Vaamonde Valencia, José Lino. Alongos (Orense), 20.IV.1900 – Caracas (Venezuela), 3.X.1986. Arquitecto.
Nacido en una acomodada familia gallega —nieto del conde de la Torre de Penela— cursó bachillerato en Orense. Entre 1917 y 1921 estudió Matemáticas en la Universidad Central de Madrid y el primer curso de Arquitectura en la Escuela Superior de Barcelona, carrera que continuó en la Escuela de Arquitectura de Madrid, donde obtuvo el título en 1927. Compaginó los estudios con su trabajo en el Cuerpo de Telégrafos desde 1920, así como, durante 1926, con el cargo de secretario del Real Madrid F. C. En 1934 recibió los títulos de arquitecto sanitario y aparejador.
Los primeros años de ejercicio profesional participó en la construcción del Metro de Madrid (1927) y del ferrocarril Orense-Santiago (1929), dedicándose desde entonces al urbanismo. Trabajó para Secundino Zuazo en los planes de Reforma Interior y Ensanche de Madrid, Ensanche de Zaragoza y Plan Comarcal de Madrid. Ejerció, asimismo, como arquitecto en la sección de Catastro Urbano del Ministerio de Hacienda entre 1930 y 1934, y en el Ayuntamiento de Canillas (Madrid) desde 1933. Contrajo matrimonio con Flora Horcada en mayo de 1934, año en que su proyecto para poblados en zonas regables —presentado a concurso del Ministerio de Obras Públicas en colaboración con Pérez Mínguez y J. Ortiz— logró mención especial del jurado. En 1935 fue nombrado vocal técnico del Patronato de Política Social Inmobiliaria, y premiado por su estudio Algunas aportaciones al estudio de la Vivienda Rural española; al año siguiente se distinguió con la 1.ª Medalla en la Exposición de Bellas Artes de Córdoba (Sección Construcción) con el proyecto Vivienda Mínima para Obreros. De modo simultáneo, Vaamonde jugó un destacado papel tanto en la creación de los Colegios de Arquitectos y redacción de sus estatutos fundacionales, como en los cargos, obtenidos por elección, que desempeñó: secretario de la Sociedad Central de Arquitectos los años 1929 a 1931, miembro fundador y secretario del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid desde 1931 a 1934, así como fundador y secretario general del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España entre 1932 y 1934.
Miembro de Izquierda Republicana desde 1935, y próximo a Azaña, durante la Guerra de 1936-1939 desarrolló una intensa actividad para la protección institucional del Tesoro Artístico español. En octubre de 1936, fue nombrado arquitecto conservador del Museo del Prado, y vocal arquitecto de la Junta Central del Tesoro Artístico tres meses después. Como tal, dispuso medidas para la protección del Museo, y se responsabilizó de uno de los aspectos cruciales de la vasta operación de traslado de obras maestras a Valencia: su recepción y adecuada conservación en dicha ciudad. Para ello, acondicionó como depósitos las Torres de Serranos y la iglesia del Colegio del Patriarca, mediante el refuerzo de las estructuras originales y el control de las condiciones ambientales y ventilación, destacando el novedoso y ejemplar carácter de estos proyectos. Asimismo intervino como comisario general adjunto del Pabellón Español en la Exposición Internacional de París de 1937 y, desde comienzos de 1938, como secretario general de Propaganda, cargos desde los que impulsó la edición por la Junta del Tesoro Artístico de folletos en diferentes idiomas sobre esta temática. A finales de ese año Vaamonde sufrió accidentalmente la fractura de ambas piernas; trasladado a París, fue nombrado delegado del Comité Nacional de Ayuda a la España Republicana en sustitución de Victoria Kent.
Acabada la Guerra permaneció en París, trabajando como vocal de dicho Comité, hasta su partida al exilio pocos meses después. Su compromiso y rectitud fueron reconocidos con la Medalla a la Lealtad, concedida en 1961 por el Gobierno Republicano en el exilio. En España, la Comisión de Depuración de arquitectos —aprobada en julio de 1939— resolvió en 1942 sancionarlo con inhabilitación perpetua para el ejercicio de la profesión en cargos públicos, y por treinta años para el ejercicio privado de la misma. Estas sanciones fueron anuladas en sendas Juntas de Gobierno del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid y del Consejo Superior de Arquitectos de España en 2003 y 2004. En acto de simbólico desagravio, Vaamonde recibió en 1974 la Medalla de la Directiva Fundadora del COAM.
Su primer y transitorio destino en el exilio fue Cuba —travesía Le Havre-Nueva York en el trasatlántico Normandía, Nueva York-Cuba en el barco Siboney— seguido de Venezuela, donde se instaló en noviembre de 1939 con su esposa y único hijo, nacido en 1937. Después de una inicial ocupación como vendedor de libros a domicilio, estableció el Bar-Restaurante —Café Madrid en la plaza de Bolívar de la ciudad de Valencia. En 1946 ingresó como arquitecto en la compañía Shell Caribean Petroleum Cº, en la que pronto fue nombrado jefe de la Sección de Arquitectura.
Proyectó numerosas urbanizaciones, centros de educación, clubes sociales, gasolineras y oficinas para los campos petroleros de la Shell, caracterizados por un criterio racionalista y de adecuación al entorno.
Nacionalizado venezolano en noviembre de 1952, continuó ligado a España, a donde retornó en viajes realizados los años 1963, 1969 y 1973. Meses antes de su última visita —prolongada hasta 1975 a causa de una enfermedad— editó en Caracas el libro Salvamento y Protección del Tesoro Artístico Español durante la guerra, 1936-1939, con el apoyo de su familia y de Justino Azcárate. La publicación, exenta de personalismos, rememora los trascendentales hechos vividos y logros alcanzados por el competente equipo que intervino en ellos. Logros que finalmente constituyeron su principal satisfacción personal, junto al impulso dado a la creación de los Colegios de Arquitectos en España y en Venezuela.
Obras de ~: Revisión Término Municipal, Vallecas (Madrid), 1933; con I. Soriano-Montagut, Monumento a D. G. Izcara, Madrid, 1933; Poblados agrícolas, Sevilla y Córdoba, 1934; Urbanización La Moraleja, Madrid, 1934-1936; Depósitos para el Tesoro Artístico en Torres de Serranos e iglesia del Colegio del Patriarca, Valencia, 1937; con J. Yarnoz y J. Ortiz, Hotel, restaurante, cafetería, bar Hollywood, Caracas, 1941; Apartamentos Santa Rosalía, Caracas, 1944; con J. Yarnoz y J. Ortiz, Edificio comercial Lorenzo Bustillos, Caracas, 1948; con J. Yarnoz y J. Ortiz, Mansión López, San Bernardino, Caracas, 1950; Servicio Shell para el agricultor, Cagua, 1953; Apartamentos El Peque, San Bernardino, Caracas, 1953; Centro de Entrenamiento Artesanal, Cabimas, 1955; Auditorio La Concepción, La Concepción, 1955; Club La Rosa, Cabimas, 1955; Obras depósitos de combustibles Las Cantinas, Caracas, 1955; Club Mene Grande, Mene Grande, 1956; Edificio Shell, Maracaibo, 1956; Club Shell, Maracaibo, 1957; con C. Gramcko y A. Otero, Super-Estación de Servicio Las Mercedes, Caracas, 1957; Super- Estación de Servicio Blandín, Caracas, 1959; Edificio de oficinas Refinería Cardón, Cardón, 1959; Urbanización Puertos de Altagracia Edo, Zulia, 1959; Terminal Norte Edo, Zulia, 1959; Club Manaure, Cardón, 1960; con E. Beauveser, E. Robles y A. Padilla, Motel Cardón, Cardón, 1961; con D. Carbonell y M. Salvador Díaz, Edificio Shell, Caracas, 1961.
Escritos: La Arquitectura, función social, Madrid, 1928; Algunas aportaciones al estudio de la Vivienda Rural española, Madrid, 1935; “Protección de los tesoros artísticos”, en Carabobo, n.º 5 (1944), págs. 15-18; “El Tesoro Artístico español y su odisea”, en El Nacional, 22 de diciembre de 1953, pág. 48; Salvamento y Protección del Tesoro Artístico Español durante la guerra, 1936-1939, Caracas, Imprenta Cromotip, 1973; “Objetivo: Museo del Prado”, en Historia 16, n.º 7 (1976), págs. 51-54.
Bibl.: “Concurso de anteproyectos para la construcción de poblados en las zonas regables del Guadalquivir y el Guadamellato”, en Arquitectura, n.º 10 (1934); C. Lamache, “Salvamento y protección del Tesoro Artístico español”, en El Nacional (Caracas), 1947; “Motel en Cardón, Venezuela”, en Informes de la Construcción, n.º 141 (1962); “Edificio Shell, Caracas”, en Informes de la Construcción, n.º 144 (1962); M. Vestrini, “Las revelaciones del arquitecto José Lino Vaamonde”, en El Nacional, (Caracas), 1973; I. Fontes, “Recuerdos para después de una guerra”, en Cambio 16, n.º 161 (1974), págs. 52-53; A. Sáenz de La Calzada, “La arquitectura en el exilio”, en El exilio español de 1939, vol. V, Madrid, Taurus, 1978, págs. 59-89; J. Vaamonde Horcada, Datos biográficos de J. L. Vaamonde, 2002 (inéd.); I. Argerich y J. Ara, Arte protegido: Memoria de la Junta del Tesoro Artístico durante la guerra civil, Madrid, Museo Nacional del Prado-Instituto del Patrimonio Histórico Español, 2003; H. V. Garrido, “De Venezuela: La ficticia “ilusión” del destierro”, en Arquitecturas Desplazadas. Arquitecturas del exilio español, Madrid, Ministerio de Vivienda, 2007, págs. 53-74.
Isabel Argerich Fernández