Román Arroyo, José María. Salamanca, 19.XI.1914 – Madrid, 5.III.1989. Doctor en Química, ingeniero aeronáutico, catedrático.
Sus padres fueron Emilio Román Retuerto y Abilia Arroyo Pascual. Su infancia y juventud transcurrieron en Madrid. En 1932 se matriculó en la Universidad de San Bernardo (Madrid), para estudiar Ciencias Químicas.
Al estallar la Guerra Civil en julio de 1936 se presentó a las fuerzas “nacionales” e ingresó como soldado voluntario siendo destinado al Regimiento de Infantería de “La Victoria” n.º 26. Hasta septiembre del mismo año en que pasó destinado a la Comandancia de Ingenieros de Salamanca, a la Estación de Radio y Puesto Central Antiaeronáutico hasta fin de marzo de 1937.
El 29 de abril de 1937 fue nombrado alférez provisional de Aviación por Orden Comunicada de 29 de abril de 1937. En el mismo año, con fecha de 27 de julio, le concedieron la categoría de alférez de complemento de Aviación y finalmente, el 29 de abril de 1938, fue nombrado teniente provisional de Aviación.
El 5 de marzo de 1937, ingresó como alumno en las Escuelas de Oficiales de Aeródromos, para realizar el curso correspondiente. Terminó a finales de mayo de 1937 y fue destinado a la Región Aérea del Centro.
En enero de 1938 fue destinado a la Sección de Guerra Química de la Jefatura del Aire, a la Región Aérea del Sur hasta fin de agosto de 1938 y en la Región Aérea de levante hasta fin de octubre de 1938, cuando cambió su destino a la Región Aérea de Centro hasta junio de 1939. Ese año ingresó en la Academia Militar de Ingenieros Aeronáuticos (AMIA) y fue nombrado capitán por Orden de 23 de marzo de 1943. En el año 1946 adquirió por antigüedad la categoría de comandante del Cuerpo de Ingenieros Aeronáuticos.
Fue destinado a la 2.ª Región Aérea hasta marzo de 1940, quedando en situación de “disponible” hasta fin de marzo de 1941. Solicitó el ingreso en la Academia Militar de Ingenieros Aeronáuticos, donde atendió dos cursos académicos para titularse ingeniero aeronáutico en marzo de 1943.
Desde 1943 hasta 1948, en situación “supernumerario”, prestó sus servicios en la empresa Construcciones Aeronáuticas, S.A., en las factorías de Sevilla y Getafe-Madrid. En 1950 fue nombrado catedrático de Química y Materiales no Metálicos en la AMIA.
En 1961, era titular de la Cátedra Química Aplicada, en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Aeronáuticos (ETSIA) y tenía el número 103 en el escalafón correspondiente.
Desde 1947 a 1951 fue subdirector de la Factoría CASA (Construcciones Aeronáuticas, Sociedad Anónima) de Getafe (Madrid). Y desde 1951 a 1965 director de la misma factoría. A finales de 1965 fue nombrado director de fabricación de la mencionada factoría, atendiendo las dos direcciones. En 1948 las Oficinas Centrales de CASA se ubicaron en la calle Rey Francisco, n.º 4, donde tenía también un despacho.
Durante su larga y próspera estancia en CASA, participó en la fabricación con licencia alemana de los ciento setenta aviones Junkers 52, resolviendo con gran profesionalidad y decisión los problemas que planteaba la construcción de dichos aviones sin el debido apoyo técnico de la industria alemana, inactiva después de la Segunda Guerra Mundial. Al iniciarse la fabricación de los aeroplanos españoles de CASA, C-201, C-202 y C-207 fue un gran impulsor de la industria aeronáutica y durante sus años de director asistió al renacer de una industria aeronáutica plagada de problemas industriales, debido a la estructuración de las instituciones y la autarquía que imponía el Gobierno. Desde 1954 a 1969 se construyeron cientos de aviones y como consecuencia de los convenios de Ayuda Mutua con Estados Unidos consiguió montar una cadena de revisión de aviones americanos, en competencia con otros países. Durante el período 1954 a 1969 se revisaron unos dos mil aviones americanos, lo que sirvió para acceder a técnicas modernas y elevar el nivel de fabricación y calidad de la industria.
En 1952 efectuó el curso para el ascenso a comandante, que duró desde el 20 de septiembre hasta el 6 de diciembre. A partir de 1954 solicitó y le concedieron la situación de “supernumerario” y así permaneció hasta febrero de 1968 y posteriormente en grupos de destinos de carácter militar (servicios especiales) hasta noviembre de 1978. En 1954, el 3 de noviembre fue ascendido a la categoría de teniente coronel y en 1969 a coronel.
En 1963 acompañó al presidente de CASA, Ortiz de Echagüe, a Los Ángeles (Estados Unidos), visitando la factoría Northrop, constructora de los aviones F-5, que posteriormente se fabricaron en CASA, merced a una gestión comercial impecable con Northrop y el Ejercito del Aire, consiguiendo un contrato de fabricación de setenta aviones el 20 de diciembre de 1965. La tecnología de fabricación de los aviones, consiguió poner a CASA, en una situación ideal para poder competir con otras industrias europeas y americanas.
Un hito importante fue negociar y adquirir la patente de fabricación para España, Portugal y Marruecos de los aviones F-5.
Debido a las crisis de la industria aeronáutica española, comentadas en la historia de ATECMA (Asociación Técnica Española de Constructores de Material Aeronáutico), Román Arroyo, como director de CASA, se encontró sin pedidos de la industria aeronáutica española, pero, sin dudarlo, acudió a poner en marcha programas no aeronáuticos, con compañías como Seat, Vespa, Motor Ibérica, Talgo, Santana y Perkins, entre otras, consiguiendo mantener a flote la industria para el futuro. Cuando abandonó la dirección de CASA ésta contaba con cuatro mil empleados.
A finales de 1978 pasó a la situación de retirado, después de prestar servicios durante cuarenta y dos años, cuatro meses y trece días.
Falleció en Madrid el 5 de marzo de 1989.
Obras de ~: Química Aplicada, Madrid, Dorsal, 1968; Tres Escuelas y veinte promociones de Ingenieros Aeronáuticos, Madrid, ETSIA y COIAE, 1993; Química de los materiales para la Ingeniería Aeronáutica, Madrid, ETSIA, 1985 y 1998; Los primeros 75 years. Historia, Madrid, CASA SEPI, 1998 (Barcelona, Lunwerg, 1998).
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico del Ejército del Aire (Villaviciosa de Odón, Madrid), Exp. personal.
A. González-Betes, Historia Gráfica de la aviación Española, Madrid, COIAE, 1998; A. González-Betes y J. Rodríguez- Carmona, ATECMA, Su Historia. 1954-2006, Madrid, ATECMA, 2006.
Antonio González-Betes
