Guzmán, Juan Alonso de. Señor de Sanlúcar (II). Ceuta, 24.VI.1285 – Jerez de la Frontera (Cádiz), 1351. Noble, alcalde mayor de Sevilla.
Fue el segundo hijo varón de Alfonso Pérez de Guzmán, I señor de Sanlúcar de Barrameda, y de María Alonso Coronel.
Según Barrantes Maldonado, Juan Alonso nació el día 24 de junio de 1285 en Ceuta, perteneciente entonces al emir benimerín Ibn Yusuf, al que su padre servía como mercenario. Hacia 1287 el pequeño Juan Alonso y su hermana Leonor se trasladaron con su madre a Sevilla, donde se encontraban los otros dos hijos de Alfonso Pérez de Guzmán, Isabel y Pedro Alfonso, y el resto de sus parientes. En 1291 se reunió con ellos el padre de familia, que había huido de Marruecos para integrarse en la Corte de Sancho IV de Castilla.
Juan Alonso se convirtió en principal heredero de su padre en 1294, tras ser degollado su hermano mayor, Pedro Alfonso, durante el sitio de Tarifa, en el célebre episodio que le valió el sobrenombre de Bueno a Alfonso Pérez, alcaide de aquella plaza.
En 1303 Juan casó con Beatriz Ponce de León, hija de Ferrán Pérez Ponce, adelantado de la frontera en el reinado de Sancho IV. De este matrimonio le nacieron Alonso (c. 1315), que moriría niño, y María, que fallecería también sin descendencia. Hacia 1336, ya viudo, Juan Alonso contrajo matrimonio con Urraca Osorio de Lara, que le dio como hijos a Alonso Pérez, III señor de Sanlúcar, muerto en el cerco de Orihuela en lucha contra los aragoneses (1365), y a Juan Alonso, que sucedió al anterior al frente de los señoríos de los Guzmán.
En 1309 estuvo Juan Alonso presente en el asedio y conquista de Algeciras junto a su padre y el resto de fuerzas castellanas. Ese mismo año, entre agosto y octubre, sucumbía Alfonso Pérez de Guzmán en el curso de otra expedición militar en la frontera contra los granadinos, en la sierra de Gaucín. Juan Alonso se hizo cargo entonces de los numerosos estados de su padre, entre los que destacaban los señoríos que poseía en Andalucía occidental: en la actual provincia de Cádiz, Sanlúcar de Barrameda, Chiclana, Barbate, Trebujena, Medina-Sidonia, Vejer de La Frontera y las almadrabas de Conil de La Frontera y Zahara de los Atunes; La Algaba en la de Sevilla; y Lepe y Ayamonte en la actual provincia de Huelva, casi lindando con Portugal.
Ya como señor titular de Sanlúcar, siguió la belicosa senda de su padre prestando sus servicios al rey castellano en el cerco de Algeciras (1309) y en el de Alcaudete (1312). Al morir Fernando IV y desatarse las luchas por la tutoría del sucesor, el niño Alfonso XI, Juan Alonso siguió la parcialidad del infante don Pedro, hermano de Fernando IV, frente al infante don Juan, hijo de Alfonso X y responsable de la ejecución de Pedro Alfonso de Guzmán ante los muros de Tarifa.
El señor de Sanlúcar acompañó también al infante don Pedro en las campañas que éste dirigió en la frontera de los reinos de Jaén y de Córdoba contra los granadinos entre 1315 y 1319 (conquistas de Rute, Cambil, Alhavar y Bélmez, así como razias contra la capital nazarí). En 1319 tomó parte en la desastrosa expedición en la vega de Granada en la que fueron derrotados y muertos los dos tutores del rey, los infantes don Juan y don Pedro. Ante la ausencia de una dirección política clara, las ciudades castellanas se unieron en distintas “hermandades”, ligas establecidas para gobernar una tierra que se hallaba, de facto, sin monarca. Las ciudades andaluzas más importantes firmaron un pacto el 26 de agosto de 1319, aceptando en su “hermandad” a destacados nobles de “La Frontera” (Andalucía), entre los que se contaba Juan Alonso de Guzmán. Entre otras medidas, se estableció que ningún concejo de la hermandad apoyaría a personaje alguno para ser tutor del Rey a no ser con el acuerdo de todos los miembros de la misma. Sin embargo, el convenio fue incumplido por Córdoba a finales de 1320, al elegir sus autoridades a don Juan Manuel, señor de Villena, como tutor. Ante la nueva situación Juan Alonso de Guzmán inclinó Sevilla, donde ejercía un gran ascendiente, y a los linajes aliados a él (como sus familiares, los Ponce de León, señores de Marchena), a la facción del infante don Felipe en 1320-1321.
Durante esta segunda tutoría (1320-1325) el señor de Sanlúcar, como todos los nobles de su tiempo, subordinó los intereses del jefe de facción y los del reino a los suyos propios. Así, hacia 1324, cuando acompañó al infante don Felipe a Zamora para arremeter contra los ejércitos de los otros tutores (Juan Manuel y Juan de Haro), Juan Alonso de Guzmán y otros nobles se negaron a trabar combate con los enemigos.
Ese mismo año de 1324 sería terrible para los Guzmanes, pues falleció el hijo mayor y heredero de Juan Alonso. A ello se añadió que la familia fue expulsada de Sevilla, junto a sus parientes los Ponce de León, por el almirante Alfonso Jufré Tenorio.
En 1325 Alfonso XI alcanzó la mayoría de edad legal, y Guzmán, que apoyó desde el primer momento la intención del Monarca de imponerse a sus extutores, pudo regresar a Sevilla, donde desempeñaría el oficio de alcalde mayor. La posición en la corte de Juan Alonso se fortaleció gracias a su parentesco con la amante del rey, Leonor Núñez de Guzmán, que era su prima hermana.
Durante el reinado de Alfonso XI volvió a destacar el señor de Sanlúcar, junto al resto de nobles andaluces, en las campañas que se emprendieron contra los musulmanes: conquista de Teba (1330); fallido socorro de Gibraltar, asediada y tomada por los benimerines (1333); enfrentamientos con Abomelique, hijo del sultán marroquí (1339); y, sobre todo, la participación en la decisiva victoria del río Salado contra los benimerines y los granadinos (1340), así como en la conquista de Algeciras (1344) y en el fracasado cerco de Gibraltar (1350). No sólo luchó contra los islamitas, sino también contra los portugueses durante la guerra de 1336, venciéndolos (junto a Pedro Ponce, Enrique Enríquez y los concejos de Sevilla y Jaén) en Villanueva de Barcarrota, y haciéndose cargo de la defensa de la frontera del Guadiana, donde contaba con importantes señoríos.
Cuando accedió al trono Pedro I en 1350, el nuevo Monarca encomendó a Juan Alonso de Guzmán la defensa de Jerez de la Frontera y su comarca frente a los musulmanes. En esta ciudad, en 1351, le llegaría la muerte por enfermedad al II señor de Sanlúcar, que sería sepultado en el monasterio de San Isidoro de Sevilla, donde también habían sido enterrados sus padres.
Bibl.: C. Rosell y López (ed.), Crónicas de los reyes de Castilla. Desde don Alfonso el Sabio hasta los Católicos don Fernando y Doña Isabel, Madrid, Ediciones Atlas, 1953, 3 vols.; M. Á. Ladero Quesada y M. González Jiménez, “La población en la frontera de Gibraltar y el repartimiento de Vejer (siglos xiii y xiv)”, en Historia. Instituciones. Documentos, 4 (1977), págs. 199-316; P. de Barcelos, Livro de Linhagens, ed. de J. Mattoso, vols. I y II, Lisboa, Publicações do II Centenario da Academia das Ciéncias, 1980; M. González Jiménez, “Guzmán el Bueno y su tiempo”, en Les Espagnes Médiévales. Aspects économiques et sociaux. Mélanges offerts à Jean Gautier Dalché, Niza, 1983, págs. 237-246; P. Barrantes Maldonado, Ilustraciones de la Casa de Niebla, ed. de P. de Gayangos, Cádiz, Universidad, 1998; B. Vázquez Campos, Los adelantados mayores de La Frontera o Andalucía (siglos xiii-xiv), Sevilla, Diputación Provincial, 2006.
Braulio Vázquez Campos