Sagarmínaga Epalza, Fidel de. Bilbao (Vizcaya), 27.IX.1830 – 20.III.1894. Empresario, historiador, periodista y político.
Hijo de Pedro Sagarmínaga Gandasegui (nacido en 1798) y de Martina Epalza Lecanda (1818-1903). Casó con María de los Ángeles Padilla, con quien tuvo un hijo, Pablo (1865-1892).
Su actividad fundamental hasta 1868 fue la administración pública en gobiernos moderados y de la Unión Liberal. Fue oficial segundo del Consejo Provincial de Vizcaya (1848-1850), gobernador civil de Cuenca (1857-1858) y oficial de 2.ª de la Secretaría del Ministerio de Gobernación. Entre 1858 y 1863 fue diputado, por la Unión Liberal, por Vinaroz (Castellón). En 1863 fue ascendido a oficial de 1.ª del Ministerio de la Gobernación, cargo del que dimitió al año siguiente alegando motivos de salud.
Tras la Revolución de 1868 regresó a Bilbao, de donde fue alcalde entre febrero y mayo de 1872. En octubre de 1876 fue nombrado Padre de Provincia por las Juntas Generales y diputado general por el bando oñacino, por lo que participó activamente en las fallidas gestiones para el cumplimiento de la Ley de 21 de julio de 1876.
Volvió a las Cortes como diputado por Durango, entre 1879 y 1881 y fue uno de los líderes, sin duda el más conocido, de la intransigencia foral. Fundó la Sociedad Euskal-Erria e impulsó la Unión Vasco-Navarra, al igual que un periódico del mismo nombre, desde donde expresó sus ideas en pos de conseguir la reintegración foral.
Tras su agitada actividad política, formó parte del consejo de administración de Santa Ana de Bolueta desde 1880 hasta su muerte en 1894.
Fue académico correspondiente de la Real Academia de la Historia y cronista honorario de Vizcaya (1893). De su obra como historiador y jurista, destacan las Memorias históricas de Vizcaya, y su fundamental obra El Gobierno y el Régimen foral del Señorío de Vizcaya desde el reinado de Felipe II hasta la mayor edad de Isabel II. Su importante biblioteca fue donada a la Diputación vizcaína, lo que constituyó el núcleo originario de la actual Biblioteca Foral de Bizkaia.
Además de su faceta como historiador también fue periodista. Comenzó su andadura periodística en La España Regional de Barcelona, fundando en 1856 en la capital madrileña el periódico unionista El Criterio, del que fue director hasta que dimitió a primeros de 1857. Tras el conflicto foral de 1876 fundó con otros, el periódico fuerista La Paz que se publicó en Madrid entre 1876 y 1878. El mismo año de la abolición foral creó el Partido Fuerista de Unión Vascongada, precedente de la sociedad "Euskal Erria". En 1880 apareció su órgano, el diario La Unión Vasco-Navarra.
Obras de ~: Publícola (seud.), La escuela liberal y sus impugnadores, Londres, 1852; Reflexiones sobre el sentido político de los Fueros de Vizcaya, Bilbao, 1871; Dos palabras sobre el carlismo vasco, Bilbao, Juan E. Delma, 1875; Memorias históricas de Vizcaya, Bilbao, Juan E. Delma, 1880; “La cuestión del puerto de la paz y la Zamacolada”, en Euskal-Erria: Revista Bascongada, t. 17 (2.º sem. de 1887), págs. 90-92; Memorias históricas de Vizcaya, Bilbao, Imp. Lit. y Lib. de Juan E. Delmas, 1880; El Gobierno y el Régimen foral del Señorío de Vizcaya desde el reinado de Felipe II hasta la mayor edad de Isabel II, Bilbao, 1892 (reed. Bilbao, Imprenta de la Excma. Diputación de Vizcaya, 1928-1976, 5 vols.).
Bibl.: J. Agirreazkuenaga (dir.), Diccionario biográfico de los diputados generales, burócratas y patricios de bizkaia. (1800-1876), Bilbao, Bizkaiko Batzar Nagusiak, 1995; E. J. Alonso Olea, C. Erro Gasca e I. Arana Perez, Santa Ana de Bolueta, 1841-1998. Renovación y supervivencia en la siderurgia vizcaína. Bilbao, Santa Ana de Bolueta. 1998; J. Agirreazkuenaga (dir.), Bilbao desde sus alcaldes: Diccionario biográfico de los alcaldes de Bilbao y gestión municipal, en tiempos de revolución liberal e industrial.1836-1901, Bilbao, Ayuntamiento de Bilbao, 2002.
Eduardo J. Alonso Olea
