González Güemes de la Mora, Pedro. Valladolid, c. 1595 – Lima (Perú), XI.1669. Oidor en Indias.
Hijo legítimo de Pedro Güemes de la Mora, que servía en el Consejo de Guerra y en el de Órdenes, y de Francisca Ruiz de Artalejos y Miranda, naturales de las montañas de Cantabria. Representaba al Consejo de Indias en el extracto de su relación de méritos que: “Sus abuelos sirvieron en diferentes ocasiones de la guerra en las costas de Santander y Laredo, y que su padre ha treinta años que sirve la mayor parte del en los negocios graves del Consejo de Guerra y los restantes en el de Ordenes”.
Desde 1613 asistió a la Universidad de Salamanca, en la que se graduó de bachiller en ambos Derechos, y de licenciado y doctor en Cánones por la de Osma en 1626. Ingresó al colegio de Osma en 1627, donde fue lector y llegó a ser rector. En la Universidad de Osma llevó por oposición las cátedras de Instituta, Decreto, Vísperas y Prima de Cánones y regentó en propiedad la de Prima desde 1629. Fue examinador en los grados de licenciado y doctor por cuatro años, y durante tres se desempeñó como asesor de la jurisdicción de Osma.
El 22 de julio de 1631 la iglesia de Burgos, en sede vacante, le despachó colación de un beneficio de media ración y canonjía de la iglesia de Santa Cruz de Castañeda, de la que tomó posesión el 26 de julio del mismo año. En 1633 fue nombrado oidor de la Real Audiencia de Santiago de Chile, plaza de la que se le extendió título el 28 de febrero de 1634. Se le encomendó, a la vez, que a su paso por Tierra Firme averiguara la conducta y proceder del licenciado Jerónimo Ortiz de Zapata, visitador de la Real Audiencia de Panamá, encargo en el que se detuvo algo más de seis meses, por lo cual sólo tomó posesión de su oficio en Santiago de Chile el 16 de mayo de 1635.
A los tres años de haber llegado al reino, contrajo matrimonio con Clara de Jaraquemada Solórzano del Hoyo y Silva, natural de Santiago de Chile, quien le aportó una dote tasada en 40.000 pesos de a 8 reales.
Este matrimonio dio origen a un proceso por el que se le acusó de no contar con la licencia real para haberlo contraído, condenándole, en 1639, a una multa de 2.000 pesos y a que saliera de la ciudad de Santiago, y aunque su suegra, previo servicio pecuniario de 2.700 ducados, obtuvo la licencia real el Consejo de Indias, mantuvo su condena por sentencias de vista y revista, dadas en 1646 y 1647.
El Consejo, aparte de confirmar su condena en 1647, le ordenó que pasara a servir una plaza de oidor en la Real Audiencia de Santafé del Nuevo Reino de Granada, donde publicó un Memorial para vindicar su conducta.
Por Real Provisión fechada en Madrid el 20 de junio de 1661 se le extendió título de una plaza supernumeraria de oidor en el tribunal de Lima si no la había vacante, y se dirigió de inmediato a la capital del virreinato, donde permaneció hasta su muerte.
Obras de ~: Defensas de un ministro afligido, al Rey nuestro señor. Por el doctor Don Pedro Gonçalez de Guemes, Oydor del Nuevo Reyno de Granada. Año de mil y sesiscietos cincuenta y tres, Santa Fe, 1653.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias (Sevilla), Chile, 1, 223; Indiferente General, 1.846A; Lima, 790; Archivo Nacional Histórico de Chile, Fondos Varios, 300; Real Audiencia, 1.689, 3.136.
J. M.ª Vergara y Vergara, Historia de la literatura en Nueva Granada, Bogotá, Imprenta Echeverría Hermanos, 1867, pág. 115; J. T. Medina, Biblioteca Hispanochilena (1523- 1817), vol. I, Santiago de Chile, Imprenta Elzeviriana, 1898, págs. 486-487; A. de Silva y Molina, “Oidores de la Real Audiencia de Santiago de Chile durante el siglo xvii”, en Anales de la Universidad de Chile, CXIII (1903), págs. 39-40; J. T. Medina, Diccionario biográfico colonial, Santiago de Chile, Imprenta Elzeviriana, 1906, pág. 372; J. L. Espejo, Nobiliario de la Antigua Capitanía General de Chile, vol. I, Santiago de Chile, Imprenta Universitaria, 1917, pág. 144; G. Lohmann Villena, Los ministros de la Audiencia de Lima en el reinado de los Borbones (1700-1821), Sevilla, Escuela de Estudios Hispano-Americanos, 1974, págs. 171-172; M. Luque Talaván, Un universo de opiniones. La literatura jurídica indiana, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 2003, pág. 430.
Javier Barrientos Grandon
