Padierna de Villapadierna y Muñiz, Felipe. Conde de Villapadierna (I). Villanueva del Campo (Zamora), 23.VIII.1832 – Madrid, 1.III.1895. Abogado, propietario y político.
Estuvo casado con Manuela de Erice y Urquijo, sobrina del marqués de Urquijo, con la que tuvo varios hijos: Manuela, marquesa de Villapadierna (título pontificio), Jesús y Felipe. Fueron sus padres Gabriel Padierna de Villapadierna y Martínez y Petra Muñiz y Aláiz (naturales de San Miguel del Valle y de Castrogonzalo respectivamente, y vecinos de Villanueva del Campo), regidores perpetuos del estado noble de Palencia, Villamañán y Salamanca. Ambos procedían de antiguas familias aristocráticas de Asturias y de Castilla la Vieja. Sus abuelos paternos fueron Narciso Padierna (de San Miguel del Valle) y Jerónima Martínez; y maternos, Vicente Muñiz (de Salamanca) y Manuela Alaiz (de Castrogonzalo). Otro hermano suyo, León, fue también diputado a Cortes. Su mujer, muy piadosa, construyó a sus expensas un hospital e iglesia en Herrera del Duque (Badajoz). Muy acaudalada, cedió terrenos para la realización del Canal del Este, en Madrid.
Era propietario, en el mencionado pueblo de Badajoz, de la extensa dehesa de Cijara (10.293 hectáreas), que compró a Mariano Téllez Girón, duque de Osuna en 1873, por 838.888 pesetas. Tenía fijada una cuota para el Tesoro en 1886-1887 de 8.895,78 pesetas. Su familia era también propietaria del Monte de la Reina, en Toro, de 3.896 hectáreas.
Era abogado, habiendo cursado Derecho en las Universidades de Valladolid y Madrid (grado de licenciado, 20 de junio de 1856). Tenía el título de doctor en Derecho y de licenciado en Administración civil. En 1858 fue nombrado promotor fiscal en Villalpando, aunque renunció pronto al cargo para abril, bufete en Madrid. Tenía la categoría de jefe superior de Administración civil.
Primer conde de Villapadierna (título pontificio), era también caballero de la Orden de Santiago, desde 1877, y estaba en posesión de la Gran Cruz de la Real Orden Americana de Isabel la Católica y de la de Beneficencia de 1.ª Clase (que le fue otorgada por haber salvado en 1883, junto con su hermano León, a dos guardias civiles acosados por una cuadrilla de bandoleros en los Montes de Toledo).
Tomó parte en la Revolución de 1868 y fue nombrado gobernador civil de Zamora. Renunció al sueldo en favor de los pobres de la provincia y fue el único gobernador que llevó a cabo la supresión de los conventos de monjas en el plazo previsto por la ley. Además, según cuentan admirativamente sus biógrafos, los seis diputados adictos elegidos por la provincia en enero de 1869 fueron los más votados en España desde la existencia de gobiernos representativos. Todavía en el Sexenio fue elegido diputado por Alcañices, por el Partido Constitucional de Sagasta, en la elección segunda de 1872. Ya en la Restauración, fue uno de los artífices de la consolidación del Partido Liberal en Zamora, siendo de nuevo elegido por Alcañices en 1881. En la legislatura de 1886 representó a la provincia de Zamora en el Senado, pasando a vitalicio tres años después.
Mostró predilección en el Parlamento por las cuestiones económicas, siendo presidente de los llamados “de la sección tercera”, partidarios de que se hicieran economías en el presupuesto de 1883-1884. Tomó parte en la discusión contra el impuesto de derechos reales y contra la creación de un cuerpo especial de liquidadores del mismo.
Fuentes y bibl.: Archivo del Senado, Exps. personales, HIS-0519-08; Archivo Histórico Provincial y Universitario de Valladolid, legs. 476 y 679-40.
M. Ovilio y Otero, Escenas contemporáneas, t. II-III, Madrid, 1883, págs. 223-227; M. Sánchez Ortiz y F. Berastegui, Las primeras Cámaras de la Regencia. Datos electorales, estadísticos y biográficos, Madrid, Enrique Rubiños, 1886, pág. 166; P. Carasa et al., “Historia local y prosopografía aplicadas al análisis de una estructura de poder. Diputados zamoranos a Cortes entre 1876-1910”, en Fuentes y métodos de la historia local: actas, Zamora, Instituto de Estudios Zamoranos Florián de Ocampo, 1991; S. Gómez Cabornero, Estrategias familiares y poder político. La familia Rodríguez en la Restauración zamorana, Zamora, Instituto de Estudios Zamoranos Florián de Ocampo, 1996.
María Concepción Marcos del Olmo
