Nebreda, Jerónimo de. Covarrubias (Burgos), p. t. s. XVI – Santo Domingo de Silos (Burgos), 1580. Abad benedictino (OSB).
Se desconoce casi todo sobre este monje benedictino de Santo Domingo de Silos (Burgos), casa donde hizo su profesión, hasta su elección como abad de dicho cenobio el 18 de septiembre de 1572. Fue el primer monje de Silos que después de su incorporación a la Congregación de San Benito de Valladolid obtuvo grados en Artes, Filosofía y Teología. En el momento de su elección como abad de Silos lo era del Monasterio de San Benito de Huete (Cuenca), filial del Monasterio burgalés. Durante sus seis años de abadiato realizó varias obras de mejora del edificio monasterial, prosiguió el pleito contra los curas de la iglesia de San Pedro de Silos, obteniendo varias sentencias a su favor, y alcanzó de Felipe II una Cédula, firmada el 16 de junio de 1576, por la que ordenaba a sus oficiales favorecer a los monjes de Silos en su intento de apear los bienes que poseían en 44 lugares del reino. Esta cédula la obtuvo durante una visita a Madrid, donde estaba para tratar del pleito que con motivo de la elección de general enfrentaba al Monasterio de San Benito de Valladolid con la Congregación. Presentó incluso un memorial al Rey, pero el general fray Antonio de Sea, pro bono pacis, le mandó que dejara el asunto y volviera a Silos. En 1578 descubrió en el claustro de Silos los restos de un pretendido abad santo llamado Gonzalo, que trasladó al que habría de ser su propio sepulcro colocado en el transepto sur de la iglesia románica.
El capítulo general de la Congregación de San Benito de Valladolid le nombró visitador general en 1577. En fecha posterior a 1572 fue nombrado por el papa Gregorio XIII visitador de la Orden de Premostratenses de Portugal con la finalidad de introducir en sus casas la reforma, pero nada parece que se hiciera, porque a partir de 1570 no quedaban premostratenses en Portugal, aunque seguía pendiente el tema de sus temporalidades.
Fray Jerónimo escribió hacia 1578 un librito titulado De el Monasterio de Santo Domingo de Silos, sus principios y sucesos, conocido por el historiador dom Marius Férotin (que lo utilizó ampliamente en sus obras sobre Silos y reprodujo algunos fragmentos) a través de una copia de 1648 que en su tiempo estaba en manos de un particular, Bernardino Martín Mínguez, y que no ha podido ser hallada.
Bibl.: M. Martínez Añíbarro, Intento de un diccionario biográfico y bibliográfico de autores de la provincia de Burgos, Madrid, Imprenta y Fundación de Manuel Tello, 1889, págs. 370- 371; M. Férotin, Recueil des chartes de l’Abbaye de Silos, Paris, 1897, Imprenta Nationale, pág. XIV; Histoire de l’Abbaye de Silos, Paris, E. Leroux, 1897, págs. 160-161, 221-223 y 358- 361; J. Pérez de Urbel, Varones insignes de la Congregación de Valladolid, Pontevedra, Museo Provincial, 1967, págs. 349- 350; E. Zaragoza Pascual, Los Generales de la Congregación de San Benito de Valladolid (1568-1613), vol. V, Silos, Stvdia Silensia, 1980, págs. 82 y 92.
Miguel Carlos Vivancos Gómez, OSB
