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Jimena Fernández de la Vega y Díaz de Lombán

Biografía

Fernández de la Vega y Díaz de Lombán, Jimena. Vegadeo, antes Vega de Ribadeo (Lugo), 1896 – Galicia, 1984. Médica, investigadora.

Nacida en Vega de Ribadeo en 1896 fue, junto con su hermana gemela, Elisa, la primera licenciada en Medicina por la Universidad de Santiago, licenciatura que obtuvieron con Premio Extraordinario en 1919.

En esos años iniciaron sus tareas de investigación en el laboratorio del catedrático de Patología Roberto Novoa Santos, a quien Jimena consideró su primer maestro, y publicaron un par de artículos sobre estudios fisiopatológicos del cerebelo en la revista Galicia Médica. En 1922 Jimena presentó su tesis doctoral sobre el estudio del sistema nervioso vegetativo infantil por medio del análisis hematológico, dirigida por el parasitólogo y hematólogo Gustavo Pittaluga.

Durante los años 1925 y 1926 estuvo pensionada por la Junta para Ampliación de Estudios (JAE) en Alemania y Austria. Durante seis meses aprendió Biometría en Berlín con los médicos Friedrich Kraus y Theodor Brugsh. Se trasladó luego a Hamburgo, por consejo de Edwin Baur, para estudiar Genética con el profesor Hermann Poll, destacado genetista y eugenista alemán partidario de la aplicación de los estudios genéticos a la biología humana con el que, durante un año, aprendió las técnicas convencionales de la genética mendeliana en Drosophila. Por último se trasladó a Viena, donde pasó otro medio año trabajando sobre problemas constitucionales con Julius Bauer, del que posteriormente tradujo al castellano una obra sobre herencia y constitución. De nuevo pensionada por la JAE, en el curso 1933-1934, volvió a actualizar sus conocimientos realizando estudios sobre herencia y constitución con Nicola Pende en el Instituto de Clínica Médica de Génova, y sobre la herencia de la forma de los glóbulos rojos con Eugen Fischer en Berlín.

A su vuelta a España en 1927 trabajó en el Laboratorio Central de Investigaciones Clínicas de la Facultad de Medicina de Madrid, dirigido por el hematólogo Gustavo Pittaluga, donde inició sus trabajos sobre la herencia de los grupos sanguíneos y patologías hematológicas.

Participó en las Primeras Jornadas Eugénicas Españolas, celebradas en 1933 en Madrid, donde impartió conferencias sobre la transmisión mendeliana de caracteres psicológicos, el estudio de gemelos para profundizar en la herencia de este tipo de caracteres, la aplicación de métodos estadísticos y la construcción de árboles genealógicos. Luchó por el establecimiento de un laboratorio de genética médica similar a otros que se crearon para distintas disciplinas científicas, con el fin de desarrollar en España los conocimientos adquiridos en el extranjero por los pensionados de la JAE. Por fin en 1933 se creó la Sección de Genética y Constitución, dependiente de la cátedra de Patología de Novoa Santos en la Facultad de Medicina de Madrid, siendo nombrada Jimena directora de la misma, puesto que revalidó mediante oposición en 1957 y que desempeñó hasta su jubilación en 1966. Desde la muerte de Novoa Santos, la Sección de Genética no contó sin embargo con el apoyo de las autoridades universitarias pasó a llamarse Seminario para estudios de Genética y Patología constitucional, y adquirió una orientación más teórica que experimental.

El escaso interés de los médicos españoles por la genética, la estructura de la universidad española y posiblemente también la condición femenina de su principal impulsora, pueden explicar el retraso español en el desarrollo de la genética humana. La propia investigadora se lamentó de “no haber podido iniciar el gran Instituto de genética que nuestro país debería tener”.

Escribió un par de libros sobre genética humana y más de una treintena de artículos sobre materias muy diversas, muchos de ellos en publicaciones de escasa repercusión internacional. Su libro La herencia fisiopatológica de la especie humana, basado en una serie de conferencias que impartió en la cátedra del doctor Marañón durante el curso 1934-1935, constituye el primer texto en español dedicado íntegramente a la genética médica. Años más tarde, en el libro Teoría de la herencia y herencia molecular, sistematizó los conocimientos básicos y los avances de la genética producidos como consecuencia del enfoque molecular. El libro fue publicado precisamente el año en que recibieron el premio Nobel los científicos que descifraron la estructura molecular del material genético.

Jimena Fernández de la Vega no sólo fue pionera de la genética humana en España; recibió entre otros reconocimientos la Cruz de Alfonso XII otorgada en 1922 por sus méritos académicos, ganó la oposición a inspector de trabajo en 1932 y la de médico hidrólogo en 1945, materia sobre la que también realizó diversas publicaciones. Llevó a cabo otras iniciativas, como mujer emprendedora que fue; entre ellas la creación de un salto hidrológico que, todavía hoy, suministra energía eléctrica a un pequeño pueblo de la provincia de Ávila.

 

Obras de ~: con E. Fernández de la Vega, “Somero estudio fisiopatológico del cerebelo”, en Galicia Médica, 5 (1916); “Estado actual de nuestros conocimientos acerca de la biología y patología gemelar en sus relaciones con los problemas de la herencia”, en Progresos de la Ciencia, 192 (1927), págs. 873- 844; “Experimentos de genética en Drosofila efectuados en el Instituto Anatómico de Hamburgo”, en Boletín de la Sociedad Española de Historia Natural, 28 (1928), págs. 237-242; “La serología constitucional y la investigación de los grupos sanguíneos”, “Consideraciones etiológicas y patogénicas sobre un caso de hemofilia” y “Contribución a la solución del problema de la herencia de los grupos sanguíneos”, en Archivos de Cardiología y Hematología, 9 (1928), págs. 295-393; 10 (1929), págs. 185-190, y 11 (1930) y págs. 299-300; “La herencia biológica en el hombre. I. Herencia de los caracteres psicológicos. II. Selección y contraselección”, en E. Noguera y L. Huerta (dirs.), Genética, Eugenesia y Pedagogía Sexual, Madrid, Javier Morata, 1934, págs. 159-181; La herencia fisiopatológica en la especie humana, Madrid, Espasa Calpe, 1935; Teoría de la herencia y herencia molecular, Madrid, Paz Montalvo, 1963.

 

Fuentes y bibl.: Archivo de la Junta para Ampliación de Estudios (Residencia de Estudiantes, Madrid), Expediente de Jimena Fernández de la Vega.

J. García Martínez, Aportaciones a la historia de la genética española (1920-1936), tesina, Madrid, Universidad Complutense, 1984, págs. 65-72 (inéd.); R. Álvarez Peláez, “Origen y desarrollo de la eugenesia en España”, en J. M. Sánchez Ron, Ciencia y sociedad en España. De la Ilustración a la guerra civil, Madrid, El Arquero-Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1988, págs. 178-204; S. Pinar, “The Emergence of Modern Genetics in Spain and the Effects of the Spanish Civil War (1936-1939) on Its Development”, en Journal of the History of Biology, 35 (2002), págs. 124-126; “La genética española en la primera mitad del siglo xx”, en M. Candela Castillo, Los orígenes de la genética en España, Madrid, Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, 2003, págs. 30-39.

 

Milagros Candela Castillo