Flores Sánchez, Juan. Pedrosa (Burgos), s. xviii – España, s. xix. Gobernador interino de Costa Rica.
Sus padres fueron José Flores y Rosa Sánchez. Casó apenas llegó a Costa Rica con Rosalía Alcalá y Guerra, hija de José Alcalá y Rosalía Guerra, vecinos de Villa Pedrosa.
Sirvió por varios años al Ejército y fue secretario de la Capitanía General de Guatemala. El 7 de marzo de 1781 fue nombrado gobernador interino por el presidente de la Audiencia, por haber muerto Juan Fernández de Bobadilla, quien ejercía el cargo interinamente por estar suspendido el gobernador José Perié.
Tomó posesión el 11 de abril de 1781, y gobernó hasta el 31 de enero de 1785, cuando tuvo que devolver el mando al gobernador titular Perié.
Durante su gobierno se arregló el camino nuevo de Esparza, se construyó un puente sobre el río Grande, se empedraron las calles de Cartago y se reedificó la parroquia de ese lugar. Asimismo, se construyeron unos baños termales en el sitio de Agua Caliente, se estableció una escuela de primeras letras y, al propagarse la lepra, el gobernador dispuso fundar una especie de lazareto o grupo de ranchos completamente aislados de la ciudad, al otro lado del río Toyogres, para recluir allí a los enfermos.
Fue durante el gobierno de Flores Sánchez, a comienzos de 1782, cuando hizo su visita pastoral a la provincia de Costa Rica el obispo de Nicaragua y Costa Rica, Esteban Lorenzo de Tristán, reconocido personaje eclesiástico de vastas cualidades intelectuales y morales, reconocido por su interés por la educación popular y la cuestión social. En su visita a Cartago, se preocupó por conocer los problemas cotidianos de la gente de escasos recursos, y entre ellos repartió gran cantidad de ropas, gesto que repitió en otras poblaciones.
Monseñor Tristán tuvo dificultades con el gobernador Flores Sánchez cuando quiso acabar con las fiestas realizadas en la casa de la congregación o cofradía de la Virgen de los Ángeles, ubicando allí una cátedra de Latín y Gramática, subvencionada por su propia cuenta.
El gobernador, molesto por la decisión, prefería que la cátedra se realizara en el convento de la Soledad, para lo cual tuvo el apoyo de los regidores, quedando a disposición nuevamente la casa de la cofradía.
Regresó a España, donde murió años más tarde.
Bibl.: R. Obregón, De nuestra historia patria: los gobernadores de la colonia, San José, Universidad de Costa Rica, 1979; G. Malavassi y P. R. Gutiérrez, Diccionario biográfico de Costa Rica, San José, Universidad Autónoma de Centroamérica, 1993.
Carmela Velázquez
