López de Letona Apoita, Santos. Ceánuri (Vizcaya), 1842 – 1925. Indiano, empresario y benefactor.
Nació en el municipio vizcaíno de Ceánuri en el seno de una familia humilde. En principio, trabajó en un comercio textil en Vitoria, pero en 1862 emigró a América. Primero recaló en Cuba y poco después se instaló en Puebla de los Ángeles (México), donde se dedicó a actividades textiles con las que consiguió hacer fortuna llegando a poseer varias fábricas de ese ramo, así como tres casas comerciales y dos haciendas. En la ciudad azteca contrajo matrimonio con Josefina Gómez de Rueda, descendiente de españoles, y allí nacieron los primeros vástagos de la pareja. En 1888, dejó los negocios a cargo de su yerno Santiago Arechaga y posteriormente de sus hijos y regresó a España. Se instaló en Bilbao, donde adquirió la que hasta entonces había sido residencia y estudio del arquitecto Julio Saracíbar, para convertirla en su domicilio. Seguidamente reformó este edificio, según diseño del mismo arquitecto, realizado en 1888.
Una vez establecido en la capital vizcaína, López de Letona invirtió en la compra de terrenos y en la promoción inmobiliaria, con la adquisición de varios solares en el ensanche de Bilbao, que por entonces empezaba a ser ocupado especialmente por casas de vecindad, muchas de las cuales eran construidas con la intención de destinarlas al alquiler. En esta última faceta destacó sobremanera, ya que promovió un total de quince inmuebles. Asimismo, fue primer accionista y figura decisiva de la Martín Alberto de Palacio y Compañía, sociedad impulsora de la construcción del Puente de Vizcaya, primer puente transbordador construido en el mundo, que une los municipios de Portugalete y Guecho, proyectado por el arquitecto Alberto Palacio. Los negocios textiles, que habían sido el origen de su fortuna, también fueron objeto de su inversión en territorio vizcaíno, ya que en 1892 fue uno de los socios fundadores de la fábrica de boinas La Encartada en Balmaseda y en 1897 creó La Josefina en Galdácano. Más tarde, fue consejero del Banco de Comercio y, tras la fusión de este último con el Banco de Bilbao, también lo fue esta entidad. Igualmente invirtió en el sector del ferrocarril, caso del Ferrocarril Hullero de La Robla a Balmaseda, y en el eléctrico, siendo consejero de la Cooperativa Eléctrica. Por otro lado, también fue copropietario de algunas minas de hierro.
Pese a residir en España, continuó sus actividades empresariales en México, donde fundó dos bancos: el Banco Oriental de México, S.A., y el Banco Español Refaccionario, en 1900 y 1911, respectivamente. De acuerdo con una costumbre muy extendida entre los indianos, en numerosas ocasiones López de Letona actuó como benefactor de la localidad natal de Ceánuri con constantes ayudas a la iglesia parroquial de Santa María, edificación de la iglesia auxiliar de San Isidoro, aportación para la construcción del cementerio municipal, etc. En reconocimiento a estas donaciones en 1912 fue nombrado Hijo Predilecto del municipio. Fallecido en 1925, sus restos reposan en el panteón familiar del camposanto de Ceánuri.
Bibl.: J. L. López García, “Bizkaia textil. Un paseo por su industria desconocida”, en VV. AA., La Encartada S. A. Fábrica de Boinas, Bilbao, Diputación Foral de Vizcaya, 1991, págs. 17-25; A. Santana Ezquerra, “Puente Vizcaya 1893- 1993. La construcción de una leyenda”, en VV. AA., Cien años del Puente Bizkaia, Bilbao, Diputación Foral de Vizcaya, 1993, págs. 11-38; M. Paliza Monduate, “Los indianos y la construcción del Ensanche de Bilbao”, en Kobie. Serie Antropología Cultural, X (2001-2002-2003), págs. 205-224; B. E. Santibáñez, “López de Letona: una familia vizcaína de empresarios porfirianos”, en A. Grajales y L. Illades, Presencia española en Puebla. Siglos xvi-xx, México, Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades-Embajada de España en México, 2002, págs. 179-190; M. Paliza Monduate, “La arquitectura indiana en el País Vasco. Precisiones, particularidades y constantes”, en Boletín del Museo Camón Aznar, XCIX (2007), págs. 405-480.
Maite Paliza Monduate
