Fernández Munilla y Contreras, Juan Ignacio. Santa Fe (México), 1765 – Guadalajara (México), 1810. Fiscal del Crimen de Guadalajara, fiscal de lo Civil de Guadalajara.
Era hijo del capitán Juan Fernández Munilla y de Juana Ignacia de Contreras. Su padre perteneció a los gremios de comerciantes y mineros de Guanajuato, y en 1798-1800 era coronel del Regimiento de milicia de Celaya. Se distinguió durante la expulsión de los jesuitas de esa área y recibió la aprobación de José de Gálvez. Empleado en alguna ocasión del luego periodista y editor de la Gazeta de México, Juan López Cancelada, periodista y detractor implacable de los criollos. Juan Ignacio Fernández Munilla tenía tres hermanas, María Ignacia, María Magdalena y María Zenobia, quienes entraron en el convento de Santa Clara de Jesús en Querétaro entre 1786 y 1797.
En 1780 Fernández Munilla obtuvo una beca en el colegio de San Nicolás, Valladolid de Michoacán, para estudiar Artes, recibió el grado de bachiller en 1783 de la Universidad de México y luego obtuvo una beca en el colegio de San Ildefonso, para estudiar Cánones. Se graduó en esa Facultad con el grado de bachiller en 1786. Fernández Munilla sustituyó en la cátedra de Decretos y entró en oposiciones para esa misma cátedra y la de Vísperas de Cánones. En 1790 se unió al Colegio de Abogados de México, y el primero de marzo de 1792 recibió su título de abogado del Consejo Real.
Fernández Munilla fue a España en 1791 para tratar de lograr un puesto. Estaba en Madrid cuando, el 24 de septiembre de 1795, su padre le escribió al virrey, marqués de Branciforte, en busca de su apoyo para el nombramiento de Juan Ignacio a un puesto en una audiencia de Nueva España o un puesto en la Tesorería.
Su padre señaló sus servicios a la Corona, incluyendo provisiones de armas y uniformes para trescientos hombres en el Regimiento de Infantería Provincial de Celaya. Branciforte apoyó su petición remitiéndosela a su cuñado, Manuel Godoy, quien acordó en febrero de 1796. Aunque una Orden Real del 4 de marzo de 1796 invocó dicho nombramiento para cubrir la primera vacante, no obtuvo resultados hasta una segunda Orden del 12 de junio de 1798. Esto ocurrió después del compromiso que Munilla concibió de que su padre proveería 10.000 reales de vellón adicionales anualmente durante el resto de la guerra.
Fue nombrado fiscal del Crimen de la Audiencia de Guadalajara por consulta del primero de agosto y título del primero de diciembre de 1798, cuando la Corona restableció el puesto. Ascendió automáticamente a la Fiscalía Civil cuando ésta quedó vacante en 1799. Partió de Cádiz el 17 de octubre de 1799 en la fragata Asturiana, pero los ingleses la capturaron a media noche el 25 de noviembre y perdió sus libros y la mayor parte de su equipaje. Finalmente ocupó su puesto el 3 de abril de 1800. Aunque apareció en una consulta en 1805 para la regencia de Manila, Fernández Munilla murió sirviendo en Guadalajara.
Fernández Munilla se casó y tuvo una hija llamada Juana que cobraba una pensión de orfandad en Guadalajara en 1817.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias (Sevilla), México 1642, relación de méritos de 1793; Guadalajara 304; Estado, 40, n.º 17; Archivo General de Simancas, Secc. XXIII, Dirección General del Tesoro, Invent. 2, leg. 82, doc. 204.
M. A. Burkholder y D. S. Chandler, Biographical Dictionary of Audiencia Ministers in the Americas, 1687-1821, Westport, Connecticut, Greenwood Press, 1982, págs. 117-118.
Mark A. Burkholder