Nació en la aldea de Naraval, en el concejo de Tineo, en el seno de una familia que ocupaba una casona blasonada y que tenía aforadas tierras, dedicándose a la ganadería y a la agricultura. Asistió a sus primeras clases en la iglesia del pueblo y recibió enseñanzas de Humanidades y de Latín del párroco Benito Martínez Villamil, lo que le animó a continuar estudios. Viajó a Madrid en dos ocasiones, pero la falta de dinero frustró el intento de matricularse en la Universidad y, finalmente, consiguió trabajo en el comercio de la ciudad. La Guerra de la Independencia le sorprendió en Madrid, participando en la defensa del Parque de Artillería de Montelón (2 de mayo de 1808).

Ingresó en el Ejército y continuó la campaña contra los franceses hasta el término de la guerra. Le fueron confiscados sus bienes por los franceses y se dedicó a la carrera administrativa al ser nombrado por la Junta Suprema Gubernativa director general de Provisiones del Ejército (1809). Fue más tarde nombrado vista mayor de la Aduana de Madrid (1812), tras la marcha de los invasores franceses de la capital de España. [...]