Apeolaza (o Apaublaza) y Serrano, Antonio Martín de. Santiago de Chile (Chile), p. m. s. XVIII – 1780. Alcalde, corregidor, maestre de campo y minero.
Era hijo del maestre de campo Esteban de Apeolaza y Sagredo de Molina, natural de Santiago de Chile, quien fuera alférez real y procurador general de Santiago, y de su parienta María Josefa Serrano y Vallejo.
La familia Serrano era originaria de La Rioja, siendo el primero en llegar a Indias el maestre de campo José Serrano, abuelo del biografiado, quien fue alcalde ordinario de Santiago en 1708.
Se casó en primeras nupcias con María del Carmen Valenzuela y Rojas, con descendencia, y en segundas, con María de la Concepción Ureta y Mena, sin descendencia.
Sirvió como corregidor de Copiapó, en el norte de Chile por nombramiento del gobernador Domingo Ortiz de Rozas ocurrido el 29 de agosto de 1753, recibiéndose al ejercicio del cargo el 24 de septiembre de ese año, en el que duró hasta 1756. Dispuso en 1755 una visita del partido para mejor conocimiento del mismo. El descubrimiento de diversos minerales en la zona lo indujo a fundar en las proximidades de la costa del valle de Huasco la villa de Huasco Bajo y la parroquia de Santa Rosa del Huasco, lo que motivó un juicio iniciado por los indios diaguitas en 1755 en el que exigían se les respetaran sus tierras, dado que Apeolaza había dispuesto su traslado hacia el interior, al pueblo de indios de Paitanas. La fundación quedó en firme, pues los aborígenes perdieron su pleito. Entre 1756 y 1766 se extendió el juicio de residencia al respecto.
Antonio Martín fue alcalde de Santiago en 1770.
En lo tocante a milicias, ostentó el grado de maestre de campo. El inventario de sus bienes se encuentra en el Archivo de Escribanos de Santiago, vol. 897, fol. 143, correspondiente a 1780. En 1782 se formó concurso de acreedores respecto de los bienes quedados a su muerte.
Fuentes y bibl.: Archivo Nacional Real Audiencia de Chile, vol. 1352, pág. 3.ª, 179 fols., y vol. 1383, pág. 1.ª (juicio de residencia), y vol. 1785, pág. 2.ª (concurso de acreedores); Archivo Nacional de Escribanos de Santiago, vol. 576, fol. 213, y vol. 897, fol. 255; Fondo José Toribio Medina, Manuscritos, t. 185, n.º 4177.
J. T. Medina, Diccionario biográfico colonial de Chile, Santiago, Imprenta Elziviriana, 1906, pág. 78; L. de Roa y Ursúa, El Reyno de Chile, Valladolid, Talleres Tipográficos Cuesta, 1945, pág. 726, n.º 2844; F. Silva Vargas, Tierras y pueblos de indios en el reyno de Chile, Santiago, Editorial Universidad Católica, 1962, pág. 154; J. L. Espejo, Nobiliario de la capitanía general de Chile, Santiago, Editorial Andrés Bello, 1967, págs. 742-743; C. M. Sayago, Historia de Copiapó, Buenos Aires- Santiago, Editorial Francisco de Aguirre, 1973; H. R. Ramírez Rivera, “Prólogo” a Colección de Historiadores de Chile y de documentos relativos a la historia nacional, t. 55, Actas del Cabildo de Santiago, t. 32, Santiago, Ograma, 1983, págs. li, lxi-lxiv ; Colección de Historiadores de Chile y de documentos relativos a la historia nacional, t. 56, Actas del Cabildo de Santiago, t. 33, Santiago, Ograma, 1987, pág. Xlvi ; A. Dougnac Rodríguez, Esquema del Derecho de Familia indiano, Santiago, Ediciones del Instituto de Historia del Derecho Indiano Juan de Solórzano y Pereyra, 2003, n.º 84, pág. 50.
Antonio Dougnac Rodríguez
