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Pedro Gómez Gudiel

Biografía

Gómez Gudiel, Pedro. ?, p. s. xiv – V.1355 post. Obispo de Segovia.

Eclesiástico perteneciente a la destacada familia toledana de los Gudiel, que desde principios del siglo xiii mantuvo una estrecha vinculación con la Monarquía castellana. Diego de Colmenares indica, sin una base documental clara, que Pedro nació en Toledo del matrimonio formado por Fernando Díaz Gudiel y Urraca Barroso. Siendo precisamente arcediano de Toledo fue nombrado obispo de Segovia por el papa Clemente VI el 13 de febrero de 1352. No se conoce ninguna actuación de Pedro al frente de su diócesis, de la que sus actividades políticas le mantuvieron alejado de un modo definitivo al menos desde 1353. Ese año el rey Pedro I decidió apartar de su lado a la reina Blanca de Borbón, para lo cual dispuso su traslado desde Medina del Campo, donde se encontraba, a Arévalo. La custodia de doña Blanca fue encomendada por el Monarca al caballero toledano Tel González Palomeque y al obispo Pedro Gómez, personajes de la entera confianza del Rey a tenor de la delicada misión que recibieron.

En 1354 buena parte de la nobleza, abanderando la causa de doña Blanca, se alzó contra el Monarca. En el mes de mayo Pedro I decidió trasladar a la Reina desde Arévalo a Toledo, ciudad que consideraba más segura. Apenas llegada a Toledo la Reina, siguiendo el consejo del obispo de Segovia, se refugió en la catedral alegando el temor que tenía de ser asesinada o encerrada de nuevo; pocos días después logró el pleno apoyo de la ciudad a su causa. La inesperada actitud tomada por Pedro Gómez Gudiel, que maduró en realidad tras largos meses de estancia junto a doña Blanca, le colocó en abierta rebeldía contra el Rey y le obligó a vivir refugiado en Toledo, pero fue apoyada abiertamente por el papa Inocencio VI, de quien recibió un mensaje agradeciéndole la ayuda que había prestado a la Reina y animándole a que prosiguiese con la misma. En mayo de 1355 don Pedro recibió autorización del Papa para nombrar notarios a dos clérigos segovianos. Debió de fallecer poco después, pues su sucesor, el franciscano fray Gonzalo de Medinaceli, obtuvo su nombramiento el mes de noviembre de ese mismo año.

 

Bibl.: D. de Colmenares, Historia de la insigne ciudad de Segovia y compendio de las historias de Castilla, Segovia, Diego Díez, 1637 (nueva ed. anot., Segovia, Real Academia de Historia y Arte de San Quirce, 1969-1970), págs. 492 y ss.

 

Bonifacio Bartolomé Herrero