Ruiz Aguilera, Ventura. Salamanca, 2.XI.1820 – Madrid, 1.VII.1881. Poeta y periodista.
Hasta cumplidos los veinte años, Ventura Ruiz permaneció en su ciudad natal, en cuya universidad realizó estudios de Medicina, para ejercer como médico rural, en 1842, en la vecina población cacereña de Galisteo. Al año siguiente, se encontraba ya en Madrid afiliado al Partido Progresista y colaborando en la prensa más anticarlista de la época con unos artículos verdaderamente encendidos que le acarrearon la sanción de destierro a Castellón de la Plana en 1848. Tal circunstancia la aprovechó bien, pues le dio tiempo y ganas para escribir una crónica histórica de lo ocurrido ese “año revolucionario” en Europa y la novela Un conspirador de a folio. Cuando pasó a la ciudad de Alicante volvió a unir su ideología combativa y liberal con la prensa, fundando un efímero periódico con el título de Las hijas de Eva. En 1851, ya de nuevo en Madrid, tuvo la ocasión de dirigir otro periódico fundado para servir de altavoz a la política de reformas conservadoras de Bravo Murillo, El Orden, publicación que dejó de existir en 1852, cuando Isabel II cesó al presidente Bravo. A poco, Ruiz entró en contacto con Calvo Asensio, creador de La Iberia —nuevo órgano del liberalismo—, en donde trabajó como destacado redactor. Desde el cuadro de redacción de tan influyente diario y luego de La América, Ruiz Aguilera alcanzó varios cargos como funcionario y, entre 1868 y 1872, dirigió el Museo Arqueológico Nacional. Fue siempre un republicano convencido y coherente con sus ideas, lo que no le impidió tener buenas amistades con figuras destacadas de contrario pensamiento político, como Cánovas del Castillo, durante su participación en la revista Crónica de Ambos Mundos. Además de las cabeceras citadas, Ruiz Aguilera colaboró de vez en cuando en otras muchas como Nuevo Espectador, La Prensa, El Museo Universal, Las Novedades, etc.
Aguilera fue autor de diversos poemarios: Elegías (especialmente las dedicadas a la muerte de su hija), Armonías, Inspiraciones, Cantares, Églogas e idilios, La leyenda de Nochebuena, Veladas poéticas. El libro de las sátiras y, sobre todo, sus muy bien acogidos Ecos Nacionales, variopinta colección de poemas, reunida en tres series fechadas en 1849 —en pleno destierro alicantino— 1854 y 1868, respectivamente. Se trata de una amplia serie de composiciones que fusionan la moda de la balada romántica europea con la tradición romancera hispana, recargando el tono comprometido y social. En el prólogo a la primera serie, declaraba Aguilera que “la tarea de los poetas modernos no debe ser otra que estudiar el espíritu del siglo; conocer la sociedad en que viven; investigar qué vicios la corroen y qué virtudes la honran”. Por ello, trata de asuntos de su tiempo y de sus progresos técnicos (“La locomotora”) y sentires patrióticos (“La bandera”).
Pero también cultivó otros géneros, como la novela (de corte sentimental y con cierto propósito docente: la ya citada Un conspirador de a folio, El beso de Judas y El mundo al revés, las tres fechadas entre 1848 y 1865), o el teatro, sobre todo en su juventud, y dos conjuntos de narraciones en prosa conocidos como Proverbios ejemplares (1864) y Proverbios cómicos (1870), que se han considerado como aportaciones fundamentales para la constitución de la narrativa realista inmediatamente posterior. Y sus Cantares tuvieron una gran difusión y una probable influencia sobre la poesía de Rosalía de Castro al tiempo que abrían un camino hacia Bécquer.
Obras de ~: Bernardo de Saldaña. Drama histórico tradicional en tres actos y en verso, Madrid, Cordón, 1848; Un conspirador de a folio: novela burlesca, Valencia, Imprenta José Mateu, 1848; Poesías, Alicante, Imprenta de P. Ibarra, 1849 (reed. en Madrid, Hernando, 1934); El beso de Judas, Madrid, Imprenta Roses, 1860; Ecos Nacionales (selección), pról. de E. de Sena, Salamanca, Librería Cervantes, 1861; Obras poéticas: elegías, Madrid, Gaspar y Roig, 1862; Proverbios ejemplares, Madrid, Leocadio López, 1864; Armonías y Cantares, Madrid, Guijarro, 1965; Limones agrios: colección de cuentos, cuadros y artículos para alegrarse y sobre todo para rabiar, Madrid, A. de San Martín, 1866; La arcadia moderna: colección de églogas e idilios realistas y de epigramas, Madrid, Imprenta Rojas y Cía., 1867; La leyenda de la Noche Buena, Madrid, Biblioteca de Instrucción y Recreo, 1872; Obras Completas de Ventura Ruiz Aguilera, Madrid, Aribau, 1873-1874, 3 vols.
Bibl.: R. F. Brown, “Una relación literaria y cordial: Benito Pérez Galdós y Ventura Ruiz Aguilera”, en M. Chevalier, F. López, J. Pérez y N. Salomón (eds.), Actas del V Congreso de la Asociación Internacional de Hispanistas (Burdeos, 2-8 de septiembre de 1974), vol. I, Burdeos, Instituto de Estudios Ibéricos e Iberoamericanos-Université de Bordeaux III, 1977, págs. 345-354; S. Millar, “Galdós, Aguilera y la novela española”, en Ínsula, 395 (1979), págs. 1 y 14; J. Rubio Jiménez, “Escritura y pintura en los año sesenta”, en M. L. Ortega (ed.), Escribir en España entre 1840 y 1876, Madrid, Visor [2002], págs. 203-215.
Gregorio Torres Nebrera
