Nieto de un homónimo notario y tesorero real, segundogénito del matrimonio entre Jaume March, señor de Albalat, y Guillemona de Esplugues (1334), y hermano menor de Jaume March, también poeta, se le documenta ya en julio de 1338. Debió pasar la infancia en Valencia. En 1347 la familia se trasladó a Barcelona y Pere se educó probablemente al servicio del infante Pedro de Aragón, junto al hijo de éste, Alfonso, según manifiesta en una pieza que le dedicó años más tarde (“ab vós me suy criats”). Desde 1362, o poco antes, se estableció en Gandía al servicio de Alfonso, a la sazón conde de Denia y, en el futuro, marqués de Villena (1366) y duque de Gandía (1399), llamado Alfonso el Viejo. Con él luchó en la guerra contra Pedro el Cruel, y fue herido y apresado en la batalla de Nájera (1367). Pagó él mismo su rescate y ayudó a negociar el de su señor, a quien luego sirvió “por más de cuarenta años” como procurador general y lugarteniente hasta 1412. Para obtener la carta de libertad de Alfonso el Joven, rehén entregado a cambio del padre, viajó a la Corte de Inglaterra en 1381 y 1385 (en esta ocasión hasta Londres y la residencia de Ricardo II en Reading) y siguió la gestión diplomática del proceso hasta su resolución en 1392. En 1376 compró el señorío de Beniarjó y otros lugares cercanos a Gandía, y obtuvo privilegios de su señor. [...]