Hijo de un médico de Quesada, pueblo serrano jiennense, desde muy joven estuvieron marcadas sus aficiones artísticas por la influencia de su paisano el pintor Rafael Zabaleta. También fue muy temprana su inclinación a la poesía, en la que tuvo mucho que ver el poeta cordobés, afincado en Jaén, Rafael Porlán. A la hora de cursar una carrera superior, optó por la de Derecho, que hizo por libre desde su pueblo y que concluyó en 1940. No obstante, eran frecuentes sus viajes a Madrid, donde estableció contacto con grupos literarios y tertulias frecuentados por primeras figuras de las letras, como Cela o García Nieto.

En 1942 fue nombrado juez de Primera Instancia de Villacarrillo (Jaén), si bien a las pocas semanas fue destinado a Larache (Marruecos), lo que le permitió conocer de cerca el derecho islámico, al que dedicó algunos estudios. Cuatro años después se trasladó a Barcelona, donde se forjó su personalidad intelectual, tanto en el plano profesional como en el artístico-literario. En 1983 recibió el nombramiento de presidente de la Audiencia Territorial de Barcelona y dos años después, el de vocal del Consejo General del Poder Judicial. Incluso en 1986 salió elegido senador por Barcelona como candidato independiente dentro de las listas del Partido Socialista Obrero Español de Cataluña. Ostentó el cargo de magistrado del Tribunal Supremo y fue condecorado con la Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort. [...]