García Dorado Montero, Pedro. Navacarros (Salamanca), 19.V.1861 – Salamanca, 26.II.1919. Penalista.
Hijo de una humilde familia de labriegos, sufrió un accidente en su infancia que le produjo un grave deterioro físico, al perder prácticamente la mano derecha, pero le liberó de ser siervo de la tierra. Su inteligencia, descubierta por quienes se ocuparon de su educación, le permitió realizar estudios, siempre con becas: los universitarios en Salamanca, donde cursó las carreras de Derecho y Filosofía y Letras, licenciándose, respectivamente, en 1882 y 1883. Sus brillantes calificaciones le permitieron prolongar el apoyo económico para realizar los cursos del Doctorado en Madrid, en el Colegio Mayor de San Bartolomé, y posteriormente completar su preparación jurídica en el Real Colegio de España o de San Clemente de los Españoles en Bolonia.
La estancia, primero en Madrid, donde entró en relación con Giner de los Ríos, y los años vividos en Bolonia, que le permitieron conocer los criterios doctrinales de la “escuela positiva” lombrosiana, fueron etapas de indudable significación en su vida.
De regreso a Salamanca se vinculó al grupo docente de la Facultad de Derecho, obteniendo la cátedra de Derecho Político y Administrativo en la Universidad de Granada. Un intercambio con el profesor Jerónimo Vida permitió a Dorado Montero ocupar la cátedra de Derecho Penal del Estudio salamantino en el curso 1892-1893, iniciando una actividad docente que se prolongó hasta su muerte. Dorado Montero ejerció la labor académica con abnegación y rigor, defendiendo criterios ideológicos que pronto encontraron la oposición de algunos alumnos y compañeros del claustro, así como de un sector de la ciudad encabezado por el influyente obispo padre Cámara, lo que le llevó a protagonizar las consecuencias de la polémica sobre los derechos de la libertad de cátedra, siendo apartado de la docencia el año 1897, y recuperando el puesto docente al iniciarse el curso 1897-1898.
Su dominio de idiomas permitió a Dorado Montero cimentar su preparación como penalista en un exhaustivo conocimiento de las, en aquella fecha, más actuales doctrinas del Derecho Penal, siendo evidente el influjo italiano y alemán. Lo que se denominó “penología doradiana” la expuso en una sostenida labor en revistas jurídicas y publicaciones con amplia resonancia cultural, como La España Moderna y La Lectura, y en obras con las que creó una corriente de opinión continuada por los penalistas Luis Jiménez de Asúa y José Antón Oneca.
Parte importante de la obra de Dorado Montero es fruto de la influencia que en él ejerció el ideario de la Institución Libre de Enseñanza. El epistolario que se conserva en la Universidad de Salamanca permite conocer la relación que mantuvo con Giner de los Ríos e institucionistas tan destacados como Azcárate y Altamira. Intercambió ideas de cambios políticos con Joaquín Costa y queda probado su encuentro con el criminalista Rafael Salillas y los psiquiatras Giné y Partagás y Esquerdo.
Obras de ~: La antropología criminal en Italia, Madrid, Imprenta Revista Legislación, 1889 (reed. Madrid, 1890); Doña Concepción Arenal, Madrid, La España Moderna, s. f., [otra ed. en 1892], Problemas jurídicos contemporáneos, Madrid, 1893; Estudio crítico sobre la doctrina de Garofalo y de la nueva escuela penal italiana, Madrid, 1893; El positivismo en la ciencia jurídica y social italiana, Madrid, Imprenta Revista Legislación, 1894; Problemas de Derecho Penal, Madrid, Reus, 1895; El reformatorio de Elmira, Madrid, Idamor Moreno, ¿1898?; Estudios de derecho penal preventivo, Madrid, Suárez, 1901; El derecho penal en Iberia (Contribución al estudio de la historia primitiva de España), Madrid, J. M. Sardá, 1901; Asilos para bebedores, Madrid, Imprenta de los Hijos de M. G. Hernández, 1901; Del problema obrero, Salamanca, Imprenta y Librería de F. Núñez, 1901; Bases para un nuevo Derecho Penal, Barcelona, Manuales Soler, 1902; Valor Social de Leyes y Autoridades, Barcelona, Manuales Soler, 1903; Nuevos derroteros penales, Barcelona, Imprenta Henrich y Cía., 1905 (Biblioteca Sociológica internacional); Los peritos médicos y la justicia criminal, Madrid, Hijos de Reus, 1905; De Criminología y Penología, Madrid, Serra, 1906; La Psicología criminal, Madrid, Reus, 1910; El Derecho y sus sacerdotes, Madrid, Reus, 1911; El derecho protector de los criminales: nueva edición muy aumentada y rehecha de los Estudios de derecho penal preventivo, Madrid, Librería General de Victoriano Suárez, 1915; La Naturaleza y la Historia Metafísica y Psicología (obra póstuma), Madrid, Cuadernos de Ciencia y Lectura, La Lectura, 1926; Naturaleza y función del derecho (obra póstuma), Madrid, Reus, 1927.
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Gerardo Sánchez-Granjel Santander