Coronel y Paniagua, José Joaquín. José Joaquín Paniagua. Cartago (Costa Rica), 14.IV.1739 – c. 1798. Militar y amanuense.
Esclavo, hijo de Bernarda Escalante, esclava negra de Baltasara Escalante y Paniagua, quien era miembro de una familia criolla de gran relevancia socioeconómica en la provincia de Costa Rica. Fue liberado después de la muerte de su ama. Se ignora quién fue su padre, pero es posible que haya sido un español criollo.
En su partida bautismal (1739) se añadió, años después, al margen: “este se firmaba Coronel, no siéndolo”.
Aunque para la época la única familia con este apellido era la González Coronel, se desconoce si tenía algún parentesco con ella; a ésta perteneció el presbítero Manuel González Coronel (1692-1760), quien desempeñó el cargo de comisario del Santo Oficio de la Inquisición, entre otros.
Recibió una educación que le permitió leer y escribir mejor que muchos españoles educados. Ejerció el oficio de amanuense en una provincia a menudo carente de escribanos titulados, gracias a lo cual obtuvo ingresos económicos suficientes y mantuvo un trato constante con miembros de la elite, algunos de ellos sus amigos cercanos, pero otros enemigos acérrimos.
Asimismo, ingresó a las milicias pardas de la provincia, prácticamente el único medio de ascenso social para los de su clase, donde destacó por su excelente desempeño e inteligencia. En ellas llegó a ocupar el cargo de capitán de la tercera compañía y, finalmente, el de comandante general del cuerpo de pardos de toda la provincia, cuyas siete compañías comprendían la mitad (609) de las tropas comandadas por pardos en el reino de Guatemala (1.320).
Integró diversas empresas militares, entre ellas las expediciones contra los zambos mosquitos en la costa caribeña (1780 y 1782), durante la guerra contra Inglaterra, y la vigilancia y defensa de Matina, otrora rica y próspera zona productora de cacao.
Sobre todo, destacó su participación en la defensa del fuero militar de los pardos y de sus familias frente a las autoridades españolas (1785), en cuyos escritos sobresale su palabra directa e incisiva, con la que enfrentó incluso a Juan de Flores (1744-1794), gobernador de Costa Rica (1781-1785), quien pretendía someter a los pardos al control de oficiales españoles y así dominarlos civil y judicialmente.
La Real Audiencia de Guatemala confirmó el fuero militar de los pardos de Costa Rica el mismo año y las autoridades militares y políticas españolas de esa provincia lo reconocieron hasta su derogatoria (1799).
Coronel enfrentó una demanda ante el Juzgado Eclesiástico en 1772, cuando se le acusa de mujeriego, seductor de mujeres solteras y casadas, hechos por los que nunca había sido procesado, pues era hombre de confianza y amanuense de José Joaquín de Nava (? 1784), gobernador de Costa Rica (1764-1773).
Sin embargo, contrajo matrimonio en la ciudad de Cartago ese mismo año con María Antonia Álvarez, española criolla. Fueron progenitores de dos hijas, Ana y Rita, pero ninguna dejó descendencia.
Coronel fue tío abuelo de Vicente Aguilar Cubero (1803-1861), vicepresidente (1856), y tío bisabuelo del licenciado Francisco Aguilar Barquero (1857- 1924), presidente de la República (1919-1920).
Bibl.: M. Meléndez Obando, “Las familias”, en Negros y blancos, todo mezclado, San José, Editorial de la Universidad de Costa Rica, 1997, págs. 80-149; U. Grub, Diccionario genealógico. La Colonia, t. I, Alemania, 2000 (inéd.); A. Arguedas Zamora, “Las milicias pardas y el Cabildo de Cartago, 1662-1812: La lucha por sus derechos”, ponencia para la Conmemoración de los 200 años de la Independencia de Haití, Limón (Costa Rica), 2004 (inéd.); M. Meléndez Obando, “Los Escalante”, en Presencia africana en familias costarricenses, 2005 (inéd.).
Mauricio Meléndez Obando