soria, Valencia, Imprenta Nácher, 1995; J. B. Agulló Pascual, Santoral Franciscanos, Provincia franciscana de San José de Valencia, Aragón y Baleares, Valencia, Imprenta Nácher, 1995, págs. 413- 414.
Arturo Llin Cháfer
