Acevedo y Zúñiga, Alonso de. Conde de Monterrey (III). ?, 1496 – Santiago de Compostela, 1559. Noble, adelantado mayor de Cazorla, cazador mayor del emperador Carlos V.
Hijo de Diego de Acevedo y de Francisca de Zúñiga y Ulloa, II condesa de Monterrey. Homónimo de su abuelo el arzobispo de Santiago de Compostela, Alonso de Fonseca II, la reina Juana la Loca, y en su nombre su padre, el rey Fernando el Católico, le concedieron la sucesión del condado de Monterrey en 1513. Igualmente, junto con Monterrey, heredó los estados de Biedma, Ulloa, de la Casa de Ribera, y el título de pertiguero mayor de Santiago.
La sucesión, sin embargo, no fue fácil ya que hubo de pleitear con su madre, y posteriormente con su hermanastra, la condesa de Lemos Teresa de Andrade (casada con Fernando de Castro), pleito que enfrentará a las casas de Monterrey y Lemos hasta el primer decenio del siglo xvii.
Alonso estuvo casado con María Pimentel, hija del V conde duque de Benavente Alonso de Pimentel y de Inés de Mendoza y Zúñiga. Junto al emperador Carlos V se encontró en el rechazo de los turcos de Solimán que atacaban Viena en 1529. Al igual que su madre y su abuelo, Alonso hubo de defender su patrimonio de las apetencias de otros nobles gallegos. Así, en 1537, sabemos que sostuvo un pleito con Fernando de Andrade, II conde de Villalba, por el mayorazgo de la Casa de Ulloa. Igualmente hubo de pleitear con el conde de Lemos por la abadía de la Trinidad de Orense.
La influencia del III conde de Monterrey no se reduce a sus posesiones orensanas, sino que se extiende por tierras zamoranas y salmantinas. Ya en 1514, recién confirmada su sucesión por voluntad regia, comisionaba a su primo Lorenzo de Paz, regidor del concejo helmántico para que en su nombre tomara posesión de los bienes del mayorazgo de Monterrey en Salamanca. Su recuerdo ha quedado en la ciudad del Tormes en el palacio de Monterrey, obra plateresca que figura entre los más destacados conjuntos palaciegos del renacimiento salmantino mandado construir por el tercer titular de la dignidad condal en 1539.
Muy aficionado a la caza, Alonso acrecentó las tierras recibidas de sus progenitores. Así, se sabe que a finales del reinado del Emperador, en 1555 compró a Juana de Austria, infanta de España y princesa de Portugal, el coto de la Granja, propiedad del monasterio de Montederramo, de la Orden de San Bernardo.
Destacó igualmente por ser un mecenas de las letras y permitió a los religiosos de la Compañía de Jesús establecerse en Monterrey (Orense), donde comenzaron a impartir clases en 1556. Fallecido en Santiago de Compostela en 1559, le sucedió su hijo Jerónimo de Acevedo y Zúñiga.
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9/857; M-63, fols. 55-56, sign. 9/869; M-124, hoja 34-35, sign. 9/930; M-140, hojas 197-200, sign. 9/946.
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Francisco Glicerio Conde Mora
