Oidor y fiscal de la Audiencia de Chile, protector general de indios y corregidor de Concepción.

Nacido en La Plata, Alto Perú, hacia 1667, era hijo del doctor José del Corral Calvo de la Banda, catedrático de la Universidad de Salamanca y oidor de las Audiencias de Santa Fe y Lima, y de Francisca Antonia de la Torre y Zegarra. Inició sus estudios en el Colegio Mayor de San Felipe y San Marcos, en Lima, y cursó dos años en Salamanca. Recibido como abogado en la Audiencia de Lima el 10 de abril de 1690, pasó ese año a Salamanca por asuntos de familia, y allí se opuso a algunas cátedras de leyes. Después de permanecer durante dos años en esa ciudad y otros tantos en la Corte pretendiendo un cargo, y tras fracasar en su empeño de catorce meses por obtener por méritos la fiscalía de la Audiencia de Panamá, que estaba vacante, ofreció ocho mil pesos por el puesto de oidor futurario de la Audiencia de Chile, por lo que se le extendió el título respectivo el 26 de junio de 1695. Llegó a Santiago en febrero de 1697. Desde junio se desempeñó como protector general de indios, labor que cumplió durante casi diez años, hasta ser separado por el gobernador Francisco Ibáñez de Peralta en 1707. En el desempeño de estas funciones propugnó la reducción definitiva de los aborígenes en las estancias de sus encomenderos, política que puso en práctica el gobernador Tomás Marín de Poveda, no obstante ser contraria a leyes expresas. [...]