Cos Gayón y Pons, Fernando. Lérida, 27.V.1825 – Madrid, 20.XII.1898. Jurista, periodista y político.
Hijo de un brigadier del ejército, llamado Joaquín Cos-Gayón, y de Ángela Pons, concluyó su carrera en 1847, dedicándose desde entonces tanto al ejercicio de la abogacía como al periodismo. Contrajo matrimonio —en 1854, cuando contaba con veintiocho años y tras la concesión de la correspondiente licencia real— con Lucrecia Señan y Cheli, hija de Bernardo Señan, contador de Arbitrios de Amortización en Valencia y Cádiz.
Sus primeros ensayos datan de 1846 y fueron publicados en la revista de Jove y Hevia, La Primavera, dedicándose desde entonces, y por espacio de cincuenta y dos años, a escribir múltiples artículos periodísticos, siempre en periódicos de ideología moderada como El Heraldo —bajo el patrocinio del conde de San Luis—, El Occidente —dirigido por González Bravo—, La Época —dirigido por el marqués de Valdeiglesias—, y la Revista de España —en la que se encargó de la sección extranjera—. También escribió para el Semanario Pintoresco Español de Mesoneros Romanos y para La Ilustración de Fernández de la Hoz.
Uno de sus primeros trabajos fue el Cuadro sinóptico de todos los Secretarios de Estado y del Despacho y Ministros de los Reyes de España desde Fernando é Isabel hasta 1850 (1851). De la misma fecha data el trabajo por el que alcanzó gran renombre como administrativista, la Historia de la administración pública en España.
Fue promotor fiscal de Madrid (28 de octubre de 1853) en el juzgado de las afueras de la Corte, vacante por ascenso de su titular, así como de la Audiencia de Madrid y del Distrito de Barquillo, cesando en el cargo en este último el 29 de agosto de 1854. Durante ese tiempo se labró una excelente reputación como persona laboriosa y celosa del desempeño de su cargo, lo que le valió importantes cartas de elogio de sus superiores.
Oficial del Ministerio de Gobernación en 1857, pronto pasó a desempeñar los cargos de censor de Teatros y administrador y director de la Imprenta Nacional, para pasar en 1858 a la plaza de oficial del Ministerio de Fomento.
El 8 de julio de 1862 fue nombrado secretario general de la Real Casa y Patrimonio. La unión de la Secretaría de la Real Estampilla y Etiqueta y la de la Administración General de la Real Casa y Patrimonio en la llamada Secretaría General de la Mayordomía Mayor (Real Decreto de 1 de junio de 1867), supuso su nombramiento como secretario al frente de ella. El 15 de noviembre de 1867, una Real Orden le nombró abogado consultor general suplente de la Real Casa y Patrimonio, con la finalidad de sustituir a su titular en casos de ausencias o enfermedades, encargándosele específicamente, dada su condición de abogado del Ilustre Colegio de Madrid, la continuación en un pleito referente al palacio del Real Sitio de San Fernando. La nueva disposición dada a la Mayordomía Mayor hizo que cesara en el cargo de secretario general el 17 de junio de 1868, llegando a abrírsele expediente de jubilación, que fue aprobado por la Junta Consultiva de la Real Casa. De ahí que, ese 17 de junio de 1868, se le declarase jubilado con el haber que le correspondía por clasificación y tras casi doce años de servicio.
Se le concedió durante su etapa en la Casa Real (1862) la encomienda n.º 112 de la Real y Distinguida Orden de Carlos III. Poseyó además la Gran Cruz de Isabel la Católica, la de San Mauricio y San Lázaro de Italia y la de Medjidié de Turquía.
El 10 de enero de 1875 volvió a la Casa Real al ser nombrado consultor general de la Real Casa y Patrimonio con carácter interino, siendo designado el 19 de febrero de dicho año abogado consultor general de la Real Casa, cargo del que dimitió el 19 de marzo de 1880 por haber sido nombrado ministro de Hacienda. Recuperó el cargo de consultor general una vez que dejó el Ministerio (Real Decreto de 9 de febrero de 1881). Precisamente su amplia experiencia jurídica dentro de la Casa Real fue su mejor fuente para la elaboración de su importantísima y reconocida obra Historia jurídica del Patrimonio Real.
En 1875 también fue designado inspector general de las Casas de Moneda del Reino, y con posterioridad fue nombrado director general de Contribuciones, hasta que en 1876 fue adscrito a la Subsecretaría del Ministerio de Hacienda.
Aunque sus inicios ideológicos parten de la militancia en las filas del partido moderado, de la mano de Cánovas de quien era amigo personal, entró a formar parte del partido liberal conservador. Fue diputado por la provincia de Murcia —distrito de Cartagena— en las legislaturas de 1876, 1877, 1878 —ordinaria y extraordinaria— y 1879, fecha esta última en que fue nombrado vicepresidente del Congreso (1878-1880), ocupando también el Ministerio de Gracia y Justicia bajo la presidencia de Cánovas del Castillo, en 1879.
Participó activamente de las reuniones del Ateneo de Madrid, de ahí que no resulte extraño que entrara también a formar parte de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas en 1879, presentando un discurso de ingreso sobre la Importancia de la reforma penitenciaria —contestado por Manuel Alonso Martínez—.
Participó muy activamente de sus sesiones y en múltiples debates, formando, asimismo, parte de sus comisiones de Temas y de Relaciones Científicas y Literarias y de Gobierno Interior y Hacienda.
Realizó además las contestaciones a los discursos de ingreso en la misma de Cánovas del Castillo (Las últimas hipótesis de las ciencias naturales con el discurso No dan fundamentos más firmes á la sociología que las creencias, aun miradas también como hipótesis en que los estudios sociológicos han solido buscar sus cimientos hasta ahora); al del duque de Mandas (Cuales son la ley histórica y el principio filosófico á que pueden obedecer las revolucione); al de Placido Jové y Hevia, vizconde de Campo Grande (La mujer, su influencia en la moral y en la política de la sociedad); y al de Aureliano Linares Rivas (El problema social en España).
Tuvo, además, el honor de defender ante la Academia la Necrología de Cánovas del Castillo.
En 1880 fue subsecretario de Hacienda, y a la muerte del ministro de Hacienda, José García Barzanallana, marqués de Orovio, pasó a ocuparse de dicho Ministerio, desde el 19 de marzo de 1880 hasta el 8 de febrero de 1881 —fecha de la llegada del gobierno fusionista—, tras haber formado gobierno Cánovas del Castillo. De su paso por el Ministerio de Hacienda, no se puede dar cuenta de modificaciones esenciales, pues tan sólo realizó algunas alteraciones en los gravámenes y leves cambios en la administración de los impuestos. Designado por segunda vez desde el 18 de enero de 1884 hasta el 27 de noviembre de 1885, en el cuarto gobierno de Cánovas, se encargó especialmente de la reparación del déficit presupuestario. De ahí pasaría a Gracia y Justicia, cartera que ocupó de forma interina durante la ausencia de su titular desde el 9 hasta el 13 de mayo de 1884.
Por tercera vez, fue ministro de Hacienda desde el 5 de julio de 1890 hasta el 24 de noviembre de 1891 —presidiendo Cánovas del Castillo su quinto gobierno—. En esta ocasión se ocupó específicamente de sanear la economía y reparar el déficit económico grave, fruto del desajuste entre la insuficiencia de ingresos ordinarios y el exceso de gastos. De igual forma se ocupó de la crisis agraria del momento, de carácter europeo, y centrada en el cereal y en el fuerte descenso de sus precios, debido a la llegada de productos de otros países y su fácil distribución por el territorio nacional. En respuesta a esta crisis agraria, se elevaron los aranceles sobre carnes, cereales y ganado, logrando estabilizar y aumentar los precios.
Pasó esta vez como titular a Gracia y Justicia, desde el 23 de noviembre de 1891 hasta el 11 de diciembre de 1892, fecha en que dimitió del cargo, y, por último, fue designado ministro de Gobernación, desde el 24 de marzo de 1895 al 4 de octubre de 1897, en el último de los gobiernos presidido por Cánovas del Castillo.
Alfonso XIII le restituyó en su puesto de abogado consultor general de la Real Casa y Patrimonio el 19 de febrero de 1895.
Otros oficios de los que se tiene constancia fueron los de vocal de la Junta Consultiva de Moneda, vocal de la Junta de Aranceles y Valoraciones, vocal de la Comisión Liquidadora del Real Patrimonio, vocal de la Junta para la Formación del Presupuesto del Estado (1877-1878), presidente de la Junta (1879) encargada de reformar la Renta del Tabaco, y director de la Gaceta de Madrid. Por último, hay que señalar que fue titular de la cátedra de Derecho Político de España.
Obras de ~: Historia de la administracion pública de España en sus diferentes ramos de Derecho político, diplomacia, organización administrativa y Hacienda, desde la dominación romana hasta nuestros días: Seguida de un índice alfabético de libros originales [...], Madrid, José Villetti, 1851 (Madrid, Instituto de Estudios Administrativos, 1976); Cuadro sinóptico de todos los Secretarios de Estado y del Despacho y Ministros de los Reyes de España desde Fernando é Isabel hasta 1850, Madrid, 1853; con E. Cánovas del Castillo, Diccionario Manual de derecho administrativo español, Madrid, Imprenta de los Herederos de Vallejo, 1860; Crónica general del viaje de Sus Majestades y Altezas Reales á Andalucía y Murcia en septiembre y octubre de 1862, Madrid, Imprenta Nacional, 1863; Las cuentas de la Casa Real con el Estado, Madrid, Miguel Ginesta, 1873; Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas [...] en la recepción pública del Excmo. Señor Don ~ el domingo 15 de Junio de 1879, Madrid, Imprenta de Fortanet, 1879; Historia jurídica del Patrimonio Real, Madrid, 1881 (Madrid, Instituto de Estudios Administrativos, 1976); Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas en la recepción del [...] Señor D. Antonio Canovas del Castillo: [Contestación de D. ~]; Madrid, Imprenta Manuel Ginés, 1881; El déficit de ayer, el de hoy y el de mañana, Madrid, Manuel Ginés Hernández, 1882; Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas en la recepción pública del Excmo. Sr. D. Fermín de la Lasala y Collado el domingo 19 de marzo de 1882 (discurso de contestación del [...] Sr. D. ~), Madrid, Imprenta de Fortanet, 1882; Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas en la recepción pública del Excmo. Sr. D. Vizconde de Campo-Grande [contestación del Excmo. Sr. D. ~], Madrid, Imprenta Manuel Tello, 1882; Discursos pronunciados en el Congreso de los Diputados en los días 1.º, 2, 4 y 5 de Junio de 1888 por el Excmo. Sr. Don ~ impugnando el proyecto de ley de presupuestos generales del Estado de 1888-89, Madrid, Miguel Guijarro, 1888; Discursos leídos ante la [...] Academia de Ciencias Morales y Políticas: [sobre el tema: Problema Social en España], Madrid, Tipografía de Manuel G. Hernández, 1890; Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas en la recepción pública del Excmo. Sr. D. Aureliano Linares Rivas [contestación del Excmo. Sr. D. ~], Madrid, Manuel G. Hernández, 1890; Discursos pronunciados en el Congreso y en el Senado por [...] D. ~ [...] Con motivo de la discusión del proyecto de ley relativo al aumento de circulación fiduciaria y prórroga del privilegio del Banco de España. Legislatura de 1891, Madrid, Sucesores de Rivadeneyra, 1891; Discurso leído [...] en la solemne apertura de los Tribunales celebrada en 15 de Septiembre de 1892, Madrid, Imprenta de José Góngora y Álvarez, 1892; “Sobre las reformas hechas y las que son necesarias en la legislación penal española. Refutación de las nuevas doctrinas antropológicas”, en Revista General de Legislación y Jurisprudencia, 81 (1892), págs. 246-247; Necrología del Exmo. Señor D. Antonio Canovas del Castillo, leída ante la Real Academia de Ciencias morales y políticas, Madrid, Imprenta del Asilo de huérfanos del S. C. de Jesús, 1898.
Fuentes y bibl.: Archivo del Ministerio de Justicia, exp. personal, leg. 576, n.º 461, letra C; Archivo General de Palacio, Exps. personales, c. 259/20; Lista de los Sres. Socios del Ateneo Cientifico Literario y Artistico de esta Corte en 20 de marzo de 1849, Madrid, imprenta de la publicidad, a cargo de Rivadeneyra, 1849.
M. Alonso Martínez, “Contestación” en Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas [...] en la recepción pública del Excmo. Señor Don ~ el domingo 15 de Junio de 1879, op. cit; B. Moratilla, Estadística y vicisitudes de las cortes y Ministerios de España, Madrid, Imprenta y Fundición de la Viuda e hijos de J. A. Garcís, 1880; A. Linares Rivas, Necrología del Excmo. Sr. D. Fernando Cos-Gayón leída en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, Madrid, Imprenta del Asilo de Huérfanos del S. C. de Jesús, 1899; M. Fernández de la Huerta, Ministerios y ministros que hubo en España desde la revolución de septiembre de 1868 hasta la conclusión del siglo xix, Santander, Imprenta La Propaganda Católica, 1901; G. Bleiberg (dir.), Diccionario de Historia de España, Madrid, Alianza Editorial, 1979 (2.ª ed.), 3 vols.; F. Lasso Gaite, El Ministerio de Justicia. Su imagen histórica (1714-1981), Madrid, Ministerio de Justicia, 1984; A. Rull Sabater, Diccionario sucinto de Ministros de Hacienda. Siglos xix y xx, Madrid, Instituto de Estudios Fiscales-Ministerio de Economía y Hacienda, 1991; J. M. Cuenca Toribio y S. Miranda García, El poder y sus hombres. ¿Por quiénes hemos sido gobernados los españoles? (1705-1998), Madrid, Actas, 1998; J. R. de Urquijo Goitia, Gobiernos y Ministros Españoles (1808-2000), Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 2001.
María Dolores del Mar Sánchez González