Pérez, Jerónimo. Valencia, f. s. XV – Gandía (Valencia), ?.XII.1549. Mercedario descalzo (OMD), doctor en Teología, catedrático de los primeros jesuitas en Gandía y general de la Orden.
Los primeros jesuitas le contrataron para adoctrinarles en Teología, tal era su renombre entonces.
Entre sus discípulos sobresale san Francisco de Borja. Nació en Valencia, como él mismo señala en las portadas de sus libros llamándose “valentino”, e ingresó en el Convento de la Merced de su ciudad natal. Aunque suele decirse que estudió en Salamanca, no se puede documentar. Lo más probable es que estudiase Filosofía y Teología en la Universidad de Valencia, de la que asevera G. Vázquez que “aunque nueva, tenía buenos maestros y producía excelentes discípulos”. Debió de empezar su carrera profesoral muy joven, pues afirma que en 1548 hacía treinta años que leía públicamente (Comentaría expositio, fol. 5). Dentro de la Merced aparece por vez primera en el capítulo general de Barcelona en 1523, el primero que celebró el reverendísimo padre Zafont, en el que se nombraron redentores el comendador de Pamplona, fray Martín de Labayan, bachiller en Teología; fray Jerónimo Pérez, maestro en Teología, comendador de Tolosa y provincial de Francia. Fue señalada la ciudad de Túnez para llevar a cabo la redención, pero no pudiendo hacerlo inmediatamente, el tiempo se dejó a discreción del maestro general y de los que tenían el libro de redenciones y la bolsa del dinero.
Realizaron, de hecho, la redención entre 1525 y 1526, y obtuvieron permiso para ir a Roma a ganar el jubileo del Año Santo. Clemente VII les concedió una bula muy favorable para la redención, enumerando en ella las gracias otorgadas por sus predecesores, y las confirmó, reduciendo la limosna que debía darse para ganarlas. Gracias a este documento, se sabe que les acompañaba en la redención el maestro fray Agustín Molinar, comendador de Zaragoza, y el padre fray Domingo Clavería, comendador de Gerona, en lugar de los comendadores de Pamplona y de Tolosa, a pesar de haber sido nombrados en capítulo, como se ha señalado. El padre Clavería era doctor y catedrático de París, y confesor de la reina de Navarra.
De Roma se dirigieron los tres redentores a Sicilia, y desde allí pasaron a Túnez: redimieron doscientos treinta y cuatro cautivos. Desembarcaron en Trápani y se dirigieron luego a Palermo. De hecho, no llegaron a España hasta febrero de 1527, y el 18 entraron solemnemente en Valencia.
El maestro Pérez desempeñó su Cátedra de Vísperas en Teología. Y en el capítulo general de Zaragoza (1536) fue nombrado comendador de Valencia. Antes tenía esta encomienda vitalicia el padre maestro fray Luis Boyl. Y en el capítulo general de 1544 aparece ya como provincial y definidor, firmando las Actas.
Recibió del general el padre Jerónimo Pérez 70 libras valencianas, para completar los gastos capitulares, y 490 “ducados” para que él y el maestro fray Dimas Sanz los colocasen en la “Taula” de Valencia hasta la próxima redención. En el capítulo general de Gerona (1546) se cita como conventual de Valencia —que tenía dieciocho religiosos—, con los títulos de maestro en Teología y provincial. Fue nombrado asimismo vicario general de toda la Orden.
Como se ha señalado, su mayor gloria fue la enseñanza universitaria. Llegaron a Valencia los primeros jesuitas en 1544, y el padre J. Miró escribió el 4 de agosto de 1544 a san Ignacio de Loyola: “Ay un doctor que se llama Peris [sic], que lee también en liçión de Santo Tomás. No sé si alguno otro particular lee también, pero estos dos doctores son muy seyalados [sic] y de mucho tiempo ha que leen” (Monumenta Histórica S.J., t. 12, pág. 177). Cuando abrieron Colegio- Universidad en Gandía, se llevaron consigo al mercedario, nombrando el duque —san Francisco de Borja— como patrón “al muy Rvdo. P. Hyerónimo Pérez, comendador del Monasterio de la Merced de Valencia y vicario general de su orden, doctor en Teología, por lector de la misma Facultad” (Monumenta, t. 14, pág. 103). Aparece varias veces, siempre elogiado por los primeros superiores de la Compañía de Jesús. Para Filosofía eligieron al padre maestro Tárraga, asimismo mercedario, que había hecho una obra poética, en exámetros, al padre maestro Jerónimo Pérez, impresa en Valencia por Juan Mey en 1548, dedicada al padre maestro general fray Miguel Puig.
Pasó sus últimos años el maestro J. Pérez entre los jesuitas, que le admiraban y querían. En la fiesta de la Encarnación de 1549 profesaron los padres Oviedo y Mirón, y les predicó Jerónimo Pérez. Siguió siendo su catedrático preferido. Murió este personaje en diciembre de 1549, dado que en las citadas actas de los capítulos generales se anota que falleció en 1549; y a 3 de enero de 1550, escribía san Francisco de Borja al padre Araoz: “Mestre Pérez dexó la cátedra terrenal; que el Señor le dé la celestial”.
Francisco de Zurbarán lo inmortalizó en la “Galería de Doctores Mercedarios”, para la Merced de Sevilla.
Actualmente se hallan en la Academia de San Fernando de Madrid. Se trata de un retrato “imaginario”, dado que no pudo conocerlo el pintor.
Acerca de su Teología, preparó el camino a Molina: en la “ciencia media y en la predestinación ante preavisa merita”. Molina conocía bien los textos de Pérez y los cita en una Apología presentada a la Inquisición (Madrid, AHN: Inquisición, 4.437).
Obras de ~: Monotium Reverendi Fratris Hieronymi Perez Valentini Sacri Ordinis militaris Sanctae Marie de Mercede, Redemptionis Captivorum: Artium et Theologiae Doctoris exercitatissimi, Neapoli, per M. Evangelistam Papiensem, 1525; Perla preciosísima que asegura y repara la vida cristiana, Toledo, 1525; Del valor de las Indulgencias, contra Lucero, Valencia, año 1530; Comentaría Expositio reverendi patris hieronymi Perez Valentino totius sacri ac militaris ordinis santae Mariae de mercede Redemptionis captivorum vicarii generalis, super primam partem Summae S. Thomas Aquinatis, quantum ad ea quae concernunt primum librum Sententiarum, Valentiae, Typis Joannis Mey Flandri, 1548; In Primam secundae Divi Thomas Comentaría, Valentiae, 1548; Sermón en la Profesión Solemne de [...] los Padres Andrés de Oviedo, y Diego Miron, SI (predicado en Gandía el día de la Encarnación de 1549); Obras Teológicas del P. Jerónimo Pérez, † 1549, Mercedario, vol. I: Monoctium, Utrum haec propositio “Christus in quantum homo est filius Dei naturalis” sit haeretica, ed., introd. y notas por el P. Vicente Muñoz Delgado, OdeM, Vigo, Colección Revista Estudios, 1962; De Inmaculada Conceptione Deiparae (desapar.); Super secundum Sententiarum Durando (ms. desapar.); Cuestiones de Filosofía, s. l., s. f. (desapar.).
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Nacional, Inquisición, leg. 4437; A. A. Hardá, y copia de Arques, ms., “Pérez 1”, fols. 452r.-453v. (en Biblioteca Ordinias B. Mariae de Mercede).
A. Pérez Goyena, “La Teología entre los Mercedarios españolers”, en Razón y Fe, 154, 53 (1919), págs. 72-73; G. Vázquez, “El Maestro Fray Jerónimo Pérez, Catedrático de los primeros Jesuitas en Gandía, † en 1549”, en La Merced, octubre de 1925, págs. 848-855; V. Muñoz Delgado, Obras teológicas del P. Jerónimo Pérez, I, Vigo, Col. Monasterio de Poyo, 1962; R. Sanlés, “Pérez, Jerónimo”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia Eclesiástica de España, vol. III, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1973, pág. 1962.
Luis Vázquez Fernández, OdeM