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Jerónimo de Cabrera

Biografía

Cabrera, Jerónimo de. Madrid, c. 1580 – 1.XI.1618. Pintor.

Las primeras noticias en torno a la figura y obra de este pintor fueron publicadas por el erudito Ceán Bermúdez, quien señaló la posibilidad de que Cabrera fuera discípulo de Gaspar Becerra. Estos datos han sido rectificados por Magdalena Lapuerta Montoya en su tesis doctoral, en la que ha confirmado con nuevos documentos que el artista nació en torno al año 1580 y que comenzó a trabajar como aprendiz con trece años en el taller de Juan de Cimbranos, un pintor de segunda fila.

A principios del siglo XVII intervino en la restauración de los frescos del claustro principal del monasterio de San Lorenzo de El Escorial, un conjunto en el que habían trabajado en la década de 1580 artistas como Federico Zuccari, Bernardino dell’Acqua, su discípulo, y dos oficiales, Juan Núñez y Juan Martínez.

En el mes de diciembre de 1613 escribió un breve memorial en el que se comprometió a pintar en el plazo de un año la bóveda de la antecámara de la Reina en el palacio de El Pardo. Una obra encargada con posterioridad a la decoración principal del conjunto palaciego en la que habían participado desde el año 1607 artistas como Bartolomé Carducho o Juan Pantoja de la Cruz.

El encargo de este conjunto decorativo a Jerónimo de Cabrera molestó a los pintores reales, entre ellos Fabricio Castelo, Eugenio Cajés y Vicente Carducho, quienes redactaron un escrito dirigido a Felipe III en el que se lamentaron de la elección de un pintor que no pertenecía al círculo de la corte y que, probablemente, había aceptado la obra debido a su bajo salario y a la posibilidad de abrirse camino en este ámbito tan exclusivo. Ellos mismos se ofrecieron a pintar este espacio al mismo precio que se había estipulado con Cabrera, con el único objetivo de evidenciar su desinterés en esta empresa frente a las maquiavélicas ambiciones que, a su juicio, habían movido a aceptar la obra al pintor. Estas discrepancias entre profesionales no interrumpieron el inicio de la intervención de Jerónimo, el cual realizó otros trabajos mientras esperaba el inicio de las obras en El Pardo. De este modo, intervino en la decoración del monasterio de los capuchinos de Nuestra Señora de los Ángeles, aunque se desconoce el alcance de su obra en este lugar. Desde 1613 hasta su muerte, en el año 1618, se dedicó a finalizar la decoración de la antecámara de la Reina. En este lugar representó nueve episodios de la vida de Esther, una de las mujeres más importantes del Antiguo Testamento junto a un complejo programa astrológico.

Jerónimo de Cabrera abandonó este trabajo en el palacio de El Pardo en el mes de octubre de 1618, gravemente enfermo, y falleció al mes siguiente. Su viuda, Catalina de Ávila, se ocupó de tramitar toda la documentación necesaria para cobrar el salario de los últimos meses de trabajo de su marido, quien, como otros artistas, sufrió constantes retrasos en los pagos.

El pintor no logró, a pesar de su deseo, obtener la plaza de pintor del rey, pero sí alcanzó una cierta consideración en su profesión. El escritor Cristóbal Suárez de Figueroa se hizo eco de su profesionalidad en la edición en castellano de la Plaza universal de todas las ciencias y artes, la versión española de una obra publicada en Italia por Tommaso Garzoni di Bagnacavallo en el año 1585. Francisco Pacheco, en cambio, no le mencionó en su Arte de la pintura, pero sí que lo hizo Vicente Carducho en sus Diálogos de la pintura, quien señaló que había participado junto con Teodosio Mingot, en la decoración de la torre de El Pardo.

 

Obras de ~: decoración del Monasterio de los Capuchinos de Nuestra Señora de los Ángeles, El Pardo (Madrid); decoración de la antecámara de la Reina, Palacio de El Pardo (Madrid), 1613-1618.

 

Bibl.: C. Suárez de Figueroa, Plaza universal de todas las ciencias y artes, Madrid, 1615 (reed. Valladolid, Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, 2006); V. Carducho, Diálogos de la pintura: Su defensa, origen, esencia, definición, modos y diferencias, Madrid, ed. F. Martínez, 1633 [reed. F. Calvo Serraller (ed.), Madrid, Turner, 1979]; T. de Antonio Sáenz, “Jerónimo de Cabrera, un pintor del siglo XVII”, en Boletín del Seminario de Estudios de Arte y Arqueología, vol. LII (1986), págs. 453 y ss.; M. Lapuerta Montoya, “Jerónimo de Cabrera y la sala de la Reina Esther en el Palacio de El Pardo”, en Reales Sitios, n.º 133 (1997), págs. 26- 34; Los pintores de Felipe III en El Pardo, Madrid, Fundación Caja Madrid, 2002, págs. 143-180.

 

Macarena Moralejo Ortega